Reencontrándonos.

Capítulo final.

Capítulo 23

Los Potter llegaron al hospital.

-Animo Hermione-Era Ginny abrazando a su amiga.

Ya ha pasado, media hora desde que los medimagos estaban en la habitación de Mady.

-Malfoy, me sorprendes-Hablo Harry  al ver al rubio tratando de tener un semblante neutro.

-¿Porqué lo dices Potter?-Pregunto Draco, con el ceño fruncido.

-Creí que la serpientes no sentían nada ni demostraban nada-Hablo sorprendido-Pero mírate, estás aquí con Herms, apoyándola tratando de hacerte    el fuerte a pesar de que por dentro estas igual o peor, solo para que ella no se sienta tan mal...eso te hace leal, Draco-Termino dandole una palmada en la espalda, para después retirarse a buscar a su esposa, dejando al rubio sin palabras.
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Mientras tanto.

"¿Quién eres?" Pregunte al ver a un señor de gran barba blanca y túnica del mismo color, ¿será San Pedro? ¿Dónde estoy? Pregunte al ver que no estaba en el hospital, era un lugar todo de blanco, estaré muerta.

-No señorita Malfoy, no está muerta...-Dijo el de la barba blanca.

-¿Entonces? Y ¿Quién es usted?-Era la primera conversación en 3 semanas, con alguien, el señor me sonrió.

-Mi nombre es Albus Dumbledore y esto es un espacio entre la tierra de los vivos y muertos-Ese nombre me sonaba familiar, pero lo más importante.

-¿Que hago aquí? Y ¿Salazar?-Dumbledore me miró con un gesto de tranquilidad.

-Usted señorita, dejo en claro algo que él no tiene, amor por si misma y amor por los demás, el amor es la magia más poderosa que existe, al poner a sus padres antes de su felicidad, fue la demostración máxima del sacrificio por los demás y amor, esto hizo que la magia de Salazar se desactivará-Sonreí tanto como pude-Por el momento-Mi sonrisa se borró.

-¿Como que...-Pero me hizo un gesto de que no lo interrumpiera.

-Usted está aquí porque Salazar la dejo al borde de la muerte y esta en usted decidir regresar señorita Malfoy, aunque Salazar seguirá formando parte de su vida-Hizo una pausa larga-A menos que no vuelva, la maldición de Salazar pasará a otro miembro de la familia de su padre-Pero él es el único Malfoy, lo que significa que si mi mamá llega a tener más hijos con mi padre, la maldición recaerá sobre ellos, no quiero que nadie sufra este calvario.

-¿Existe una manera de quitar esta maldición?-Pregunte esperanzada, el frunció el ceño.

-Sí que la hay señorita, pero encontrar la solución implica un largo camino y no debe ser tan fácil-Dijo Dumbledore con un aire misterioso.

Sí me voy, dejare que esto siga atormentando a otras personas, sude en frío, no dejaré esto...

-No-Negué mirando a los ojos al director Dumbledore-No voy a abandonar esto y que más personas sufran esto-Tome aire-Dedicaré toda mi vida si es necesario a combatir a Salazar y erradicar esta maldición.

-Le deseo toda la suerte del mundo señorita Malfoy-Al parecer mi decisión lo asombro, pero después volvió a su postura tranquila-Sus abuelos, le mandan saludos, me piden que le diga que la estarán vigilando-Sentí un escalofrío.

En eso sentí como una ráfaga de viento me alejaba de ahí, ya no veía a Albus Dumbledore.

Hasta que escuche un "Tiene pulso" de alguien a quien no conocía, sentí como necesitaba aire así que abrí los ojos, al sentir como el aire entraba por mis fosas nasales.

Observe un montón de medimagos al rededor mío, estaba en el hospital.

-Nos alegra que estés de vuelta en este mundo-Dijo uno de ellos sonriente, lucía agotado.

-¿De vuelta?-Pregunte algo curioso.

-Sí-Se limitó a decir, en eso vi entrando a mis padres, ambos visiblemente preocupados, los medimagos se fueron dejándonos a ellos y a mi solos en la habitación.

Mi madre fue la primera en venir a abrazarme y llenarme la cara de besos, ya la extrañaba su característico olor a vainilla.

-Mamá-Fue todo lo que dije estaba llorando y ella también-Te extrañe demasiado-La abrace otro poco más.

Cuando me separe de mi mamá mire a cierto rubio al borde de la camilla, tratando de mantener un gesto tranquilo, pero no podía.

Sin importar que tuviera la aguja del suero en mi mano derecha la alce a su dirección, el mejoro atónito y mostró una gran sonrisa y se acercó a mí.

Y pasó, me abrazo me sentí tan segura en sus brazos, igual como con mamá, no pude evitar comenzar a llorar en su hombro.

Pude sentir a mi mamá, dándome un gesto de apoyo en el hombro.

-Te trate muy mal, no me había dado cuenta que desde que apareciste en mi vida, empezaste a ayudarme -Recordando cuando lo vi en el ministerio de magia y me llevo a la biblioteca-Tanto añoraba una familia completa, que me aferré al pasado y no me di cuenta lo que tenía enfrente-Mire a mis padres, los cuales lucían visiblemente conmovidos Perdóname papá-Le dije al rubio, quien también tenía unas lágrimas en su rostro.

Inmediatamente me volvió a abrazar.

-No hay nada que perdonar hija-Se sintió tan bien que él me llamará hija.

Mi mamá se unió al abrazo, con mucha emoción.

-Aquí están, los Malfoy's reunidos-hablo Ginny con un aire de alegría y nostalgia, seguido por su esposo tío Harry, Ron y Luna, todos sonreían abiertamente.

Eso seremos desde ahora y siempre "Los Malfoy's"

Desde ahora no soy Mady Turner, seré Mady Malfoy.
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Aquí termina mi primera historia y quiero agradecer a todos los que leyeron, se emocionaron con cada capítulo como yo lo hice escribiendo.

Estoy pensando hacer un epílogo...