Despair Sicknes [Find A Cure]

Capitulo 03 ~Cuida tus amigos~

-¿Qué haces?- pregunta Kirumi con un tono nada amigable, el albino toma sus cosas y sale de la celda

-Solo limpiaba- a pesar de su ayuda a los demás de cierta forma Kirumi solo lo veía como un estorbo más

Pasó un buen rato, una o dos horas, la rutina se ajustaba al albino, aunque se preguntaba a menudo por que no podía recordar quien era o como llegó aquí, las cosas eras confusas en su mente

Limpiaba las celdas durante los tiempos de receso donde los que se encontraban ahí se reunian en "convivencia" y Mikan los trataba de rehabilitar; por su parte Kirumi se encargaba de la sala peligrosa tratando de evitar al albino por temor a cualquier cosa

En su momento tuvieron tiempo para un descanso, sentados en los sillones de la recepción comieron un poco, no había nada más, ni televisor o celular, un teléfono fijo estaba allí pero solo era para hablar con la Fundación Futuro...o lo que quedaba de ella

-¿No hacen algo divertido aquí?- rompiendo el silencio el albino cuestiona la situación

-No realmente- responde Mikan mientras Kirumi solo pasa a atender la llamada entrante, una que se hacía a cierta hora para ver si algo andaba mal

-Ya veo...- algo desanimado el albino miro hacia el suelo, aburrido

Así duraron sus diez minutos antes de que comenzara una alerta en la sala peligrosa, uno de los ahí encerrados estaba tratando de salir

-¡Rápido, vamos!- exclamó Mikan mientras corría a la celda marcada acompañada del albino

Se trataba de la última de las celdas, una que no había marcado señales de gran amenaza desde que había llegado a ese sitio. En ella había un chico de cabello oscuro como la noche, muy largo, la celda no se mantenía con luz ya que siempre se deshacía de los focos o sistemas de luz de uno u otro modo, solo se podían ver sus grandes ojos rojos

Mikan comenzó a revisar los sistemas, para su mala suerte debajo de esa celda en particular se encontraban los tubos de agua, por lo tando la celda se llenaba de agua y se esparcía por el suelo al resto de celdas y el pasillo

-Debo ir a apagar la bomba de agua antes de que se tire más- dijo Mikan al tiempo que se marchaba

El albino se acercó temeroso a la celda, no se sentía bien de repente y eso no era bueno, le dolía la cabeza y perdía el sentido del equilibrio, la persona dentro lo miraba curioso

-Sientate- dijo con un tono frío y sombrío que para nada daba una sensación de seguridad

-Esta mojado- dijo el albino como excusa, algo que si bien era verdad servía solo para evitar hacerle caso a la voz

-No importa, sientate- insistió la voz, el albino no pudo seguír de pie y se sentó. -Bien-

-¿Qué quieres?- pregunto el albino con una mano sobre su frente, tal vez se le había subido la temperatura y necesitaba algo de aire

-Te conozco-

-¿¡Ah?!- el albino casi cae de espaldas por la sorpresa, no era algo que esperase de un prisionero al que acaba de ver hace un momento

-Yo lo se, como olvidar una cara como esa- prosiguio la voz, su mirada estaba clavada en el, esos ojos de rubí fino parecían ver a través de su alma, era extraño y a la vez tenebroso

-Pe...pero...yo no...- al albino le consumia un temor, por así decirlo, ya que quería recordar todo pero saber que alguien que esta encerrado por un motivo lo sabe le daba escalofríos

-Shhh, no digas nada- dijo en voz baja como si fuera un secreto importante

-Ggg...-

-Será nuestro secreto- fue lo último que escuchó de él antes de sumergirse en la oscuridad, sonaba tentador y preocupante a la vez, se había hecho amigo de un preso

Mikan volvió, vio al albino en el suelo y a su vez que el agua había detenido su curso como quería, prosiguió a pasar al individuo de ojos carmesí a la zona segura para poder arreglar el problema

-Oye, ¿estás bien?- dijo Mikan mientras removía el tramo de tubo roto del sistema de tuberías

-S...si, estoy bien...- esbozó con una voz quebradiza e insegura, era obvio que no se encontraba bien

-Ya veo...¿te ha dicho algo?- había dado en el clavo, de una u otra forma era evidente que habían estado conversando

-Tal vez...-

-No creas todo lo que dice- Mikan sacó el trozo de tubo roto y tomó el de repuesto que había traido. -No es de fiar-

-¿A no?- el albino se intrigaba cada vez más por aquel singular personaje

-No- empezaba a sonar más seria, aunque él no lo supiera eso era extraño en ella

-¿Quién es?-

-Solia ser Hajime Hinata...solía ser nuestro amigo...- Mikan se detuvo, sonaba como si estubiera sollozando en silencio

-Oh perdon, yo no quería...-

-Descuida...esta bien- el albino solo quería respuestas de lo desconocido hasta entonces para él, no buscaba causar problemas aunque ya lo había conseguido

Pasado un rato Mikan terminó de colocar el tramo nuevo y recogió sus materiales, aún debía poner el concreto en el hueco pero de eso se encargaría Kirumi

Una vez se puso de pie y se dirigió a la salida se detuvo a pensar, no le era grato recordar, eran recuerdos terribles, pero el albino merecía saber que cosas habían sucedido

-Ven, sigueme-