POV TAEHYUNG
— Eres mi hijo. — dijo de manera tan severa.
Sonaba más a una condena que a cualquier otra cosa aquellas palabras.
Yo tampoco estaría feliz de tenerme como hijo, supongo.
— ¡Pelea! — grito.
La sangre se acumulaba entre mis colmillos.
Sometí el peso de todo mi cuerpo en mis patas delanteras y me eleve curvando mi espalda. Lo odiaba y mis ojos le decían aquello. Un gruñido salió de lo más recóndito de mi garganta.
Él, mi rival, río con fuerza y porte frente a mí. Él ya había ganado esta pelea, era sólo tortura para mí y diversión para él.
— ¡Pelea! — repitió.
Me abalancé contra él con un rugido y la mayor rapidez que mi cuerpo adolorido me permitía. Pero el me esquivo, como tantas veces, y ahora faltaba que de su último golpe.
Corría a mí alrededor y no era capaz de captar con exactitud su ubicación, ni de donde atacaría. Y lo hizo. Mi cuerpo impacto revocándose abruptamente contra el suelo y su imagen sobre mi gloriosa cantaba victoria. Llore, aullando de dolor, quejándome de su peso contra mí en el lodo.
Su mirada me penetro haciéndome entender que yo jamás le ganaría. Su respiración caliente chocaba contra mí, mientras que yo apenas inhalaba oxígeno.
El suspiro de mi padre enfurecido y cansado fue lo siguiente que oí.
— Ya es suficiente.
Ordeno.
— Ganas de nuevo, NamJoon.
Él se alejó para cambiar de forma y volver a su lado victorioso y yo levante del lodoso suelo mi cuerpo sosteniendo mi costado con mis manos, mis costillas sangraban.
Me aleje sin mirar, harto del mismo escenario una y otra vez. Harto de la mirada en sus ojos, cansado de ser un perdedor y un cobarde.
El orgullo de la familia, me pregunto si alguna vez conocí eso.
— Nadie aprende sólo ganando, Tae. — escuche como consuelo.
— Lo sé Jin. —me recosté a que curara mis heridas. — Pero es que yo nunca he ganado.
Deje que limpiara mis heridas, el agua helada calmaba el ardor pero el dolor era punzante.
— Él ni siquiera es su hijo legítimo, pero deberías ver cómo papá lo mira.
— Yo lo veo. — rió. — Es mi hermano también, igual que tú. Me alegra no ser un alfa.
— Sí... qué alegría.
— Pero tú lo eres, Tae.
— Soy débil.
— Que Nam sea hijo de otra madre no lo hace menos que tú y yo, y que tú no seas igual de fuerte tampoco te hace menos.
Después de la antigua guerra, hace años atrás, él se había ido. Desapareció y después de un año volvió, y no sólo, con ese niño de su mano. Yo era un niño, y él era mayor.
Jin jamás entendería la rivalidad que tenemos, no sólo como alfas, como hijos.
— Todos en la manada cumplen una misión, la mía es ser la vergüenza de nuestro padre ¿crees que eso me hace feliz?
— No es momento para ser feliz, Tae, estamos en guerra y clanes enteros están desapareciendo. Hacemos lo mejor que podemos con lo que tenemos. Escuche que papá hará un pacto con el Norte, uno que no nadie podría rechazar.
— Pensé que papá no apoyaba a los Park.
— Yo también lo pensaba, pero el Sur les pertenece ahora y necesitan aliados.
Guerra, pensé. Y un dolor se apodero de mis entrañas.
— Tengo un mal presentimiento.
POV JUNGKOOK
Lo vi todo ardiendo en llamas.
Todo aquello que alguna vez me perteneció y donde pertenecí.
El fuego y las llamas se levantaban hacia el cielo y la luna era testigo de la masacre que le habían hecho a mi pueblo.
Era un fugitivo ahora pero un solitario hace mucho tiempo. Siempre libre.
Ningún lugar era seguro ahora, y ya no tenía donde pertenecer. Pero alguna vez fui parte de un Clan, los Jeon, y si algo me habían enseñado es a no rendirme ante nada ni nadie. "Ni doblegado ni rendido".
Mi padre era el líder, nuestro líder, y él era como yo: un omega libre. Y su libertad y la de su pueblo le había costado su cabeza. Como forma de victoria clavaron su cabeza en lo alto de una pica.
La guerra apenas empieza.
La venganza corre por mis venas como las cenizas en el viento de lo que alguna vez llame hogar.
El Sur ya no existe, soy lo único que queda. Estandartes del Norte ahora bailaban con la brisa sureña. No había un solo sobreviviente, ningún alma ya viva. Debía escoger.
El Norte contra el Este, Park contra Jung.
En cualquier lado me venderían como ofrenda de paz, vivo o muerto y es más probable lo segundo. Los Parks me quieren muerto. Pagarían lo que sea a quien fuere por mí cabeza.
— Estoy sólo. — aullé.
Mire por última vez las cenizas de mi tierra.
— Siempre estuve sólo. —me recordé. — Juro venganza en nombre de la sangre de toda mi gente.
Corrí en la oscuridad del bosque.
— Aunque muera, la cabeza de Park es mía.
Hola :)
He estado leyendo mucho sobre lobos, me parecen animales hermosos y complejos y quiero describirlos de forma correcta.
El cap es corto, perdón, el próximo me pondré a escribirlo ahora mismo.
Intentaré que sea más interesante ¡Lo prometo! (?
Los amo♥
