Nos sentamos en la mesa, mi esposa deja el plato con el agua sabor a tomate frente a mí y un par de píldoras justo a lado de la cuchara. Tomo la cuchara y empiezo a beber.
— Lamento lo de su amiga...
El silencio dominaba la sala, tenía miedo por mi familia. Nuestra vida era un asco, y la vida que les había traído era peor de lo que había pensado, se supone que sólo cumpliría una tarea del Jefe para poder seguir sobreviviendo en este mundo asqueroso. Valeria murió, Mauricio desapareció y el maletín estaba en mi casa en manos de un loco que es bueno matando a cualquier rabioso. Tenía miedo, todos quieren ese maletín y ahora está en mi casa, mi familia corre un enorme riesgo. Fue gracias a la alegría de Noha, mi hija que pude olvidar estas preocupaciones.
— Creo que este es el mejor caldo del año. Le puse dos gusanos extra para darle un toque picoso...
— ¿Sí? Eres toda una chef, me siento orgulloso de tener a una hija como tú.
Mi hija me había sacado una sonrisa, siempre lo hace. Todas las noches me pide que le cuente historias sobre la vida de afuera, por seguridad ellas nunca salen de casa, quizá la ciudad de BlueCity es la más segura que hay en WaterSeed, pero hay muchas personas malas. Es triste ver que después de toda esta desgracia, muchos sigan lastimando. No basta con un Rabioso, un Llanto Sangriento o una Gran Explosión para darnos cuenta que somos semejantes y debemos protegernos unos a otros. Esto no se lo cuento a mi hija, al contrario, ella sabe que algún día Sirynge va a volver y podrá reparar todo este daño. Yo espero lo mismo.
Amaba tanto a mi hija, no había píldora que me hiciera sentir sano como la sonrisa de Noha, su cabello tan hermoso y su sonrisa tan blanca que me hacía recordar el color de las nubes. Y no hablemos de mi esposa, que a pesar de estar enferma, siempre se presenta tan fuerte. Ellas son mi fuerza, mi propósito de vida. Sino fuera por ellas, desde hace mucho ya me hubiera dado por vencido. No hay vida que quisiera vivir si ellas nos están en mi vida, mucho menos en un mundo como WaterSeed.
Mis pensamientos fueron interrumpido por Erick que saca una cantinflora con el símbolo de Sirynge Corporación. Mientras la abría, dice:
— El caldo me gusta, pero... creo que el vino le dará un poco de sabor
Mirábamos a Erick que echaba vino al caldo.
— No temas Tomas, tengo suficiente para todos
Mi hija me miraba con duda cuando veía que Erick empezaba a echarle vino a su plato. Y como si fuera normal, dice mientras el vino cae en su sopa.
— El vino es escaso, los líderes como el Jefe, Medussa y Cerdo, son dignos de tener vino en sus mano, en cambio yo... Tengo la suerte de tener un digno vino. Salud.
Me sentí con suerte al ver que Erick compartía de su vino, mi hija contaría con el afortunado momento de probar el vino. Mi esposa de volver a hacerlo y yo, de verlas disfrutar. Sin duda el caldo sabía delicioso, "el mejor caldo del año" como dijo Noha.
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WaterSeed: Bienvenido a Casa
Science FictionTomas tuvo que cambiar su forma de vivir. Él sabía lo arriesgado que sería, lo tanto que sacrificaría y el cambio negativo que se plasmaría en su vida; Tomas sabía lo que perdería pero él sabía lo que quería: Recuperar su antigua vida.