No puedo dormir.
Mañana es el día.
Acurrucada en mi cama abro y cierro mis ojos pensando en que faltan pocas horas para que nuestros corazones se reencuentren... Aunque en medio de una multitud. ¿Sabrán reconocerse?
Soy soñadora, soy romántica, siempre lo he sido. Para sobrevivir, para volver a empezar, aprendí a buscar el amor en lo más simple. Aprendí a aferrarme a cualquier tallo de esperanza, a disfrutar cada momento de felicidad.
Esperanza.
Felicidad.
Cada momento que viví con Oliver se reproduce uno detrás de otro en mi mente. Oliver saltando en su banco la primera vez que le hablé:
No podemos reunirnos aquí o en cualquier otro lugar público. Tampoco en mi casa. ¿En dónde vives? Llegaré a tu casa a eso de las tres... si para ti está bien.
Me sorprendió que cediera tan rápido.
Oliver nervioso cuando me puse a ver sus fotos:
Ow. Eras un bebé lindo
Yo haciéndolo reír:
¿Imitar al Pato Donald? Eso es muy difícil... ¡Oh, esperen! ¿Acaso ya estoy hablando como él?
Sonrío. Yo ayudándolo a quitarle el exceso de gel a su cabello:
—No digas nada.
—Tienes que admitir que te ves gracioso...
Él besándome frente a las chicas que se burlaron de mí.
Él golpeando a Chris... por mí.
Incluso soportó que Aaron casi fracturara su mano al saludarlo... Por mí.
Es tanto. Lo que menos hicimos en aquel entonces fue la tarea de Español.
Oliver...
Me repito que no debo tener miedo. Él no ha cambiado, Andrea.. La abuela tiene razón: la gente que siempre ha sido buena, siempre lo será. Oliver aún es ese chico que describí en mi ensayo de Español. Lo es, yo lo sé.
Salgo de mi cama y, sintiendo nostalgia, busco entre las cajas de mudanza mi viejo diario, lo escondo entre algunas novelas. Lo abro y busco la fecha que cambió todo.
Querido Diario,
Todos se burlaron de Oliver y yo quería morirme. Fue horrible. Lo mejor que pude hacer por él fue huir pronto de allí.
Tengo miedo de que me odie. Ojalá no me odie.
Andrea X
Esto lo escribí llorando... Acaricio las letras con las yemas de mis dedos y le vuelvo a pedir a la vida lo mismo. Que no me odie. Espero que con los años haya comprendido mi decisión.
¿Y si ni siquiera le interesa verte, Andrea?
¿Y si fuiste tan contundente al pedirle dejarte atrás que te echó de su mente? ¿Y si no te recuerda?
Es la misma pregunta de siempre: ¿Pensará en mí Oliver Odom? ¿Qué siente cuando recuerda el nombre de Andrea? ¿Y si soy únicamente otro nombre?
Quizá solo soy la chica con la que perdió la virginidad... La loca que imitaba patos.
Karin, en comparación, ha estado con él durante años. ¿Qué soy yo junto a eso?
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La buena reputación de Oliver Odom ©
Lãng mạnLa Reputación #2 CONTINUACIÓN de La mala reputación de Andrea Evich, también disponible aquí en Wattpad. Es importante leer esa historia para comprender el contexto de esta (: La encuentras escribiendo el nombre en el Buscador o entrando a mi perfil...