¿CUANDO DEJÉ DE ODIARTE?
"¿Pero qué me está pasando?" Era lo único que lograba expresar en su mente. Es que todo él era perfecto: Su cabello alborotado le daba un toque demasiado sexy, unos ojos verdes profundos que habían logrado paralizarla, pectorales anchos dando a demostrar que le sentaba de maravilla ese trabajo de campo, tez blanca... era condenadamente guapo.
Menos mal y Federico no podía leer pensamientos porque de ser así ya la habría descubierto infraganti... Aunque sí era consciente de que tenía ciertos atractivos y Cristina había sido desestabilizada con su encanto.
-Ahora ¿quién es la que se ha quedado corta de palabras? -Acotó mientas alzaba una ceja sugestivamente.
No estaba en ella demostrar debilidad ante nada ni ante nadie, menos delante de un hombre. Todo ese encanto pasó cuando recordó porqué estaba allí.
-Déjate de payasadas - Recobrando la actitud defensiva de hace un rato- Solo quiero que te quede muy claro que lo que te propones estas lejos de tenerlo. Jamás sería tu esposa.
¿Por qué se sentía con ganas de acercarse a ese condenado y besar sus labios hasta que estos se desgastaran?
Bueno, no era muy difícil eso, Federico tenía unos labios carnudos que invitaban a ello.
-Cristina dame la oportunidad de acercarme a ti, de demostrarte mis sentimientos de... -Tratando de explicar lo que afloraba en su ser.
-Pero que tontería estas diciendo, ¿qué sentimientos puedes tener si apenas y me conoces? -decía interrumpiéndolo.
Para ser francos ni él sabía lo que sentía, la había visto muchas veces en la cascada sin que ella se diera cuenta, la veía en el mercado, y en muchos otros lugares. Ella era hermosa, su cuerpo no dejaba pensar más que en lujuria, su cabellera negra azabache y sedosa era un complemento para su belleza, un rostro angelical, ojos verdes de mirada arrolladora, tez morena, labios finos y expresión desafiante, pero... Más allá de todo aquello, ella era la única mujer que no pensó en llevar a la cama antes de siquiera saber su nombre, pensó en llevarla ¡al altar! No cabía duda, Federico se estaba enamorando, pero era muy rápido como para él mismo darse cuenta de esto.
-Ay no sé Cristina, solo sé que te quiero para mí -Confesó confundido y haciendo más confusiones en la cabeza de ella- Veo en ti la mujer perfecta que quiero a mi lado. -Para entonces ya se había alejado del escritorio, acercándose a Cristina-
Las palabras de Federico una vez más la habían dejado muda ¿Que tenía él que la hacía perder la cordura?
Y perdiendo un poco más de cordura se lanzó a los labios de Federico, ¡OMG! lo estaba besando, aún tenía sus ojos abiertos por la impresión del momento mientras se reprochaba por ser tan débil, no fue segundos después cuando al igual que él que hasta ahora la besaba con profundidad se fundió en ese beso, sus lenguas se perdían la una en boca del otro, los fuertes y trabajados brazos de Federico recorrían la espalda de Cristina, esta tenía los brazos enroscados en su cuello mientras lo acercaba más a ella como si quisiera volverlo parte de sí, estaban tan perdidos en ese beso que hasta el tiempo y de ellos mismos se olvidaron.¿Cuánto duro el beso? No se tiene la mínima idea, pero lo que es seguro es que germinaron sentimientos a través de este.
Disminuyendo el ritmo fueron alejando sus bocas, mientras se miraban el uno al otro tratando de hallar explicación a lo que pasó.
-Fuiste tú quien me beso y ahora exijo una explicación. -Dijo él de manera seria mientras daba la vuelta para mirar hacia la ventana.
_________________________________
Gracias por su lectura 😘😘😘 no se olviden de la 👉🌟👈 si les gusto ❤
💕

ESTÁS LEYENDO
¿Cuándo Dejé De Odiarte?
FanfictionÉl la quiere a como de lugar, ella no está dispuesta a dejarse... ¿estarán juntos? #CYF #HistoriaTekila ❤?