Tiempo después en un lugar al que nadie quisiera ir, estaban Francisco y su amigo al pendiente de lo que sucedía en la tierra. El primero se sentía un poco raro ya que nunca había albergado ciertos sentimientos hacia una humana que ni siquiera conocía, sólo sabía de su existencia por lo que había leído de ella. Trató de indagar más pero ya no había nada.

Eso que él sentía le hizo llegar a la concusión de que tal vez, ella era la mujer de la profecía pero se negaba a aceptarlo. Tendría que visitar a uno de los demonios más poderosos y antiguos de todo el infierno. Decidió que lo haría después de saciar sus más bajas pasiones. Estaba molesto. De pronto sintió una palmada en la espalda

- Ya tranquilízate cabrón... me tienes mareado con tanta vuelta... pareces un puto león enjaulado - le dijo el otro demonio y le lanzó una lata de cerveza la cual se bebió de golpe y tiró el bote en una esquina de la cabaña.

- Creo que he encontrado a la mujer destinada para mi... pero aún es una niña o adolescente que se yo... tendré que esperar muchos años para poder cogérmela... me urge hacerla mía y saber si son verdad todas las pendejadas que dicen - dijo un poco molesto y golpeando la pared más cercana dejando marcado su puño.

- Hagamos algo... vamos a buscar putas con culitos calientes y mañana pensaremos en lo que haremos para descubrirlo... yo te ayudaré - salió de la casa, se subió a su auto deportivo y aceleró mientras su compañero hizo lo mismo en su propio auto dejando una nube de polvo y con sus poderes escondiendo la casa para que ningún humano la viera

Se dirigieron a la ciudad, entraron a una discoteca y bailaron un rato. Algunas mujeres los miraban con lujuria. Ellos ni se inmutaban ya que siempre era lo mismo. Las invitaban a beber para despues llevárselas a un callejón cercano al local y las hacían suyas. Ellas no sabían ni con quién se estaban enredando, ese era su error porque quedarían marcadas para siempre. En cuanto llegaba su hora de morir su alma la reclamaban para llevarlas al infierno. Ninguna sabía como terminaría porque les borraban ese recuerdo. Algunas veces regresaban al mismo lugar y cuando les aburrían cambiaban de local o hasta de país. Otras veces repetían con la misma mujer o las compartían. Se alimentaban de su pureza.

Despues de divertirse regresaban al infierno para entrenar, tenían que mantener su físico para poder tener a más mujeres, conservar su fuerza y al mismo tiempo Satanás adquiría nuevas almas. Por esa razón les dejaba hacer lo que quisieran... eran los únicos que cubrían su cuota y también los más fieles a él. Otra de las recompensas eran sus poderes, dinero y autos. Algunas veces iban a los casinos a gastar dinero y por supuesto las mujeres no podían faltar.

Pasaron los meses y Bianca, Bruno y Braulio iban a cumplir su mayoría de edad. Ya habían hablado con sus padres respecto a su educación y los tres eligieron carreras afines a los puestos de sus padres en la empresa. Tanto sus amigos como ella estaban enterados de la profecía. Ellos y sus hermanos la protegían. También pensaban la forma de festejarse ya que en su cumpleaños 18 podrían tomar bebidas alcohólicas pero no querían hacer el ridículo. Decidieron que se festejarían en el jardín de la casa de la chica. Se encargarían de invitar a sus amigos.

Francisco ya tenía trazado su plan, sólo buscaría como ganarse la confianza de los padres de la mujer. Él, su amigo y su jefe decidieron que solicitarían trabajo en la empresa del padre de ella para averiguar más y saber si se podía hacer algo ya que él no quería terminar con su soltería. Estaba feliz así... fiestas, drogas, alcohol y sobre todo sexo, mucho sexo.

Ya antes había preguntado a varias personas que practicaban la magia negra si se podía terminar con esa farsa... todos le habían dado dos opciones... que ambos se enamoraran o que ella muriera. La segunda opción tenia una condición, si la joven moría él tendría que pasar otros 200 años buscándola. Le gustaba un poco la primera ya que decía que así tendría sexo con ella, le daría descendencia y no lo molestarían tanto.

A la mañana siguiente se encontraba en una cafetería a las afueras de la ciudad, estaba observando alas meseras y eligiendo a su siguiente víctima, un hombre a su izquierda estaba ojeando el periódico cuando por casualidad leyó un anuncio donde solicitaban un experto en tecnología, anotó el teléfono y pidió una cita para la entrevista... la mujer que lo atendió le dijo que se presentara al día siguiente. Se alegró ya que la empresa era la misma a la cual entraría "TRANSPORTES ROQUEZ". Su plan marchaba bien y debido a que llevaba en la tierra algunos siglos, pues ya sabía varios idiomas. Había estudiado en diferentes universidades y países. Solo lo hacía por diversión ya que así conocía muchas mujeres, las usaba y su jefe también ganaba. Decidió regresar con su amigo y su jefe y hablar con ellos e informarles los avances.

En otro lado de la ciudad se encontraban en una reunión Gregorio y José, escucharon cuando llamaron a la puerta y asomó la cabeza Georgina

- Buen día, espero no interrumpir - su marido negó con la cabeza y le pidió pasar. Inmediatamente la tomó por la cintura y la sentó en su regazo

- Sabes que ustedes no interrumpen... ¿hay algún problema amor? - preguntó él en voz suave

- Habló un joven preguntando por el puesto de informática... mañana lo entrevistaran en el departamento de recursos humanos - terminó de hablar y lo besó

- Nosotros lo podemos hacer... así de pasada lo conocemos y veremos si lo contratamos - Dijo José y llamó a su mujer para que fuera con ellos. Un rato más entró ella e hizo lo mismo que su amiga

Pasaron la jornada platicando sobre los chicos... pronto los medianos irían a la universidad y tendrían que preparar todo para que se mudaran cerca de ésta. Sus padres les habían comprado un departamento a cinco minutos de la institución y también le regalaron un auto a cada uno. También deberían preocuparse por la salida de la preparatoria. Ya les habían dado el permiso a los menores para festejarse

Tu Amor Me Salvó (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora