Seis amigas separadas de pequeñas sufrieron cambios drásticos en su vida al llegar a la adolescencia, el problema era que ninguna se esperaba que de ellas dependía el futuro del mundo, en su camino tropiezan con ciertos chicos; típicos mujeriegos po...
Un rayo de luz entra por los ventanales que hay levantándome, miró mi celular. 7:07, mejor voy afuera, quiero refrescarme un poquito. Salgo y me siento en la puerta está fresco y refrescante. Todo se ve tranquilo hasta que un periódico me golpea la cara y el chico que lo arroja se ríe de mi.
-¡Maldito Desgraciado!- Me fijo en él y lo único interesante que había era que hoy es Jueves de Nachos. Me doy la vuelta para entrar enterrando mi nariz en la puerta, osea golpeandome.-¡Qué buena suerte tengo!.-Entro sobando mi nariz encontrándome con Jack en pijama sacándose un pedazo de la tarta.
-¿A quién maldecias?
-No importa, sírvete-Digo con un poco de inquietud viéndolo con una polera ajustada.
-Ah, gracias ¿Tú lo hiciste?
-Si...-Esto era demasiado incómodo, miro el techo ¡Nuca me habia dado cuenta de lo interesante que era!-Ah y gracias por dejarme dormir en la cama.
-De nada, linda.-No caigas en la trampa, ¡No caigas en la trampa!-Esta rico, serías buena repostera.
-Gracias, supongo que lo heredé de mi Mamá, ella es excelente en la cocina al igual que mi Papá más o menos...-Cierro mi boca. No le voy a contar todo de repente así que mejor me quedo callada. Me subo sin decir nada hasta que me vuelve a detener diciendo:
-Lindo tatuaje, Cooper.- Me olvide de mi tatuje en el cuello, que como mi cabello esta recogido se veía.
-Mira el tuyo ¿Acaso No tienes?
-Claro que sí, pero es vergonzoso tener algo tan femenino en tu abdomen...
-No es tan femenino, a ver muestrame.-Se levanta la polera dejando observar su abdomen que al verlo mepuse mucho mas nerviosa...
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-¿Lo ves?
-Creo...que es bonito...o lo que sea ¡Tengo que cambiarme!-y subo sin escuchar lo que me quería decir. Entro al cuarto poniendo seguro y saco ropa de mi maleta: Unos jeans, unos botines estilo militar y una remera Negra. Salgo de ahí satisfecha, escuchando unos leves ronquidos del cuarto de al lado que si mal no recuerdo es el de Ben y Annie. Entro encontrando una imagen demasiado graciosa, Annie hechada en toda la cama toda abierta y Ben botado en el piso, no pienso despertarlo, solo saco una foto y despierto a Annie que se levanta con una cara amargada y refunfuñosa.
-¿Por qué nunca me dejas dormir?
-Por que te amo y te quiero, Amada Annie.-Digo con aire risueño y mucho sarcasmo.
-Por que te quiero... ñe...- Responde enojada, adentrandose en el baño. Ben aun duerme asi que, Creo que es hora de darle la tipica bienvenida a lo Cooper. Empiezo a practicar con mis poderes hasta lograr hacer una bola de nieve, solo tengo que intensificar la cantidad, muahaha, *Risa malvada en susurro* ¡Ñaca Ñaca! Poco a poco empiezo a hacer un enorme bola de nieve, empiezan a chorrear gotas de sudor por mi frente, me siento cansada pero no me detengo estoy a punto de logar mi objetivo. Sigo hasta obtener el tamaño apropiado y con la gigante bola de nieve levantada a uno o dos metros de altura de su cuerpo, lo despiero primero.
