EL COMIENZO

Pelea en el bosque

Continuando con nuestro desdichado protagonista que era seguido por una manada de timber wolf sin que él lo supiera, por ahora.

Steven: Que raro es este bosque, luce muy diferente a los que regularmente veo... no sé porque tengo la sensación de que algo malo va a pasar.

Crack!

El sonido de una rama crujiendo llamo su atención. Miro hacia atrás en la dirección del sonido en la parte oscura del bosque; vio varios ojos de un color verde brillante mirándolo fijamente

Steven: ...ugh – paso saliva – *muy bien de algo te sirvieron ver todos esos programas de supervivencia es que hay que alejarse muy despacio sin darles la espalda* – pero como la suerte no estaba de su lado hoy día, los lobos al ser descubiertos comenzaron aullar dando la señal de atacar – ¡YO ME LARGO DE AQUÍ!

Y así comenzó la persecución del ser bípedo por los timber wolf, esquivando a diestra y siniestra las ramas y todo tipo de obstáculos sin mirar atrás.

Steven: *¿Desde cuándo me he vuelto tan rápido y ágil?, debe de ser la adrenalina* – pensó el humano que en ese momento logro divisar un gran árbol no tan lejos de su posición – *eso me servirá los lobos no son buenos trepando* – con una gran destreza que ni el mismo se cría que tenia; no es que fuera flojo solo que no estaba acostumbrado a hacer deportes tan exigentes como la gran mayoría.

Una vez arriba del árbol se dedico a recuperar el aliento que le hacía falta y recuperar el ritmo cardíaco, ya que no todos los días corres por tu vida para evitar que te coman. Ya más tranquilo pudo ver mejor a sus perseguidores llevándose una gran sorpresa.

Steven: Esos son unos lobos de... ¿madera? – Dijo sin poder creerlo – es oficial sigo en el hospital dopado o algo por el estilo.

Los timber wolf solo se dedicaron a rodear el árbol esperando a su presa, mientras que nuestro desdichado humano ve la idea de baja del árbol como un suicidio hasta que...

¿?: ¡AYUDA!

Steven escucho alegrándose de que no sea la única persona en ese bosque, lamentablemente no fue el único que escucho el pedido de ayuda ya que los lobos de madera fueron hacia la dirección no precisamente para ayudar.

El pelinegro bajo con cuidado del árbol una vez que los lobos se alejaron.

Steven: Hora de irse – pero después de dos pasos se detuvo y miro hacia la dirección donde se fueron los timber wolf, luego hacia donde se iba a ir, de nuevo hacia la otra dirección y así hasta que – ...me voy a arrepentir de esto luego pero no hay de otra – Se fue corriendo hacia donde se fueron los timber wolf para ayudar a la persona en peligro; aunque muchos lo verían como ir hacia su propio funeral, para él era una posibilidad de salvar una vida y si no hacía por lo menos el intento su conciencia no lo iba a dejar tranquilo.

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No muy lejos de ahí vemos a un poni de color marrón oscuro con la crin de color mostaza claro y una cutie mark de una mapa con una brújula al medio, pero lo más resaltante es que este poni se encontraba debajo de una carreta a la cual le faltaba una rueda; esa carreta llevaba unas cuantas cosas de artesanía de madera.

¿?: ¡AYUDA! – paro sus gritos de socorro cuando vio un arbusto temblar – oh gracias creí que iba estar en este bosque a expensas de un depredador – hablo el poni más tranquilo – si fueras tan amable de sacarme esta carreta de encima... – su voz se fue apagando cuando vio una manada de lobos de madera saliendo de los arbustos y yendo a su dirección – ...¡AYUDA!