Socorro.

Capitulo 3: En el hospital.

Me desperté muy cansada me dolía todo el cuerpo sentí que había alguien llorando en mi habitación.

Cuando conseguí abrir los ojos vi a mi padre llorando y diciendo:

-¡No puede ser! ¡No puede ser! Es culpa mía.

-Papá dije. ¿Donde estoy?

-Hija mía estas en el hospital te desmayaste y te distes un golpe en la cabeza.

-Papá, me duele todo el cuerpo, ¿Por qué lloras?

-Hija, ¿desde hace cuánto no comes?

Mierda pensé. Vereis mi padre nunca está en casa en las comidas y las cenas ya que trabaja así que llevo una semana desayunado solo una manzana, es lo único que como en todo el dia. Pero esque estoy gorda, nunca estaré como las chicas altas y delgadas de mi instituto.

-Papá yo.. dije después de varios minutos.

-Sufres de anorexia.

-Que! no puede ser! papá no no..

-Es culpa mía por no estar no puede ser lo siento hija mía.

-papá no es tú culpa, no puedo comer, estoy muy gorda y muy fea no quiero estar en este mundo sólo hago daño sólo hago daño.

-Hija no digas eso yo te voy a ayudar... te dejare sola un rato  para que te recuperes . Te quiero mucho hija mía

Salió de la habitación con lágrimas en los ojos. Yo estaba muy intranquila sólo se hacer daño.. no puedo seguir viviendo no quiero..

mi madre nos abandonó hace seis años, mi hermano murió como os e dicho ... Sólo estamos mi padre y yo y le e hecho daño. ¿Porque estoy en este mundo?

Derrepenté entró el doctor con una bandeja de comida y me dijó.

-Cometelo todo si no no te daran el alta.

-No tengo hambre- respondí borde,  ya que el también lo era.

Él se fue sin decir nada. Yo comenzé a comer todo. 30 min después entró el médico y me dijo:

- Muy bien, te lo has comido todo y  me lanzó una sonrisa desconcertante.

Yo no dije nada.

En cuánto se fue me levanté corriendo al baño y vomité.

¡O no por dios, ahora soy bulímica.!

Un rato después entró el médico con mi padre y la bolsa de mi ropa y me dijo:

-Te han dado el alta, cuidate y realiza las tres comidas diarias.

Yo asentí sin mucha comvicción.

Al salir mi padre me dijo vé llendo al coche que yo voy al bar que tenemos  enfrente a comprar tabaco.

Fuí andando hacia el coche cuando me choque con un chico moreno bajito y con ojos pequeños pero muy hipnotizantes.

Iva vestido muy guapo con una camisa unos vaqueros y unas zapatillas, iva genial.

-Mira por donde vas le dije.

-Perdona, no queria cocharme contigo, me tendió la mano para ayudarme a levantarme. Yo la cogí y sentí algo mágico.

-Me llamo Martín- añadió, encantado.

-Me llamo Luna y tambien encantada.

-Eres muy guapa Luna.

¿Que me estaba llamando guapa? ¿Ami a una gorda? me sonroje y pensé que me estaba vacilando.

-Muchas gracias Martín- añadí.

-Oh debo irme rapido, espero volver a verte Luna de verda.

Definitivamente me estaba vacilando.

Me fuí hacía el coche y allí estaba mi padre esperandome.

-Vamos dijo debes volver a casa a descansar.