El final (Libro 1, Saga Broken)

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-Sé que nada cambiará lo que viví.

>>Aquel hombre hizo todo para destruir mi sueño... Y ahora, es mi turno de retribuir lo que merece -me digo, mirando mi reflejo en el espejo, lleno de ojeras por el insomnio y las largas noches en la que derramé todas las lágrimas que no volveré a dejar salir.

Ahora es mi turno de jugar, Oleg Jones.

Estoy repasando mi plan con mi amiga Oriko.

Debo "enamorar" al maldito de Oleg, hasta el punto de hacerle desear estar muerto...

Porque mi hermana Luce, sufrió la misma pena al enredarse en un desliz con ese patán y mujeriego.

Luce no pudo elegir. Para escapar del dolor de su abandono, decidió terminar con la poca vida que le quedaba antes de tiempo. Porque ella estaba enferma; pero a pesar de eso, seguía amando la vida a tan corta edad, sólo tenía veinte años y así y todo, se llevó con ella mi vida.

Primera etapa de mi venganza:

Estoy maquinando mil y un razones para destruir moral y psicológicamente al inalcanzable mujeriego de Oleg Jones.

Mi venganza ya está en proceso al dar con la información que me permitirá anular todo su mundo de brillante oro y fiestas sin fin.

Estoy entrando al edificio de Jones Inc. Todo alrededor es tan pulcro y prolijo como la imagen inmaculada de la familia dueña de esta firma.

Mi entrevista para asistente del gran y enigmático Oleg Jones está en espera.

-Señorita Efendi, por favor... Adelante -me comunica la secretaría de la gerente de Recursos Humanos a cargo de mi entrevista de trabajo.

Entro con confianza y seguridad. Debo hacer mi mejor papel para llevar mi plan exitosamente.

-¡Buenas tardes! Siéntese, por favor...

-Gracias -digo en un tono suave.

-Tenemos un cambio de último minuto. El señor Oleg Jones va a estar presente en su entrevista.

¡Mierda! Voy a conocer al maldito que terminó con la vida de mi hermana, aquí, justo ahora...

Se abre la puerta lentamente; entra él y mi mundo se sacude patas para arriba.

-Señorita Efendi -dice el hombre que expira orgullo y soberbia al hablar.

>>Estaba deseoso de poder conocerla en persona. Vi su currículum... Me ha dejado sinceramente impresionado; tanto, que he querido estar presente en esta entrevista.

-Oh. Gracias. -Sólo atino a decir al demonio que se cierne ante mí.

-¿Por qué quiere este empleo de asistente, pudiendo aspirar a más? -pregunta decidido a no dejar pasar mi estado de nervios.

-Porque es una gran oportunidad. Comenzar de abajo, ganar experiencia...

-Bla, bla, bla... -me corta de forma abrupta.

¿Pero qué se cree?

-Resumiendo: quiere este empleo por el prestigio que trae consigo, ¿cierto?

-Así es -respondo seca.

-No dilatemos más el asunto: queda contratada.

-P-Pero... Señor Jones... no quiere saber más de ella, de su formación, etc... -acota la hasta ahora ausente gerente.

-Es bonita. -culmina mi nuevo jefe, dando un portazo tras de sí.

¡¿Qué es esto?! ¿Tan fácil es entrar al mundo del inalcanzable playboy de la ciudad?

Mi plan de venganza comienza al fin.

Punto número 1: Seducir a mi jefe hasta que me suplique que ceda ante él.