Bad Boy + Naruhina

Diecisiete|Dolor

Sasuke y un par de chicos alejaron a Naruto, quien estaba moliendo a golpes al otro tipo.
Resignado se alejó y me tomo de las muñecas con demasiada fuerza, de tal punto que dolía.

— Detente, me lastimas. — él me suelta de una manera muy brusca, su mirada me causaba miedo, no sabía cómo reaccionar nunca lo había visto así.

— ¡¿Qué diablos te sucede?! — me grita demasiado enojado, camino hacia a mi acorralándome.
— ¡Se supone que yo te gustó! ¡¿Por que estabas de puta con... —lo golpeó en la cara, el de inmediato se dio cuenta de sus palabras.

Las lágrimas brotanaban de mis ojos, estaba tan enojada y decepcionada de él.

¿Como se le ocurría decirme algo como eso?

— Pequeña, lo lamento, yo no quise dec... — lo interrumpo.

— ¡Pero lo hiciste!—  le grito y le doy leves golpes a su pecho —  ¡¿Soy una cualquiera?! —las lágrimas no dejaban de caer, ahora el parecía estar asustado, nos mirábamos con el ambiente tan tenso.

— Hinata, no se lo que me paso, lo siento — me miraba preocupado, desesperado, yo simplemente no podía seguir viéndolo.

— Para, sabes que eso no es verdad — lo miro, no sabía que hacer y el tampoco, ambos somos inexpertos en esto. — Solo déjame sola — dije para luego irme de ese lugar dejándolo solo.

Al llegar a la casa, Kurenai me estába esperando, me miraba decepcionada. Mi pecho se encogió.

— Hinata - dice sería — Necesitamos hablar.—
no tenia ganas pero me sente a un lado a ella.
— Me hablaron de la escuela — por un breve momento me asusté a pesar de que ya sabía lo que iba pasar ahora.
— Me dijeron que estas demasiado baja en tus materias y que faltas constantemente. Esto me decepciona mucho, ¿Que es lo que está pasando? — su mirada sobre mí, me hizo sentir culpable.

— Perdón — solo pude decir eso pues pronto comencé a llorar, no podía soportar todo esto.

— Hinata — ella me ve preocupada y me abraza, yo solo seguía llorando, no podía parar.

— Lo siento, lo haré mejor , hablaré mañana con los maestros, lo prometo. — ella asiente y me acaricia mi cabello, yo solo me aferraba a ella rompiendo en llanto.

— Cariño, ¿que sucedió? — me pregunto con preocupación, no pude soportarlo y le conté todo lo sucedido anteriormente.
Ella me escucho atentamente, me aconsejo y reconfortó, sólo necesitaba eso. 

Me encontraba mirando el techo de mi habitación, la música de mis audífonos estaba fuerte. Cerré mis ojos  hasta que quede dormida. 

Al despertar lo primero que hice fue ver la hora, eran las cinco de la mañana.
Me levante e hizo lo que todos los días, arreglarme para mis clases a pesar de que aún era muy temprano. 

Decidí caminar para ir a la escuela, sólo necesitaba relajarme un poco y caminar me ayudaba hacerlo.
Llegué a mi instituto el cual estaba cerrado, y era obvio ni siquiera había salido el sol aún era de esperarse que estaría cerrado. 

— Esto es una mierda — pero no me importó que estuviera cerrado, me crucé la cerca, Naruto tenía razón  cualquiera podía entrar.

Me senté en la banca de siempre y comencé a esperar hasta que llegarán todos.
Me puse mis audífonos y la canción que sonaba es Goner - Twenty one pilots.

Gran momento para esta canción. 

Después de una hora el comenzaron a llegar todo el mundo. Me dispuse hablar con cada uno de los maestros y arreglar todas mis materias. 

Me senté junto a la ventana poniendo poca atención a todas mis clases pero en todas asistí. 
Todos cuando me veían sentada ahí se sorprendía, ¿que tan raro es ver a una estudiante ir a sus clases.

— Hinata ¿estas bien? - Pregunta Tenten.

— Si, ¿por que?. — conteste algo distraída.

— No te vez bien. — me ve preocupada.

Claro que no lo estoy, me siento jodida en todo sentido.

— Estoy bien, no te preocupes. - asiente insegura y se aleja de mi.

Hable con cada uno de mis maestros después de cada una de sus clases, y todos me dieron permiso para hacer un proyecto o una exposición para poder graduarme

Al terminar las clases, buscaba a Naruto con la mirada sólo por costumbre, pero no estába por ningún lugar, era de esperarse y sinceramente no se si lo quiera ver. 

Al llegar a mi casa, la primera persona que me recibe es Mirai y luego Kurenai, le dije que ya había arreglado las cosas con mis maestros ella me miraba tranquila.
Subí a mi habitación lo más rápido posible.

—¡Ah! Mierda — grité al ver a Naruto en mi cama.

— Shh. — me cubrió la boca.

— ¿Qué haces aquí?. — lo mire enojado y a la vez sorprendida. 

— Hinata quiero pedirte disculpas por lo de ayer. — dice desviando su mirada. Y dice algo pero no lo escuchó.

— Habla un poco más  fuerte. — dije y me senté a su lado.

Él prende un cigarrillo y desvío su mirada.

— ¿Sabes que eres todo para mi? — se atrevió a confiarme, pegando una calada a su cigarro.

Me sorprendi, él nunca me dice cosas así.

Me quedé quieta.

— Di algo niña. —  el comenzó asustarse sus manos temblaban con terror.
No encontré palabras, él se comenzó alterar y lo calme con un beso.

— Promete que jamás lo harás de nuevo — lo mire después de besarnos, sólo necesitaba escucharlo.

— Lo prometo — lo abracé y el me respondió.

Se que debería confiar así en una persona pero de verdad no podía evitarlo. 

— Tu eres la única que me pone así — me susurro al oído de manera sexy.

— Eres un tonto — le susurré con una sonrisa burlona.

— Pero soy él tonto que amas — respondió seguro de sus palabras.

Tenia razón lo amo.