13:

27 1 0
                                        

Amaneció, era muy temprano, pues el sol aún no pegaba en la ventana, vi el reloj, 6:07 am, Matt aún dormía y no quise despertarlo. Miré a mi mesita y estaban mis pastillas, de seguro Claudia me las dejó más temprano, tragué una junto con la botella de agua que también estaba en la mesita y salí.

Pasé por la sala de estar, había poca gente haciendo sus actividades de siempre, pasé por toda la sala hasta llegar a la recepción, ahí estada Flor, la recepcionista.

-Buenos días Oliver - Dijo sin levantar la vista - ¿en que te puedo ayudar?
-Quería saber si pudiera llamar a mis padres.
-Oliver, lo siento, pero está prohibido. Aunque recientemente tus padres llamaron para saber como estabas, vendrán este viernes a verte.
-Gracias Flor.
Me retiré.

Volví a pasar toda la sala, pasé por la oficina del señor Smither, me dio curiosidad y giré el pomo, estaba abierto. Me fijé a ambos lados para ver si no venía nadie y entré, sentí nostalgia, estaban sus cosas en cajas y decidí mirarlas. Encontré papeles sobre pacientes anteriores, era muchos, también cosas de trabajo y vi al fondo una caja, era más pequeña y también decidí mirar, me senté en el suelo, parecían cosas personales, seguí buscando y hallé una foto, en ella salía el señor Smither junto con mis padres, se veía más joven y al frente de mis padres había un niño, ¿se trataba de mí? Miré detenidamente la foto y escuché un ruido, levanté la cabeza.

-Hola Oliver.
-¡Señor Smither! -Se me salieron algunas lágrimas.
-Oliver, supuse que entrarías a mi antigua oficina, pero tengo que hablar contigo antes de irme por "el túnel de la luz". -Rió.
-Sí, señor, tengo muchas dudas.

El señor Smither me hizo un movimiento con las mano para que me sentara y me pusiera cómodo, aún estando muerto se veía igual de alegre como lo era de vivo.

-Muy bien Oliver, comencemos.
Hizo una pausa.
-Yo sé que viste mi muerte y que fue muy duro para ti, la razón del porqué el doctor me asesinó era porque yo quería ayudarte a salir, Oliver. Tuvimos una fuerte discusión sobre ese tema aquí mismo, se enojó, tomó una tijeras y me las clavó en el brazo, me dejó morir desangrado, me llevó a la habitación de experimentos y ahí fue cuando llegaste y tú viste lo que viste, pues ya había pasado varios minutos de haberme de sangrado, el doctor quizo eliminar rastros míos, por eso mutiló mis partes e incineró los restos. Ahora dicen que me suicidé o algo porque no saben como morí.

Yo me quedaba boquiabierto, me entró más rabia que casi arrugo la foto del señor Smither.

-Con respecto a esa foto -Señaló mi mano - tú sabías que tus padres y yo éramos muy cercanos, yo ya te conocía antes de que entrarás acá. Yo fui el mejor amigo de tu padre en la secundaria y preparatoria, cuando me dijo que iba a tener un hijo, quiso que yo fuera tu padrino, Oliver.
-Entonces usted, ¿era mi padrino?
-Sí, Oliver y traté de protegerte mientras estaba vivo, escucha Oliver, tienes que salir de aquí y contar lo que me hicieron y a los demás. Yo ya cumplí mi propósito y me tengo que retirar. Cuídate.

Quise abrazarlo pero iba a ser imposible porque no estaba vivo, su espíritu se iba desvaneciendo y me hizo un gesto de adiós con la mano. Lloré.

Salí de la oficina con la foto en mano y llegué a la habitación, Matt me preguntó que dónde estaba y le expliqué todo, puse la foto en mi mesita y me sentí un poco mejor, aunque aún con muchas dudas y con rabia.

Atrapado en el manicomioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora