Depresión en Canadá (Camila Cabello y Tú) [G!P]

Capitulo 5- ¿Eres real?

____ POV

Ya pasaron tres meses más y no veía ningún proceso con mi terapia contra la depresión

-Madre, voy a salir un rato- le avise a mi madre que estaba en la sala viendo televisión con mi padre -Ok ¿Te vas a llevar la moto?- me pregunto -No- le aclare mientras buscaba mis llaves de la casa -Ok, no te vayas muy lejos y no llegues tan tarde- me dijo mi padre y yo solamente salí de la casa.

Camila POV

-Te lo digo Dinah, correr es el mejor ejercicio- le dije a mi mejor amiga en llamada mientras corría en el parque -te creo, pero eso significa que tendría que pararme del sillón y eso da mucha pereza- escuche su queja que me hizo reír -Bueno Mila, me tengo que ir, Siope me va a llevar a una cita hoy- ella dijo -¿Para tu novio idiota si te paras, pero para acompañarme no?- le pregunte indignada. Dinah seguía andando con ese tipo que siempre se burlaba de ella, pero ella estaba tan enamorada que no se daba ni cuenta, la trataba mal y le obligaba a hacer cosas aveces, yo la mayoría de veces me negaba a ir con el a algún lado, me daba mucha rabia -El no es malo Mila- me 'aclaro' digo entre comillas porque si era malo, muy malo. Yo solo suspiré y ella intentó desviar el tema -Hablando de novios... ¿Cuando agarras alguna chica? Que ya quiero ser tía- me reí un poco por el comentario de Dinah respecto a mi pobre vida amorosa -Dinah, ya sabes lo que me cuesta coquetear con mujeres. Te debería cortar la llamada por solo mencionarlo- le dije y ella se rió en el otro lado de la llamada -Te odio- le asegure, obvio mentía -Tu me amas- me dijo y yo me reí -Es cierto- admití -Te amo más- dijo para despedirse -Bueno adiós, ya Siope llega- me aclaro ella haciendo un par de sonidos que indicaba que se estaba levantando -Adiós idiota- ella simplemente me colgó y yo me reí ligeramente para mí. Seguí corriendo y vi de lejos una chica con un abrigo, la cabeza hacia abajo y las manos en los bolsillos, se veía muy triste, demasiado. De la nada, empezó a llover, pero no una llovizna, parecía una tormenta. Saque mi paraguas, pero a la chica no parecía importarle, solo se levantó la capucha del abrigo para cubrirse la cabeza y siguió caminando con las manos en los bolsillos tristemente. Ahora yo estaba caminando, pero no quitaba la mirada de esa chica. Parecía menor y no me gustaría que alguien estuviera caminando tristemente por el parque así menos con esa edad ¿Cuantos tendrá? Creo que 16, 17, no lo sé, pero parecía muy joven.

La chica, por no ver por dónde iba, se estrello con una banca y callo al piso fuertemente. Fui corriendo a ayudarla, el golpe parecía fuerte porque se quejaba mucho y se le escuchaba desde lejos. Llegue y la chica me vio sorprendida -Ten- le dije dándole mi paraguas mientras me ponía en cuclillas para ver su herida. Como traía pantalones cortos se había hecho un corte grande, pero poco profunda, en la rodilla.

-Esto se ve mal- le dije y ella parecía tener los ojos en mi mientras agarraba el paraguas -¿Crees que te pueda curar?- le pregunte y ella solo asintió, parece que también es muda -Aquí tengo un kit, estoy estudiando para doctora, sin presumir- me reí un poco mientras sacaba mi maleta de mi espalda, ella no se rió público difícil. Puse un poco de alcohol en un algodón -Esto te va a arder, pero solo por un momento- le dije y ella solo asintió, enserio ¿Que le pasa a esta chica? -Se que soy fea, pero tampoco para que no me hables- le dije mientras le ponía alcohol para sacarle las pequeñas piedras que tenía en la herida, ella parecía no hacer ninguna mueca de dolor, parecía no dolerle en absoluto -¿Fea? Cuando te vi no sabía si eras real- me dijo con una hermosa voz suave y yo me sonroje y le regale una sonrisa mientras ponía el algodón usado en una bolsa pequeña de basura que tenía en la mochila y sacaba una gasa con un esparadrapo

-No te lo puedes quitar hasta mañana- le dije y ella perecía un poco asustada -Tranquila, no es profunda, solo es grande- le aclare mientras guardaba las cosas devuelta a la mochila y la ponía en mi espalda para levantarme -Ven, te ayudo- le dije cuando le ofrecí la mano. Ella la agarro fuertemente y yo sentí una conexión especial, parecía electricidad  -¿Puedes apoyar tu pie?- le pregunte y ella asintió. Note que lo apoyaba, pero con mucho dolor por su cara

-Cálmate, no tienes que aguantar- le agarre de la cintura y ella parecía incomoda, pero puso su mano en mi cuello mientras agarraba el paraguas.

Ella me dirigió a su casa aunque no me quería decir, no le iba a decir donde vivía yo. Ella saco las llaves de su casa y abrió la puerta -Madre, Padre ya llegue- grito y su madre salió corriendo desde el segundo piso para abrazarla y verificar que todo estaba bien, tal vez fue un poco exagerada, pero con esta tormenta cualquier cosa puede pasar

-¿Que te pasó ____?- le pregunto a la chica. ____, bonito nombre, me gusta. -Nada- dijo un poco molesta mientras entraba a la casa y se quitaba los zapatos -Se cayó en el parque cuando empezó la lluvia. Yo estaba ahí y la ayude, le puse una gasa ya que tiene una herida en la rodilla, no es tan profunda, pero es grande- le aclare a la mama que parecía muy preocupada, ella me estrechó la mano y miró atrás mío -Dios, esto parece una tormenta. ¿No quieres pasar?- me preguntó amablemente -No gracias señora, no me gustaría estorbar- le dije y ella gruño disgustada -Vamos tu no estorbas, ayudaste a mi hija, es lo menos que puedo hacer- me dijo y yo no me negué por amabilidad.