✨Cute boy✨ [rubelangel]🌙

Destruido.

Rubén se despertó,por un momento no recordaba que había pasado.
Hasta que todos los recuerdos volvieron a su cabeza haciéndole soltar un leve sollozo,que intentó ahogar con todas sus fuerzas,sin éxito.
Cogió su movil únicamente para ver la hora,no era suficientemente importante para nadie, por lo que no esperaba tener ningún mensaje.
Pero lo tenía.
De Marta.
Eh,Rubén,no te preocupes❤️
La verdad es que la chica era muchísimo más agradable que la mayoría de las chicas de la urbanización.
Eran las 3:40 de la madrugada, se levantó, caminó hacia el baño, encendió la luz y entonces pudo ver su cara, tenía los ojos hinchados y la nariz roja, el pelo revuelto y todavía seguía vestido con la misma ropa del día anterior, que de alguna manera u otra todavía conservaba el aroma de Mangel,lo que provocó que sus ganas de llorar aumentaran.
Rubén pensó que una ducha le vendría bien,aunque sabía que aunque quitase el olor de Mangel de su ropa,no conseguía quitarlo de su mente, lo seguiría respirando por muy lejos que lo tuviera.
Se metió a la ducha y abrió la llave,dejando que el agua caliente resbalara por todo su cuerpo, los sentimientos de Rubén estaban tan a flote que no pudo reprimirlos más dando lugar a nuevas lágrimas, que se camuflaban entre el agua que caía.
Rubén se sentía exhausto de tanto llorar,se apoyó en la pared y se fue deslizando poco a poco hasta quedar sentando con la cabeza entre las piernas,rodeando estas con sus brazos.
Le costaba tanto asimilar que ya no iba a ver esa estúpida cara que tantas veces le había hecho sonreír con solo pensar en ella.
Mangel era su primer amor, y le había destrozado.
-Seguro que el está de puta madre-pensó Rubén.
El castaño no era consciente de lo equivocado que estaba, tampoco era consciente de que nada más salir de su casa Mangel rompió a llorar como un niño pequeño,sin consuelo alguno,y aún seguía así.
El también recibió una visita de Marta,aunque esta solo acudió para regañarle,por haber sido tan cobarde y no haber luchado una mierda.
Pero que podía hacer?
Era lo mejor para Rubén.
Y es que Mangel tampoco tenía idea de lo equivocado que estaba.
Rubén despertó al día siguiente por los golpes de su madre en la puerta.
-Rubén llegarás tarde a clase.
-No pienso ir a clase hoy-gritó.
-Como que no piensas ir?!
-No,no iré,déjame en paz.
Rubén alcanzó los cascos y se los puso con la música a tope, con el fin de dejar de oir a su madre gritar.
Tenía el pestillo echado asi que era imposible que consiguiera entrar,y probablemente se daría por vencida en unos minutos,ya que ella también llegaría tarde al trabajo.
Rubén logró conciliar el sueño unas horas más,y cuando volvió a abrir los ojos se sentía milagrosamente mejor.
Comprobó que en su casa no había nadie, se vistió y salió de ella.
Tenía claro hacia donde caminaba,aunque sabía que ir ahí no le ayudaría en absoluto.
Tras caminar 15 minutos a toda velocidad con los cascos puestos llegó.
El sitio donde tantas veces se había escondido con Mangel para estar a salvo de la gente que pudiera verles y delatarles.
Esperaba encontrar la paz y tranquilidad que no podía encontrar en su habitación, en la que Rubén todavía podía percibir el aroma de Mangel,destrozándolo por dentro.
Lo que no esperaba encontrar era a Mangel, apoyado en un árbol,con los ojos cerrados y con los cascos puestos.
Por unos instantes dudó si irse sin que el pelinegro se percatase de su presencia.
Pero sentía necesidad de saber que hacía Mangel ahí, si en verdad para el Rubén no había sido más que un entretenimiento.
-Qué haces aquí?-preguntó enfadado Rubén,sacando a Mangel de sus pensamientos.
La expresión de Mangel se lo dijo todo, estaba ahí exactamente por la misma razón que el, los pensamientos y recuerdos que hay en su piso le ahogaban,necesitaba despejarse.
-Necesitaba despejarme-dijo intentando que su voz no se quebrase, sin éxito.
-No, si encima serás tu el afectado aquí...-Rubén estaba lleno de rabia,no entendía nada.
-Rubén tu no eres el único que lo pasa mal,deja de sentirte el centro del mundo.
-Qué mundo? Si has destrozado todo lo que yo conocía como "mundo"- dijo remarcando las comillas con los dedos.
-No tendría que haberlo destrozado si no tuvieras a tus 800 vecinas espiándote, Rubén todo esto lo he hecho porque me importas, por mucho que me esté jodiendo a mi también.
-Eres un puto egoísta Mangel, piensas en lo que según tu es bueno para mi, pero lo que yo piense o pueda llegar a sentir por ti te la pela.
-Rubén,no eres el centro del puto mundo, hay más cosas, más personas.
-Es imposible hablar contigo, siempre usas el mismo argumento de mierda,aquí nadie se cree el centro del puto mundo Mangel.
-Es igual Rubén, es lo mejor para los dos.
-Pudrete Mangel, en serio.
Dijo Rubén cabreado,tras esto salió corriendo de aquel lugar.
Definitivamente el lazo que les unía se estaba destruyendo.