Falte a clases durante una semana porque no sabía cómo hacerle frente a esta situación.
La empresa de papá había quebrado, lo cual no me sorprendía considerando que pasaba la mayor parte del tiempo borracho. Mamá no lo soportó y había decidido irse, nadie sabe a donde, junto al jardinero.
Yo tenía dieciséis y no me queda otra opción más que soportar este lugar.
Pero de pronto ya no quería estar encerrada en mi habitación llorando y decidí ir al Instituto otra vez. Fingí que todo estaba bien, pretendí ser feliz.
―Pareces muerta ―Me dijo Castiel una tarde. Al parecer no estaba fingiendo bien.
ESTÁS LEYENDO
Corazón de melón: cuándo y cómo lo perdimos
FanfictionSupongo que algunas personas no están hechas para estar juntas, o tal vez si lo estábamos pero jamás hemos sabido jugar las cartas correctas. Quizás...A veces el destino simplemente dice que no. Esta historia contiene personajes, diálogos y situaci...