Guillermo
Logre ver que el detective se había puesto a pensar, su frente se había arrugado y su lengua se había asomado por sus labios moviéndose de arriba a abajo, no logre aguantarme y lance una risa la cual trate de simular tapando con mis manos, la cara que habia puesto me parecio la mas ridicula y absurda del mundo, un sentimiento de rareza me llego a los segundos, no recuerdo la última vez que había reido con tanta sinceridad y este detective de cuarta lo había logrado con facilidad, bueno no el, si no su cara chistosa.
Note que se acercaba así que volví a esconderme en el asqueroso arbusto, luego de fijarse el perímetro le oí decir que se iría a dormir, para lo que quería hacer necesitaba conocer su casa primero por lo que al ver unas enredaderas firmes decidí treparme por ahí sin hacer ruido, cuando llegué al balcón miré mis manos estas tenían sangre y tenían raspaduras pero poco me importo, desde pequeño estaba acostumbrado dolor, eso no era nada para mi.
Cuando logre entrar a su cuarto, él ya se había dormido, cuestione un poco mis habilidades ya que parecía que había tardado demasiado o que estaba tan cansado que no le tomó ni un segundo dormirse, al caminar me choque con sus zapatos haciendo un poco de ruido pero por suerte no despertó, sin hacer ruido fui por su cuarto viendo que tenía muchas cámaras y papeles ,un ridículo ordenador negro con varios unicornios morados en él, un sentimiento poco conocido para mi me invadió, era ridículo y poco tierno, quien diría que un detective de su talla que se enfrenta a criminales peligrosos tuviera un ordenador así.
Me acerque a él y mire detenidamente sus facciones relajadas, tenía unas arqueadas y finas pestañas, unos labios algo rellenos pero sin exagerar en tono rosado y extrañamente brillantes, sus pómulos un poco hundidos y ojeras mostraban el cansancio en el, mire sus brazos estos tenían unos músculos bastante grandes de piel bronceada. Tenía buena pinta el muchacho.
Espera ¿Lo dije o lo pensé?
Me exalte al ver que se movió y me escondí rápidamente detrás de la cortina de la ventana suplicando que lo oscuro de la noche y su sueño me salven de ser descubiertos, su mirada recorrió el cuarto antes de caer sobre mis ojos, la necesidad de parpadear se hacia mas fuerte mientras el mas me miraba, no resistí y tuve que hacerlo cerré mis ojos creyendo que iba a levantarse pero se volvió a dormir, decidí salir de ahí lo antes posible ¿A donde? no sabia pero esos pensamientos tenía que sacarlos ¿Tiene buena pinta?
Llegue a un parque y vi a una chica esta es mi oportunidad debía descargar todo estos pensamientos, me acerque y le dije.
- ¿Que hace una chica tan linda como tu aquí sola?
- Nada - Dijo dudosa - me fui de casa.
- No te ves nada bien - Dije frió, anticipando lo que seguía.
- Bueno no lo estoy - Aseguró - siento que mi vida no vale nada.
- Y que si un día murieras, nadie lo notaría ¿verdad? - Mencione, moje mis labios esperando su respuesta.
- Exacto.
- Bueno, estas de suerte.- Sonreí de lado, sacando mi cuchillo y apuñalandola.
La chica cayó sobre mi manchando todo mi abrigo con sangre. Joder. Tire su cuerpo al suelo y lo arrastre hacia el pequeño río que el parque tenía, llene sus bolsillos con piedras grandes y pesadas para luego tirarlo allí, enseguida se sumergió, por suerte no cayó mucha sangre al suelo, solo unas pequeñas gotas que por la mañana no se verían gracias a la lluvia que estaba comenzando a caer mojándome por completo.
- Mierda.
Camine de vuelta a la puerta del detective para seguir con mi plan, pretendía aprovechar la sangre que esa pobre chica para manipularlo y así entrar a su casa, mi reloj mental me indicaba que eran las 5 de la madrugada era demasiado temprano para que esté levantado.
