Pedido de Secuestro

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Cada ocho horas se le suministra a Yuri Plisetsky dos medicamentos para poder mantenerlo tranquilo. Uno es un sedante bastante potente con una duración de ocho horas y el otro es un relajante muscular. Ambos logran sedar por completo al joven patinador. No obstante el usar estos dos fármacos a la vez ocasiona varios efectos secundarios... entre ellos pesadillas.

Yuri Plisetsky estaba sometido, ya por cuatro horas, a una sesión de pesadillas continuas. Y de la cual no podría escapar a menos que dejaran de suministrarle aquellas drogas.

Ya era tiempo de llevar al joven patinador a su destino. Como un favor alguien había pedido al joven Yuri Plisetsky por una lista negra.

Al estar tu nombre en alguna de estas listas negras te hacia un saco de dinero andante... O una mejor expresión sería un cheque con muchos ceros, según fuera el caso. Y este caso tenía bastantes en realidad.

Las dos Bratvás que sometían a Rusia mantenían buenas relaciones, ya habían tenido con anterioridad bastantes enfrentamientos que habían acabado con muchos muertos. Actualmente vivían de indiferencia y favores mutuos. Es por ello que cuando una de ellas le pidió a la otra que escoltaran al famoso patinador revelación, no se negaron. Y de inmediato lo mandaron a buscar.

Eso nos lleva a este punto, un chico rubio a punto de entablar camino a algún punto de Omsk. Los Nikiforov lo enviarían por tierra, por aire era muy riesgoso y aun así tendrían que disfrazar al rubio.

Por lo que actualmente lucía una camisa holgada blanca, una falda negra que le llegaba hasta las rodillas y un costoso abrigo de piel de tigre. Sin mencionar el rico collar de oro que llevaba o las gafas de sol. Para cualquier ojo atento, era la típica imagen de una chica rica. Imagen que nadie cuestionaría si se mostraban un par de armas. Las hijas de políticos o personas adineradas viajaban con escoltas a todas partes y no habría sospecha alguna.

Cuando Víctor entro al cuarto en donde yacía el cadáver de su primo, se cruzó con su tío. Víctor era por lo menos diez centímetros más alto que Sasha. Este último solo puso una mano en el hombro de su sobrino y salió raudamente.

Víctor no supo que hacer. Enfrentar a su padre o seguir a su tío para darle su pésame...

Ciertamente la respuesta estaba en hablar con su padre...

"Quiero saber qué interés tienes en Yuri Plisetsky"

"Siempre directo..."

Izbran, quien se había quedado estático tras el abrazo de Sasha, salió de su trance y dio una pequeña sonrisa a su hijo.

"Supongo que no importa lo que diga, ya tienes mi respuesta para todo ¿O no Víctor?"

"No tratare de jugar tus juegos..." Le dio una dura mirada"... ¿Por qué él?"

"Favores... ¿Qué hay algo aún más valioso?"

"¿Favores?"

"Sí, eso será la único que diré. Si hubieras regresado antes, solo eso te bastaría para dar con su paradero." tomó una caja de cigarrillos de su saco y se lo extendió a Víctor "No fumas ¿Correcto?"

"..."

"Que cara más aterradora, al menos esa es una expresión digna para el trabajo"

"Hoy hablas más de lo habitual Izbran"

"Supongo que es porque hoy no es un día regular. No todos los días matas a tu único sobrino"

Víctor se controló y evito golpear a su progenitor.

"¿Regresaras a casa?"

Bratvá On Ice - [El secuestro de Yuri Plisetsky]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora