Diario de una adolescente

XXXVIII

Y es que me cuesta...Me cuesta avanzar.
Me siento como cuando eres pequeño e intentas subir al revés las escaleras mecánicas del centro comercial o del metro... que por más que lo intentes no consigues nada...Pues así me siento...
Me consumes.
No sabes hasta que punto me consumes.
Y es que estoy llegando al límite, al límite de mandar todo por lo que he luchado a la mierda.
Estoy llegando a un punto en el cual me estas dando igual y no me gusta.
No quiero que me des igual. Quiero enamorarme de ti otra vez. Pero te odio.
El dia de mi cumpleaños no tuve valor de decírtelo a la cara, pero si, sentados en un banco, yo llorando como gilipollas, te dije que te odiaba.
Está llegando ese día, ese el cual no quería que llegase...
Estoy seleccionando los recuerdos para hacer la maleta e irme.
Y yo sigo esperando a que me pares, pero quizás quieres que me vaya.
Y pasará otra vez. Que leerás esta historia y no serás capaz de contestarla, sabiendo perfectamente que es para ti.
Ya no se si me follas o me haces el amor.
Si tus besos son verdaderos o solo transmiten placer...
Te desconozco.
Y aquí me tienes, escribiendo un capítulo más, con lágrimas en los ojos...como cada noche.