- Bueno a esperar - Me dije sentándome en su puerta como si estuviera malherido.
u n - r a t o - d e s p u e s.
No se cuanto tiempo estuve esperando pero ya estaba amaneciendo, si no me equivoco serian las 6 o 7 am, sentí que abrió la puerta y rápidamente fingí estar herido con la sangre de la chica que asesine.
- Oh por dios ¿Que te sucedió? - Dijo preocupado colocándose de cuclillas para mirarme.
- Solo tuve un accidente - Comencé a toser para sonar más real, me encontraba sorprendido por mi actuación, hasta ya sentía la sangre como mía.
- ¿Un accidente? Dios mio, oye ¿Nos conocemos?
- ¿Te acuerdas? - Pregunte tocando mi estomago como si me doliera - ¿No te enseñaron que no tienes que hablar con extraños?
- Oh si, eres tu, ven te ayudare.
Me ayudo a levantarme dejando que me apoyara en él, sintiendo cada músculo de sus brazos y hombros, entramos a su casa dejándome en una silla y corrió al baño por un botiquín, intentó sacar el abrigo que tenia puesto pero no lo deje.
- Yo puedo hacerlo, sé curarme.
Asintió y señaló su baño para luego irse a hacer lo que parecía una llamada, camine a su baño, asegure la puerta y me saque el abrigo para tirarlo por la ventana entre la maleza que rodeaba la casa, luego volvería por el.
- ¿Estas bien? Te veías muy mal - Escuche su voz detrás de la puerta.
- Si estoy bien, quisieron robarme y como no tenia nada me dieron una golpiza - Me queje por el supuesto dolor - Me duelen todos los huesos.
- Bueno, cuando salgas sube al segundo piso, te preparare una cama y ropa para que puedas descansar, es la puerta color blanca que dice "Invitados"
- Gracias - Dije sonando un poco hostil.
La verdad me parecía rara la manera en que me trataba, era raro pero me gustaba, hace muchos años que nadie se preocupaba así por mi o me tenia tanta confianza, quizás el era asi de bueno con todo el mundo, yo solo era una persona más que el ayudaba, pero la sensación seguía allí. Salí del baño y subí al supuesto cuarto de invitados, antes de entrar vi su ridícula puerta morada ¿Que clase de obsesión tenía este hombre? Entre al cuarto notando que estaba muy bien ordenado, la cama de dos plazas tenia unas sábanas grises y almohadas negras, una gran ventana y uno que otros muebles bien puestos.
- Hola - Me di la vuelta viendo su sonrisa.
- Hola - Respondí sonriendo de igual manera.
- Deberías acostarte, llame a mi trabajo para faltar hoy, así podré cuidarte.
- Gracias.
Trague duro sintiendo como un leve sentimiento de gratitud subía por mi pecho, estaba acostumbrado a las malas miradas y malos tratos por parte de todo el mundo que me olvidé que existía gente como el, que se preocupaba por los demás sin siquiera pensar qué tipo de gente entraba por su puerta. Si supiera. Le sonreí por milésima vez antes de recostar mi cuerpo en esa cómoda cama.
♡♡♡♡
OHOHHO que mala soy :33 jumm okya jaja adios disfrunte feliz cumpleaños si es que alguien cumple años :3 Bye!
☆☆☆
Cuando los capítulos aparezcan con ✔ esa cosita es que ya están en su totalidad editados, me da ternura ver todos los errores que tuvo la OnePurple del 2014 je.
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• Esquizofrenia • Wigetta • (Editando)
FanfictionSamuel de Luque es el mejor investigador en toda España, este se encontraba muy estresado cuando le asignaron la tarea de averiguar la identidad del horror sin rostro de Madrid ¿Podrá hacerlo? ¿Que pasara cuando descubra quien es? ¿Y si se enamora?