Luego de unas dos o tres horas, seguía el mismo panorama.
Árboles... árboles y adivinen más estúpidos árboles.
Paramos solo dos veces, para beber agua, orinar, etc.
Seguimos durante varias horas más hasta que comenzó a oscurecer, sería un muy mal plan seguir, bajo el cielo nocturno.
A una distancia bastante cercana, se vislumbraban siluetas de lo que parecían ser un pequeño pueblo.
Daryl también las notó, y sin miramientos se dirigió allí, entramos en él.
El idiota detuvo la motocicleta frente a una casa algo pequeña, de apariencia rústica.
Bajé del vehículo.
-Pasaremos la noche aquí, al amanecer seguiremos.-
Llevo su motocicleta hacia unos frondosos arbustos.
Sin perder tiempo, ingresé en la casa, que a pesar de su descuidada apariencia exterior, se mantenía en buen estado por dentro.
Hice un par de pasos dentro tratando de percibir si habría algún caminante, no se oyó ni el aleteo de una mosca.
Vi algo brillar junto a mis pies, me incliné con las caderas en alto para ver de cerca, había un precioso collar abandonado en el suelo, tenía una fina cadena plateada y en el centro una piedra mineral negra pulida, lo tome y me enderece rápidamente para buscar a Daryl.
Él estaba detrás de mí mirando muy detenidamente mi trasero.
Al notar que había percibido su insistente mirada, fingió toser y se dirigió a lo que parecía ser una cocina.
Daryl era atractivo, pero al parecer jugaba en el equipo contrario, ya que el creía que era un chico y no una chica.
Una verdadera pena, negué con la cabeza de manera efusiva al darme cuenta del rumbo de mis pensamientos.
Recorrí la casa-cabaña familiarizándome un poco con mi entorno, era bastante simple el lugar; dos habitaciones, un baño, cocina y comedor.
-niño-
Salte en mi sitio sorprendida.
-¿quieres matarme de un infarto?- espeté con una mano en mi pecho.
En su rostro lentamente apareció una sonrisa petulante, que solo me ocasionó irritación.
-Sería muy estúpido morir de un infarto en un apocalipsis, ¿no crees?-
Rodé los ojos e ignorándolo me largué hacia la cocina.
Luego de estar de acuerdo que por seguridad ambos traeríamos los colchones a la cocina, acordamos que nos turnaríamos para dormir y hacer guardia.
La noche siguió su curso totalmente tranquila, no hubo caminantes.......ni interacción humana; intentar entablar una conversación con Daryl fue como tratar de hablar con una roca.
Varias horas después llego mi turno de dormir al fin, me arrojé sobre el colchón despertando a don gruñón por el rebote ocasionado, se giró sobre colchoneta aparentemente tratando de volver a conciliar el sueño, me acomodé en la mía no sin antes advertir.
-idiota te toca guardia- bostecé
Y no supe más.
Desperté por unos rayos del jodido sol entre ceja y ceja, ¿por qué a mí?.
Suspire, hastiada, sin más opción, me erguí sobre el viejo colchón y busque con a Daryl en la habitación, no logre verlo, pero tenuemente oí el sonido celestial e inconfundible de una ducha.
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MI ESTUPIDO ANGEL(Daryl y Sam)
Fiksi PenggemarSINOPSIS Dicen que uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, nunca pensé que le daría tanta razón a esta frase. Dolor fue de las primeras cosas que me enseño a sentir este Apocalipsis. Perder seres queridos es algo del día a día, per tener a c...