EL COMIENZO

EL HUMANO: EL DOMADOR DEL FUEGO

El planeta tierra un mundo maravilloso y a la misma vez oscuro; corrompido por el ser humano, pero dejaremos eso de lado. Nos ubicaremos esencialmente en un hospital o más específicamente en un cuarto del hospital, en la cual vemos a un chico de 19 años postrado en una camilla mientras esperaba a llegue su tiempo de partir de este mundo.

Se preguntaran el porqué esta en ese estado, pues primero conozcamos al joven cuyo nombre es Steven, hermano mayor que se preocupa mucho por sus hermanitos; su hermanito de 5 años y su hermanita de 3 años. Cuatro meses atrás le detectaron cáncer avanzado al estomago en todo ese tiempo el sentía solo molestias pero a medida que las molestias se convirtieron en dolores fuertes lo llevaron a un chequeo, basta decir que la mayoría de sus familiares se preocuparon cuando dieron la noticia el mismo día que lo internaron.

Ahora el joven solo podía oír el llanto de sus padres, hermanos, amigos y familiares ya que hace unos momentos les dijo que quería estar sus últimos minutos solo ya que no los soportaba ver llorar por él ya que su pensamiento es [No me preocupa la muerte sino a los que dejo atrás con mi partida] y en realidad tenía razón, se preocupaba por sus hermanitos ya que él los quería ver crecer, pero lo que el más quería era cambiar el mundo para bien por sus hermanos lamentablemente eso ahora le es imposible.

Comienza a escuchar que los llantos van bajando la intensidad poco a poco, el sueño lo vence y lo último que ve es un sujeto con una capucha y una hoz acercándose lentamente.

¿?: Yo no haría eso si fuera tu.

Se ve a una ''persona'' con unas ropas que pareciesen de alguien de la realeza con su báculo apoyado a un lado de la silla en la cual estaba sentado leyendo una revista médica de remedios naturales para tener una vida larga y sana... algo irónico.

Muerte: ...

¿?: Él es necesario, si lo matas estarás condenando no solo su vida sino la de todos.

Muerte: ...

¿?: Como que mejor para ti, para tú información por todos me refiero a tu vida, la mía así como la de nuestros hermanos.

Muerte: ...

¿?: No me vengas con eso de que no puedes hacer nada sabes muy bien que tú tienes el control en el campo de la vida y de la muerte.

Muerte: ...

¿?: ¿Algo a cambio?...ugh déjame pensar, ya se te puedo ofrecer un planeta árido para ti solo sé que te gustan ese tipo de ambientes.

Muerte: ...

¿?: ¿Eso es enserio?... que gustos más raros tienes.

Muerte: ...

¿?: Ya ya ya no es necesario recurrir a los insultos. Supongo que son tus gustos – chasqueando los dedos hiso aparecer una gran cantidad de revistas en el aire las cuales terminaron a manos de la muerte que solo soltó una risa tenebrosa y se fue como un humo negro por la ventana.

Al sujeto del báculo le dio escalofríos pero luego se concentro en el chico que estaba en la camilla.

¿?: Si supieras que tu vida costo unas revistas de... AAAAAHHHHH!!! No quiero ni pensarlo pero bueno a lo que vinimos.

Se acerco a Steven y puso sus manos en su frente recitando unas palabras desconocidas para cualquier ser viviente.

El cuerpo del joven comenzó a brillar de un color rojo hasta apagarse gradualmente.

¿?: Bueno con eso ya podrás defenderte de los peligros que se avecinan en el nuevo mundo que vas a ir aunque tú mismo tendrás que aprender a usarlos, lo siguiente es mandarte a ese mundo. – reuniendo toda su energía en sus manos la lanzo hacia Steven para que luego el desapareciera sin dejar rastros – te esperan retos difíciles mi joven guerrero, se que podrás superarlos cuento contigo ya que de ti dependen varias vidas al igual que los otros – en eso cuando se da la vuelta para irse se tropieza y cae de cara; al levantarse ve una de las revistas que se cayeron y que estaba abierta justo en una página un poco escandalosa – ... ¡MALDITO SEAS HERMANO TÚ Y TUS ENFERMOS FETICHES VAS A VER TE VOY A ENVIAR LA CUENTA DEL PSICÓLOGO!

OoOoOoO

Mientras a cierta persona se le pasa su momento de ira vamos a otro mundo para ser más específicos a un bosque en el cual podemos encontrar a una criatura bípeda recostada en un árbol que parece como si estuviera descansando.

Steven: Ugh mi cabeza – miro alrededor – ¿Dónde estoy?, lo último que recuerdo es que estaba en una camilla en el hospital y... ¡NO PUEDE SER YA ME MORÍ! Esperen un momento – se piñizca la cara – Au! eso dolió bueno no estoy muerto pero... ¿dónde estoy y que hago en un bosque? no creo que para ahorrarse el funeral me tiraron acá y por la flojera de cavar solo me dejaron en el suelo... naa no creo que mi familia sea capas de eso – en eso suena su estomago – pero que raro por qué no me duele el estomago se supone que tengo o tenía cáncer, pero bueno mejor no me hago problemas voy a buscar a alguien que me ayude a encontrar mi hogar.

Nuestro amigo seguía caminado en búsqueda de ayuda ignorando que un grupo de lobos de madera lo seguían de cerca pero con cuidado ya que al nunca ver a un tipo de criatura así dudaban en atacar o no.