Capítulo 12: En el camino.

1K 131 10
                                    

Después de cuatro días de camino, el grupo en el que viajaba Kein llego al bosque de Verniel. El carruaje avanzaba suavemente por una carretera de tierra, pero bien cuidada, mientras qué era rodeada de frondosos arboles de diversos tipos y cuyas hojas de vivos colores salpicaban la vista de los transeúntes y los maravillaban.

Quien viera ese espectáculo pensaría que era una obra de arte plasmada en la mas bella pintura.

Desgraciadamente Kein no podía disfrutar de la vista, su poca resistencia a los viajes lo tenia con una tela húmeda cubriéndole la cara y en cada parada lo único que hacia era vomitar.

Mientras atravesaban por una curva Zalia bajo la velocidad del carruaje y le ordenó a Kein ponerse la mascara, pues mas adelante había alguien que les interrumpía el paso.

—Alto

Era un hombre ataviado con una vistosa -y seguramente incómoda- armadura de metal con cuero que cubría todo su cuerpo, menos su cabeza. Cerca de diez mas como él aguardaban en los costados del camino y poco mas allá se encontraba tirada lo que en otro tiempo debió ser una carroza muy ornamentada, pero ahora no era nada mas que una caja con varios golpes por todas partes. Grandes manchas rojizas salpicaban el lugar donde debía de haber estado el cochero y las puertas se hallaban sobre la copa de dos arboles.

Era evidente que en ese lugar se había producido un ataque catastrófico.

—¿Que ocurre, oficial? —pregunto Leyi desde su caballo.

—Un ataque, aunque no sabemos exactamente de qué —le contestó el caballero—. Pero eso no importa, hemos de revisar que ustedes no posean nada peligroso, así que bajen un momento, por favor.

—¿No deberían estar más preocupados por lo que sea que ocurrió ahí? —dijo Zalia con las cejas levantadas y señalando con su cabeza la carroza.

—Hay otro grupo que se metió en el bosque para investigar eso. Nosotros debemos hacer nuestro trabajo.

—Muy bien, espere un momento, oficial —Leyi bajo de su caballo con una sonrisa en el rostro y les hizo una seña con la cabeza a Zalia y Ci para que lo siguieran.

Las dos chicas bajaron lentamente del carro y del caballo, cuando Kein estuvo a punto de seguir a Zalia, ella le hizo una señal disimulada con la mano para que se mantuviera quieto.

Sucedió en un momento. La cabeza del caballero salio volando en el aire.

Los compañeros de aquel hombre atacaron a los tres jóvenes a gran velocidad, pero los chicos fueron mas rápidos. Debajo de Ci se formaron varias sombras que atraparon a dos de los caballeros y comenzaron a estrangularlos, mientras que Leyi se movía ágilmente y cortaba a varios de ellos con dos espadas delgadas, una en cada mano.

Zalia no se quedaba atrás, saltaba de un lado a otro blandiendo una guadaña y cortando a todo aquel que se cruzara en su camino. Eran cerca de diez caballeros contra tres jóvenes, pero ninguno conseguía no siquiera acercárseles.

Un atacante sorpresa salio de entre los arboles e intento atacar con una bola de fuego directamente al carruaje, pero una pared muy gruesa de hielo se elevó frente a él y absorbió casi todo el ataque, para después convertirse en varias estacas que atravesaron al hombre, matándolo en el acto.

Kein estaba sorprendió por la rapidez con la que se estaba llevando a cabo los sucesos y también estaba confundido sobre lo que estaba pasando, así que no se dio cuenta cuando otro de los atacantes salto desde la copa de un árbol cercano y aterrizó en la parte del conductor del carruaje, justo a su lado. El hombre balanceo una enorme espada hacia el chico, con una clara intención de matarlo.

Theria Volumen 0. 0: El niño de cabello violeta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora