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N.A: mULTIMEDIA EXTRA PORQUE SI, PORQUE SON HERMOSOS AXSJWEKÑSFYAJS
Bueno esa mañana, Harry estaba nervioso. No había logrado pegar un ojo y aparentemente Johanna lo notó, así que lo mandó a dormir una siesta. No cruzó palabra con Louis porque no tuvo oportunidad, todo el día pendiente de tareas y otras cosas porque sí, esa noche era el gran baile, el baile por el que Louis tanto le rogó que fuera. Ese baile que sentia que era tan importante pero que también sabía que Louis tendria a una preciosa muchacha acompañandolo, que no sería él a quien tomaria del brazo y sabia que no los presentarian juntos... Pero ya era mucho decir que fuera a ese evento en primer lugar...
Era ya poco más de medio dia cuando chocó con Louis de camino a la biblioteca, realmente necesitaba despejar su mente y no había otro lugar mejor. Louis le sonrió, una de las mejores sonrisas que jamás había visto, por no decir la mejor
-Hey, Hazza, esperaba encontrarte aquí... Bueno iba a quedarme un poco más, pero pensé que estarias ocupado así que solo me fuí... ¿Estas bien? Tienes una cara de cansancio impresionante ¿Has dormido algo amor?
Y oh. La ultima palabra pronunciada por los labios del castaño casi hacen que Harry pierda el conocimiento. Louis nunca lo había llamado así. Y Harry sin poder evitarlo rió como un tonto haciendo que su semblante cambiara totalmente.
-¿Como es eso, Louis? ¿Como dices cosas así y pretendes que no me afecte en absoluto? Estás mal de la cabeza, en verdad...
Louis rodó sus ojos anres de tomar su mano y guiarlo hasta dentro de la biblioteca. Acarició su mejilla dulcemente provocando que el rizado se inclinara ante ese toque.
-¿Que te ocurre Harry? No pude verte en todo el día y ahora casi no me hablas... ¿Seguro esta todo bien entre nosotros?
El rizado soltó un suspiro antes de mover la cabeza en afirmación, Louis no era el problema, él nunca lo fue.
-No sé, supongo que solo estoy ancioso, nervioso... No quiero dejarte en vergüenza. Soy un simple empleado, Louis... mira si hago una ridiculez, no, no.
Louis puso un dedo sobre sus labios impidiendo que continuara con sus lamentos.
-Tú nunca me dejarías en vergüenza, Hazz.
Harry suspiró como un idiota, sabía que ya no tenía remedio. Se abrazó a él escondiendo su cara en el pecho del principe que como siempre supo acogerlo y acariciar suavemente su espalda.
-Ven, quiero mostrarte algo.
El mayor le tomó la mano guiandolo escaleras arriba hacia la habitación de éste mismo. Dos vestidos cubiertos por una tela colgaban de la puerta del armario. Louis tomó ambos y se los presentó al rizado, invitandolo a sacarlos de su envoltorio.
Harry sonrio al encontrar debajo dos trajes de las más finas telas... Uno verde y otro azul pero fuera de ello exactamente iguales.
-¿Cuál te gusta?-. Louis se atrevió a preguntar con una sonrisa reveladora tirando de sus labios.
