26

3.3K 494 38
                                    

-Lo había olvidado.

-No tienes que hablar de eso si no lo deseas.

-No. Déjame. Quiero hacerlo. Es hora. Eran solo imágenes borrosas antes, pero ahora lo veo todo claro. Los primeros días supe que algo estaba mal con ese tipo. No sé cómo es que mamá lo dejó entrar. Algo estaba mal con ese hombre alto, de rizos rubios y mirada imponente. Él me lastimó desde que llegó. Y yo simplemente... Lo olvidé.

-Mamá, no llores.

-Nunca debí regresar del internado. Me hubiera escapado, o desvanecido de la tierra. Podría... Podría haber tenido a mi hijo y huido de mi madre. ¿Por qué no hice eso?, ¿por qué fui tan cobarde y volví a ellos?, ¿por qué me deshice de ti?

Julie lloró, oprimiendo su pecho con la mano. Quería morir otra vez. Sentir dolor, sufrir. Quería ser castigada.

-¡¿Por qué, Dios?!, ¡¿por qué no pudo haber sido diferente?!, ¡¿por qué me dejaste tirar a la basura a mi pobre, mi pobre semillita?!, ¡¿por qué?!, ¡¿por qué permitiste que ese hombre me lastimara?!, ¡dime qué hice Dios!, ¡¿qué hice para merecer tanta maldad?!, ¡perdóname si hice algo!, solo quiero que termine... Solo quiero descansar...

Julie se recostó en el suelo.

El niño se acercó a ella, y le acarició el cabello con sus suaves manitas.

-Mami, no hiciste nada malo. A veces a las personas buenas les suceden cosas malas. Es sólo eso. Y has hecho cosas buenas mamá, en serio. Muchas acciones buenas en tu vida. Eres muy buena, mami. Y estoy orgulloso de ti. Incluso antes de que tu vida terminara, hiciste algo increíble mami. Creo que no lo sabes. Aún te falta una cosita más por recordar.

-¡¿Más?!

Mamá de mentiraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora