Cuatrocientosaños.Se hanido.Solo así.
Mientras Lucas y Vivienne me llevaban fuera
del Santuario, al parecer, a la morada de Corrine; no
pude evitar maravillarme por como se las habían
arreglado ellos para transformar la Sombra de Sangre
en los pasados cuatro siglos. Antes del hechizo, la isla que habíamos ocupado y
llamado la Sombra de Sangre no era más que una fortaleza rodeada de un
bosque oscuro con sus altísimas e imponentes secoyas. Hicimos un pequeño
claro en medio del bosque y lo llamamos El Valle. Ahí fue donde empezamos
a hacer planes con respecto a lo que la Sombra de Sangre algún día sería.
Nunca pensé que posiblemente esos planes realmente se materializarían, pero
aquí estaba, delante de mis propios ojos, más impresionante de lo que estaba
en mi imaginación.
Mientras salíamos del Santuario y, finalmente, entrabamos en lo que
ahora era el Valle, hice una pregunta tras otra para satisfacer mi curiosidad y
hacerme olvidar mi hambre. Sofía y las otras esclavas estaban caminando
detrás de nosotros, escoltadas por los guardias. Estaba tan consciente de la
proximidad de Sofía, ya que todavía estaba abrumado por el olor de su sangre.
-¿Qué pasó con los animales salvajes que ocupaban el bosque?
-Habíamos hecho planes para mantener nuestras residencias encima de las
secoyas, porque la vida salvaje resultaría una molestia.
-Están alrededor -explicó Vivienne, mientras tomábamos un ritmo
pausado para pasar más allá del Valle-. Cora nos ayudó a reunir a la mayoría
de los animales salvajes en ciertas partes de la isla que llamamos madrigueras.
Algunos de los más feroces, sin embargo, se mantienen en las Celdas.
-¿Las Celdas?
-Las prisiones -Lucas se entrometió-. Ya sabes, están situadas en
las Colinas Negras -se encogió de hombros-, las cadenas montañosas. Las
mazmorras y los cuartos de las esclavas permanecen allí.
Levanté una ceja.
-¿Sofía?
No me perdí como los ojos de Vivienne me disparaban una mirada
interrogante. Sabía que estaba intrigada por la preocupación que estaba
mostrando por la chica. En ese momento, no había manera que yo le explicara
exactamente a mi hermana cómo veía a Sofía: un rayo de luz. La verdad era
que incluso yo no me entendía completamente.
-Los Harenes permanecen en las Residencias con sus cuidadores
-explicó Vivienne, asegurándome que Sofía no iba a ninguna parte sin mí.
Asentí con la cabeza.
-Y ¿qué son exactamente las Residencias?
-Lo sabrás muy pronto. Ahí es a dónde vamos. -Había una cierta
ESTÁS LEYENDO
A la sombra de la sangre. 1.
مصاص دماءLa noche del decimoséptimo cumpleaños de Sofía Claremont, ella se adentra en una pesadilla de la que no podrá despertar. Un tranquilo paseo nocturno por de la playa la lleva cara a cara con una criatura pálida y peligrosa que anhela mucho más que su...