Atrapado en el manicomio

14:

Ya con dudas aclaradas sentí un peso menos, ahora tenía más motivos de querer salir del manicomio. Me dirigí a la sala de estar, ahí se encontraba Fiona, me le acerqué y le conté todo lo que pasó en la oficina, -Vamos a salir de aquí, ya vas a ver- me dijo con una sonrisa.
Decidimos jugar al ajedrez, ninguno de los dos sabíamos exactamente como se jugaba, pero empezamos a jugar, entre risas me detuve, y vi a la sombra que había visto con Matt justo al fondo, no sabía si estaba alucinando o no, Fiona volvió a ver hacia atrás y no vio nada.

-¿Qué pasa?
-No, nada. Me pareció ver algo pero no era nada. - Mentí, aún seguía ahí esa sombra.

Continuamos con el juego y vi al doctor Francis pasar por la sala hasta la recepción, algo le dijo a la recepcionista y se fue, en ese momento recordé todo lo que paso con ese maldito y me levanté de la mesa con furia, Fiona me miraba pero no me detuvo. La ignoré, quería gritar que fue él quien mató al señor Smither, pero en la sala solo había gente que no sabía que estaba haciendo allí, decidí seguirlo dejando a Fiona sola.

En el camino me topé a Matt pero lo ignoré, ignoraba a todo aquel que me hablara en ese momento, aún tenía rabia.

El doctor llegó a su oficina, me escondí detrás de una planta y cuando salió de nuevo, me introduje en su oficina, se veía como una oficina normal, empecé a investigar y no encontré nada raro, encontré un archivo que estaba en una gaveta de un mueble, era la hoja de un periodo de hace unos meses, "ASESINO SERIAL ESCAPA DE PRISIÓN", decía en el título y a la par una foto del doctor con su cara más depravada. Vi también una hoja después del periódico y en ésta estaba escrito los asesinatos cometidos por este hombre, 20 en total incluyendo a niños, empecé a leer más y él fue quien provocó un incendio en una escuela en 1998, escuché el pomo girar.

-No deberías estar aquí. -Dijo el doctor enterando.
-Usted, ¡usted es un asesino serial buscado por la policía!
-Descubriste mi secreto -Rió - me hice pasar por cirujano para seguir complaciéndome con la muerte de locos y luego decir que murieron de forma natural.
-¿Y POR QUÉ MATÓ AL SEÑOR SMITHER? - Grité a todo pulmón.
-Quería ayudarte a salir y sabía que ibas a contar todo y me atraparían.
-Usted se arrepentirá de lo que hizo.

Después de decir eso, agarré un cuchillo que estaba cerca y me le lancé al doctor, lo apuñalé varias veces en la pierna, le hice cortes en la cara y cuando lo iba a matar, la puerta de la oficina se abrió y era Claudia con otros enfermeros, me tomaron de los brazos y me pusieron un tranquilizante. Mis ojos se me cerraban y lo último que vi, fue a Claudia ayudando al doctor a levantarse.

Desperté y no podía mover mis brazos, me habían puesto un traje de fuerza y no estaba en mi habitación, me habían trasladado a las habitaciones de máxima seguridad, me desesperé, quería salir, luego vi a Sara sentada en la cama.

-Hiciste bien en apuñalarlo, lástima que no pudiste matarlo.
-Sara, ayúdame a soltarme.
Sara se levantó y me soltó del suéter.
-Quiero que trates de comunicarte con mis amigos y avísales que estoy aquí.
-Oliver, pero ellos no me pueden ver.
-Tienes razón. -Me sentí decaído, hasta que escuché unas voces fuera de mi celda.