Tres|Miradas.

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Antes de ir al aeropuerto me despedí de mi familia de nuevo.

— Prometo que volveré — dije esto último para después subir al taxi.

De regreso a Londres

Sasuke vendrá por nosotras, siendo sinceros Sasuke y yo nos hablamos con amor odio, es decir el es mi amigo pero me está robando a mi mejor amiga y no puedo permitir eso.

— Sakura creo que Sasuke no ven...— me interrumpe una voz masculina que obviamente ambas conocemos a la perfección.

— ¡Sakura! — viene corriendo hacia nosotras, alzaba sus brazos para poder localizarlo.

— ¡Llegas tarde! — grité.

— ¡Cállate enana! — ahora el me grita. Sólo por que soy la más bajita del grupo me molestan con ese tipo de apodos, es molesto.

— Que maduro eres — dije sarcástica.

— Tú pequeña sabes que... —  Sakura lo interrumpió.

— ¡Callense ambos! — se molesto, y creo que somos el centro de atención del aeropuerto.

— No es justo tocaba mi insultó — Sasuke hace un puchero, a mi me parece estúpido a Sakura adorable.

— Vámonos antes de que los de seguridad nos saqué de aquí — dije señalando a dos hombre viniendo hacia nosotros.

— Tienes razón. — dice Sakura.

Salimos del aeropuerto. Durante el camino Sasuke preguntaba sobre nuestros viaje y también nos contaba lo que había hecho sin nosotras.
Me dejaron a mi primero. Y antes de entrar a mi casa me despedí de Sakura y de Sasuke.

— ¡Llegué!.

— Hola Hinata. — sale Kurenai de la cocina. — ¿Como te fue?.

— Bien Sakura me ayudó a limpiar las tumbas de mis padres, también le mostré mis lugares favoritos de cuando era niña.

— Eso suena bien . — se sienta en unos de los sillones de la sala.

— Si, creo que si. — Me senté al lado de ella.

— ¿Pasa algo, cariño?.

— Es sólo que ya han pasado 7 años de su muerte y aún los extrañó como si hubieran muerto ayer.

— Obviamente los vas a extrañar, ellos eran lo único que tenías en ese entonces. — me abraza. Mi corazón comenzó a palpitar con rapides desde hace mucho tiempo que no siento calidez.
— Pero ahora no estas sola, tienes a Mirai, a Sakura, a Sasuke y claró a mi.
— me sonríe con amor.

— Gracias.

—  Ahora ayúdame con la cena. — se  para del sillón.

— Creo que iré a dormir. — me excusó.

— A no señorita, usted me ayudará a cocinar. — Me arrastra hacia la cocina.

Extrañare Japón pero Londres ahora es mi vida.

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— Hinata ¿me veo bien así? — Sakura usa un short de tiro alto de mezclilla rasgados, junto con unas medias de rejilla blancas y un crop top negro  de manga larga con unas cintas en los brazos. Se ve muy hermosa.

— Te ves muy hermosa — sonreí ella me regresa la sonrisa.

— Tu también  te vez bien — yo en cambio llevó un pantalón alto y ajustado de mezclilla claro, con una una blusa también ajustada de color blanco con rayas negras.

Nos terminamos de arreglar y vamos hacia el club donde se presentarían con su nuevo guitarrista. Ya había comenzado, Sakura y yo fuimos directo a la barra.

— ¿Quieres tequila o vodka?.

— Manejarás tu.

— No.

— Entonces no quiero.

Sakura bebía, me acerqué a ver a los chicos, ahí estaba Sasuke de vocalista, Kiba en la batería, y un chico rubio con la guitarra, el destacaba mucho más que los otros, pues su altura y sus hermosos ojos azules, e incluso sus marcas peculiares en sus mejillas. El es demasiado atractivo. Mi vista sólo se dirigía hacia él. Él me dedico varias miradas también. Sonreí, se que no estaré aburrida está noche.

— Hinata — Sasuke  se acerca a mi. — ¿Y Sakura?.

— En la barra — dije desinteresada.

— ¿La dejaste sola en la barra? — se molesto. — Sabes como se pone cuando ebria.

—  Lo se, es gracioso.

— Si lo es, pero tu no la aguantas cuando está así. — dice aún más enojado.

— ¡Oye! Tenemos un trato, tu la soportas ebria y yo la soporto cuando cuando está vomitando y de mal humor.

— Buen punto. — me mira frustrado — Iré a buscarla. — se aleja rápidamente de mi.

Me quedé sola otra vez, que aburrido.

— Hola soy Naruto — se acerca a mi el guitarrista, con una sonrisa ladina.

— Soy Hinata — le sonreí coqueta.

— ¡Vamos déjame beber más! — escucho los gritos de obviamente mi amiga pelirosa. Me estaba muriendo de risa al ver como sasuke la saca del club arrastra.

— Tan rápido se emborrachó. — dije para mi misma.

— ¿La conoces? — pregunta el rubio.

— Es mi mejor amiga.

— Se ve que es agradable. — dice sarcástico, yo reí.

— Lo es... ¿Quieres salir de aquí?.

— Claro.

Salimos del club, me senté en el capo de un auto, él se quedo parado. Mire su rostro más detalladamente, tiene un piercing en el labio y varios aretes en su oreja, se ve muy atractivo.

Nuestras miradas estaban conectadas, ninguno decía algo, sólo nos  presenciamos en silencio, no incómodo, ni molesto, si no placentero. Pero nos le voy a mentir me siento un poco intimidada, con esos profundos ojos azules viendo me fijamente.

Así me imagino a Naruto.

Así me imagino a Naruto

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Sexy ¿No?.

Bad Boy + Naruhina Donde viven las historias. Descúbrelo ahora