Capítulo 14

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Lauren

Literalmente, me sentía muerta.

Mi corazón se había acelerado demasiado, aún siento las lagrimas recorrer mis mejillas.
Y la pregunta que me hago es, ¿Por qué no la seguí?

Debí ir tras mi mejor amiga cuando la vi tan rara y enojada antes de besuquearme con Erick.

Me siento mal, desde pequeñas nos complementamos.

Ella creaba problemas y yo los resolvía, aunque últimamente eso no está saliendo bien...y los planes se van por el caño.

Coloqué mi cabeza en el hombro de Erick mientras esperábamos que Bella llegara con los sandwiches.

—Todo estará bien—murmuró Erick besando mi coronilla.

—No lo creo—susurre

—Acabamos de entrar y la viste...ella está bien, solo necesitamos saber quién hizo esto—habló apegándome aún más a el.

—Está rara—murmuró Thomas quien estaba a nuestro lado.

—No lo sé...será porque tal vez le dieron una paliza—dijo Erick con un tono lleno de sarcasmo.

—Me refiero en otro sentido—continuó

Asentimos y dejamos el tema así dispuestos a comer los sándwiches que llegaron en manos de Bella.

Comenzamos a devorar la comida hasta que Bella habló.

—Le informaron a los padres de Caitlin...un familiar vendrá a ver cómo se encuentra—informó tomando refresco.

Mi mente divagó a aquella persona que Caitlin no amaba demasiado y era su familiar....por favor, que no traigan a su Prima.

Neila Kosh.

Recuerdo ese momento en el que Caitlin tomó el maquillaje de la susodicha y lo esparció por toda su ropa.

Ese día, Neila estuvo muy enfadada y terminaron castigando a Caitlin junto conmigo.

Aún con dieciséis años y ahora casi con dieciocho seguimos siendo las mismas chicas.

Terminamos nuestra cena y, exactamente a las 8:00 P.M., apareció el doctor, entregándonos unos datos para que Caitlin fuera dada de alta.

Unos minutos después mi mejor amiga salió con ropa nueva y un gran moretón en su mejilla.

Además de su labio partido.

—Tu cara está echa una mierda—hablo Erick encendiendo el auto que tomamos prestado del instituto Lake Slane.

Caitlin golpeó a Erick en el hombro y este rió

El auto arrancó y todo el viaje fue en silencio.

Thomas y Erick en los asientos de enfrente, y Bella, Caitlin y yo en los asientos de atrás.

Comencé a divagar.

Se supone que es un instituto disciplinario, tal vez tendrán cámaras o algo así.

Pero tengo algo en claro, este instituto es un poco fuerte y eso, pero no es de estructura ni disciplinario. Es solo otro instituto con parecido a la prisión, donde encierran a sus hijos para no lidiar con ellos.

—Cait—murmuré

—Dime—contestó

—Un familiar tuyo vendrá a ver cómo estás—le informe

Murmuró una maldición y habló

—Estoy segura que mandaran a la perra de Neila para joderme y ver cómo me comporto—soltó llena de frustración

—Cait, quizás no estés lista para hablar esto ahora, pero mañana lo hablaremos—respondí

El auto se estacionó y bajamos de él, adentrándonos en el instituto.

Los chicos y nosotras nos fuimos por nuestro lado.

Bella se fue, argumentando que buscaría algo en la cafetería y nos dejó.

Llegamos a la habitación y cuando estaba apunto de abrirla, alguien nos interrumpió

—¡Señoritas!—gritaron detrás de nosotras

Yo voltee junto con Cait y divisamos a una mujer rubia y voluptuosa acercándose a nosotras con unos papeles en mano y vestida en traje formal.

—Buenas noches—murmuró

Le correspondimos el saludo y comenzó a hablar.

—Como verán...esta tarde la señorita sufrió un accidente—informó intentando ser cortés

—¡Me dieron una paliza!—aclaró Cait

La señora asintió y habló.

—Debido a lo que sabemos...usted no recuerda nada y las cámaras de seguridad no captaron nada—continuó hablando

Maldije para mis adentros

Estaba segura de que Cait sabía algo.

Las dos asentimos y ella comenzó a hablar de nuevo.

—Les damos nuestras más sinceras disculpas e intentaremos encontrar al culpable—dejo en claro

Intercambiamos un par de palabras y la señora se fue dejándonos entrar a la habitación. Caitlin cambió su ropa y yo la seguí.

Se recostó en la cama y comenzó a dibujar mientras yo veía mi teléfono.

Alguien toco la puerta y yo la abrí solo para ver a una Bella con comida en mano.

—¡¿Quien quiere comer?!—exclamó sacando donas de la bolsa.

Las tres comenzamos a comer, hablando de banalidades y riendo por estupideces hasta que la puerta fue tocada otra vez.

—Apuesto a que es Erick—hablo Bella levantándose

—Yo creo que es Thomas—aposté también

—Yo pienso que es...—comenzó a hablar Caitlin pero no terminó, ya que observamos quien estaba detrás de la puerta.

—Neila—sentenció Caitlin.

Mejores amigas © «Completado» Donde viven las historias. Descúbrelo ahora