Seis amigas separadas de pequeñas sufrieron cambios drásticos en su vida al llegar a la adolescencia, el problema era que ninguna se esperaba que de ellas dependía el futuro del mundo, en su camino tropiezan con ciertos chicos; típicos mujeriegos po...
Despierto muy adolorida de la espalda, cuando por fin logro abrir mis ojos me di cuenta de que estaba en el piso, con pocas fuerzas me levanto y veo a Emma toda estirada en mi cama, sobándome la espalda me acerco y le grite en el oído:
-¡Emma, arriba!- Pero no recibí más que un ~uhum~ de su parte, así que decidí ir por una cubeta con agua fría, me fijo la hora en el reloj de pared de mi cuarto 10:00 a.m, era sábado así que no tengo que preocuparme de la escuela, luego bajo en silencio las escaleras para no despertar a mi madre, llego a la cocina, agarro una cubeta y la lleno de agua helada, vuelvo a subir y cuando entro a mi cuarto tiro toda la cubeta encima de ella sin darme cuenta de que ya había despertado y estaba sentada en el borde de la cama pero ella hábilmente levantó su mano antes de que el agua toque su piel y fue como si hubiera tenido un escudo, porque el agua cayó al piso, mis ojos estaban como platos al igual que los de ella, dejo caer la cubeta y de ahí sale ¿nieve? Alrededor de mis pies descalzos empieza a aparecer escarcha y el charco de agua esta serpenteando hacia Emma rodeando sus tobillos. Nos miramos y de un salto subimos a la cama abrazándonos Gritando ambas:
-¡Mamá, mamá!-¡Señora Cooper,venga por favor!.- Pero mientras más gritabamos las paredes se llenaban de escarcha y de mi baño privado esta saliendo agua; como una mini-cascada, hasta que por fin llega mi mamá, en su cara se veía asombro,¿alegría? y un toque de tristeza.
-¡Niñas, tienen que calmarse!- Nos grita mi mamá-¡Empeora si se alteran!
-¡¿Qué empeora, qué nos está pasando?!- le respondo.
-Les prometo que les explicare todo, ahora tienen que calmarse- Propone mi mamá, nosotras lentamente nos soltamos y noto como nuestras respiraciones se iban calmando, nuestra postura relajando hasta que poco a poco todo fue volviendo a la normalidad.
-Bien, lo han hecho bien- Espeta mi madre acercándose a nosotras.
-Señora Cooper, ¿qué nos acaba de pasar? - Pregunta Emma.
- Querida, necesito a tu madre aquí para explicártelo, a ambas.- Responde mi madre sacando su teléfono marcando el número de la señora Wong.
-Si, la espero no se preocupe-Le Contesta Mi mamá asintiendo a lo que decía la señora Wong sin quitarnos la mirada, ahora estamos sentadas en uno de los sofás de la sala yo estoy con una picazón en mi "marca de nacimiento" que más que una marca parece un tatuaje, siempre lo oculto con mi cabello o con mi ropa, ya que aquí siempre me molestaron, cuando tenía alrededor de 10 años todos me molestaban porque como dije más parece un tatuaje y ver a una niña de 10 años con un tatuaje así no se ve nada bien.
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Esa foto me la tomo Emma una tarde de verano, sin duda mi estación del año odiada, el calor me hace muy mal. Al parecer pase mucho tiempo pensando en eso porque mi mamá ya estaba yendo a abrir la puerta, entra la mamá de Emma, ambas se acercan a nosotras y se traen unas sillas para sentarse en frente.
