b u l i m i a [TordTom] Terminada.

final 2/2

"Los budistas dicen que si conoces a alguien y tu corazón late con fuerza, tus manos tiemblan y tus rodillas se vuelven débiles, no es el indicado. Cuando conoces a tu alma gemela, te sientes en calma. No hay ansiedad, ni agitación."

Recuerden eso👆

Narrador omnisciente.

Edd suspiró y se mantuvo en su lugar, todo esto era un gran lío, no sabía que hacer, pues sabía que quién necesitaba ayuda emocional aquí no era tan solo su mejor amigo.

—ustedes dos tienen una relación demasiado extraña y ambigüa.

—habló por lo bajo.

—no es necesario recordarlo.

Ahora quien suspiró fue Tom, que enseguida se puso de pie.

—H-Hm... Supongo que la única forma sería...—hizo una pausa—sería hablar, ¿No?

El castaño abrió los ojos como platos.

—¿Eh? ¿Estás seguro?

El británico rió sarcástico.

—¿Alguna vez me has visto realmente seguro de algo?

Ambos quedaron en un silencio, pero volvió a hablar.

—Y, no. Pero eso es lo que siempre he creído que has de hacer cuando hay un problema de por medio. Tal vez debería comenzar a madurar.

[N/A; NOOOO QUÉDATE ASÍ YO TE ACEPTO BEBÉ GÑGÑÑ]

Por alguna razón eso hacía que el de verde se sintiera orgulloso.

—¿Quieres q...?

—¡No! O sea... No, ehh...

Luego de otro silencio que no duró mas de un segundo, salió de allí, con dirección a su odiado hogar.

—Realmente eres un imbécil, Tom. Deberías dejar de cagarla y de ser un bueno para nada.

Entró directamente, de todas maneras, seguía siendo su hogar.

—¿Tord?

Se extrañó al no obtener señal alguna de el noruego, ni un ruido. Absolutamente nada. Simplemente era como si se hubiera esfumado.

—P-Por favor, quiero intentar resolver esto como alguien normal, quiero intentar serlo sólo por una vez.

Aún así, nada.

Al entrar a su habitación, lo encontró, de pie, de espaldas a Tom.

Retrocedió un paso al percatarse de lo que había a su alrededor, y lo que tenía en su mano. Sin pensarlo, gritó.

—¿¡QUÉ CREES QUE ESTÁS HACIENDO!?—su voz quebró.

El mayor, que estaba con los ojos cerrados, los abrió, y se volteó, observando a el de azul con una falsa sonrisa, y mirada inexpresiva, aunque no dijo nada.

Asustado, el de azul se acercó a el más alto, tomando sus manos, tirando aquel objeto afilado, que cayó junto a el pie de este.

—mírame, mírame y dí algo.

En vez de emitir algún ruido, abrazó a el inglés, dejándose caer.

Por alguna razón, ambos se sentían en calma cuando estaban juntos. Se necesitaban mutuamente

Comenzó a acariciar el suave cabello de quien se encontraba entre sus brazos, aquella habitación apenas era iluminada por la escasa luz que entraba a través de las persianas en la ventana.

—Somos un fiasco.

—lo sé.

—Te sientes sólo, ¿No?

No respondió ante la pregunta de el menor.

—Te conozco más de lo que crees, sé que así es. Y estás equivocado, aquí siempre estuve para tí, idiota.

—Hace dos meses estabas peor.

—Hace dos meses me sentía hundido y sólo. Jamás debiste hacer como que jamás te sucedía nada.

Ahora la mirada carmesí de Tord se encontraba evitando el contacto visual con Tom, quien sentía culpa y algo de decepción, pero era porque vió tantas veces feliz a aquél chico, que había empezado a creer que lo era.

No había notado que mientras él le acariciaba, Tord había comenzado a tararear una canción.

Let's go in the garden
You'll find something waiting
Right there where you left it
Lying upside down

When you finally find it
You'll see how it's faded
The underside is lighter
When you turn it around

Everything stays
Right where you left it
Everything stays
But it still changes
Ever so slightly
Daily and nightly
In little ways
When everything stays

Cuando terminó, volvió a hablar.

—esa canción siempre me ha recordado a tí, desde que la escuché.

—¿a mi?

—sí

—se separó

—siempre has estado aquí, aunque haya sido un grandísimo idiota muchas veces.

—estás loco.

—tu también.

Posó su mano sobre la mejilla del ojinegro, quién puso la suya sobre esta.

—ven.

Tiró del brazo a Tord, dejándolo a milímetros de entre ellos.

—¿qué haces?

—lo que jamás me voy a cansar de hacer.

Besó suavemente los labios de el rubio oscuro, quien tardó en reaccionar, pero finalmente le siguió el paso, inseguro.

—Me enseñaste a amar, a curar, y a entender. Que todos, en algún momento encontramos esa persona que nos hace feliz, y tenemos una oportunidad de ir por el camino hacia la luz, y por todo eso te odio, por volverme una persona con esperanzas y que cree en sus metas, y una de ellas es hacerte feliz.—entrelazó sus dedos.

—entonces intentémoslo, ¿No?

—obviamente que sí, jamás hubiese arriesgado tanto para nada.

··

No se hacer finales lol

No, no voy a poner nada acá. Voy a subir un coso aparte gg