La hija de mi sirvienta

Advertencia

---Ya salgo!!!
Grité mientras me quitaba la ropa quedando sólo en brasier y bragas.

---Sí, ¿Qué sucede?

Hablé seductoramente mientras abría la puerta, ahora él guapo de Dorian me estaba mirando con la boca abierta.

---Dios!!!Sofía..visteté.

Deluexo desvío su mirada de inmediato al notar que solo estaba en ropa interior.

---Aquí no hay nada que no hayas visto antes.
Reí divertida.

---De eso mismo quiero hablarte ve a ponerte algo, te espero en 5 minutos en mi oficina.

Exclamó molesto y sin voltearme a ver, se fue.

Rodee los ojos y bufé por lo bajo.

Me puse una camiseta blanca pegada al cuerpo y unos shorts rosados, cuando de repente mi teléfono sonó. Enseguida observé que se trataba de Lucía.

---Y bien, dime que ya cayó..

---No, pero ya casi..de hecho ahora mismo iré a hablar con él, a solas.

Respondí mientras me miraba el trasero en el espejo.

---Suerte..y ya sabes, saca la puta que hay dentro de ti.

Ambas reímos.

---No necesito de mucho esfuerzo para hacer eso..jajjaja,bye.

---Bye, amiga.

Llené de aire mis pulmones y me encaminé hacia la oficina de mi Dorian.

Toqué la puerta 3 veces muy delicadamente hasta que escuché su voz varonil.

---Adelante.

Entré y lo vi ahí sentado en su gran silla giratoria, sostenía su mentón con una de sus manos y tenía una de sus piernas cruzadas.

Su rostro no reflejaba expresión alguna.

---Cierra la puerta y toma asiento.

Asinti con la cabeza y luego de cerrar la puerta, caminé hacia él como si estuviese en una pasarela, bajo su mirada atenta.

Jejeje.

Me senté en el escritorio muy cerca de él, mis piernas no tocaban el piso.

---En la silla.
Dijo apuntando hacia al frente, yo rodee los ojos y me levanté de inmediato para irme a sentar en aquella silla que estaba tan lejos de él.

---Mira niña, lamento todo lo que sucedió entre nosotros, lastimosamente no puedo retroceder el tiempo pero créeme que si pudiera con gusto lo haría, todos somos humanos y cometemos errores...