-¿De qué hablas?-Pregunto el rubio algo confundido, a la pequeña que lo miraba con cierta incredulidad.-Era la niña del parque, que ayudaste, la del vestido amarillo-Contestó incrédula, él abrió los ojos con sorpresa "Era ella..."
-¿Cómo no te pude reconocer?-Hablo pasmado, el rubio al parecer el encuentro con Mady en la biblioteca, no había sido el primero.
Mady, perpleja aún se levantó de la cama de su mamá y fue a su baúl que estaba acomodado en la esquina de la habitación.
Sin pensarlo dos veces, lo abrió, necesitaba encontrar su escoba entre toda esa ropa, libros y dulces, algo desordenadas.
-¿Qué haces?-Pregunto el rubio, al ver como Mady sacaba su escoba.
-Iré a volar un poco al patio-Iba a la puerta de la habitación, cuando el brazo del rubio la detuvo.
-No, es muy peligroso-Sentenció el rubio autoritario.
-¿Quien se cree?-Le dijo impaciente, "Nadie me va impedir volar".
-Tu padre-Replicó con la misma impaciencia.
-Usted no es mi padre-Susurró arrastrando las palabras, "muy Malfoy" pensó Draco irónicamente.
-Lo soy, quieras o no-Bajo a su altura, trataba de mirarla a los ojos pero ella seguía con la vista clavada en el piso-Y me preocupo por ti, no quiero que te pase nada-Mady tembló un poco ante esas palabras, quizás si vinieran de una persona más amable y de confianza como...
-Desearía que Harry Potter, fuera él que me dijera todo lo que me ha dicho-Esas palabras fueron puñales para Draco y volvió a sentir un poco de odio hacia su viejo rival.
-Puedo ser mejor que él-Dijo autoritariamente y con algo de orgullo herido-Solo confía en mí, como cuando eras pequeña.-Vio a Mady con un montón de lagrimas en sus ojos, esperando que salieran.
Un instinto ¿paterno? Se apoderó de él, quería abrazarla, pero eso podría incomodar aún más a su hija, así que optó por tenderle los abrazos para que Mady lo abrazara y cerró los ojos, esperando no llevarse más decepciones.
Contó 1, 2, 3, 4, 5...hasta que sintió como los abrazos de la niña, rodeaban su cintura en un abrazo de necesidad.
Unas fugaces lágrimas de felicidad, cayeron de los ojos de Draco "Ahí estaba su pequeña" y la abrazo con más fuerza.
Que cruel había sido el destino con ellos, el padre con soledad, anhelando a la mujer que amaba ajeno al pensamiento de que había una persona que lo necesitaba desde el primer momento que estaba en camino, su hija.
Así estuvieron un par de minutos padre e hija, para Mady fue algo que no pudo describir nostalgia, tranquilidad, felicidad.
-Señor Malfoy-Hablo Mady, mientras alzaba la vista al rubio que tenía los ojos un poco rojos, él se sonrío-Solo no se aleje de mi mamá y-Suspiró-de mí.
-Ustedes son mi familia, no podría-Le puso un mechón atrás del oído a Mady, ella sonrió, antes solo eran ella y su mamá, desde la muerte de su padre, ahora habría alguien más con ellas.
-Que linda escena-Escucho una voz a las espaldas de ellos, Draco puso a Mady atrás de él y saco la varita.
-Largo Nott-Hablo Draco, el aludido solo sonrió.
-Solo vengo a ver cómo está mi querida Mady-Hablo cínicamente.
-¿Quien es usted? ¡No lo conozco!-Hablo Mady aún a espaldas de Draco.
-Cariño, nos conocemos desde antes de que nacieras-Mady quien mirada a aquel sujeto, era el mismo del sueño-Fui el primero que te cargo al salir del vientre de tu madre, al que le dijiste "papá" a los 2 años y medio-Miró como su cabello y ojos cambiaban, volvía a ser Richard, Malfoy trataba de pensar fríamente, aunque los celos lo estuvieran matando.
-Mentira, mi papá está muerto-Hablo rápidamente Mady-Murió en el campo de batalla, como un héroe-Palideció la niña.
-Quizás no morí como un héroe-Repuso rápidamente Nott-Pero moriré como un héroe para muchos.
-Como un héroe-Dijo burlonamente Malfoy-Eres un mortifago-Escupió Malfoy.
-Y tu como un traidor, hijo-Era Lucius Malfoy, apareciendo mientras gritaba-Expelliarmus-Para desarmar a su hijo.
-¿Porque nunca me dejaste elegir padre? Nunca quise ser mortifago, solo lo hice para que no le hicieras daño a mi madre-Dijo furiosamente Draco-Ahora no permitiré que le hagas lo mismo a mi hija-volvió a tomar la varita.
-Bombardea maxima-Gritó apuntando a los dos y fueron recibidos en una explosión.
Aprovechando eso, Draco se acercó a su hija.
-Tienes que salir ahorita mismo de aquí-Hablo con la respiración agitada.
-Pero y tu-Estaba muy preocupada por él.
-Yo estaré bien-Le trató de sonreír-Hija-Completo la frase, pero luego se dio cuenta que una cuerda había llegado hasta el y le amarro las piernas lo que lo hizo caer.
-Es mi hija, Draco-Hablo Nott, mientras miraba al rubio en el piso tratándose de zafar de aquella cuerda, pero ya había llegado a sus brazo.
-Suéltenlo-Gritó Mady, tratando de acercarse a él, pero Lucius le lanzó un Expelliarmus y salió disparado a la pared.
-Si quieres ver a él y al ministro con bien, tendrás que ir a la mansión Nott-Le sonrió con simpleza Lucius.
-Claro si es que te preocupas por él, ya que como él no es nada para ti-Le dijo Nott, pateando a Draco, Mady estaba horrorizada-Tendrás que venir sola.
La mirada de Draco se conecto con Mady y él mensaje fue totalmente claro "No vayas, cuídate" en un momento los tres desaparecieron.
Otra vez estaba sola, angustiada, tenía que hacer algo.
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Aquí está el capítulo 17, espero que les guste.
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Reencontrándonos.
FanfictionTiempo después de la segunda guerra mágica, Hermione Granger desaparece de Londres, repentinamente. Pero unos asuntos de trabajo, la harán volver, para no solo reencontrarse con sus amigos, sino también con su pasado. ¿Qué pasará después?