Necesitaba cada parte de él. La calidez de sus labios posados sobre los míos, su cuerpo apretando el mío, su mirada fija en la mía.
Mi vida era de lo más patética y normal, hasta la llegada de ese hombre: Agustín Bernasconi. Aunque no es cualquier...
Durante toda la noche, mi madre hacia preguntas sin parar. Agustín y Belén se quedaron en el sofá del living, mientras que yo me subí a mí habitación. Me sentía incómoda estar entre ellos dos. Es literalmente el primer novio formal de Belén y aún me resulta extraño.
Estuve pensando toda la noche en esos ojos tan intimidantes de Agustín y esa sonrisa que me hace tener escalofríos. Joder, Es el novio de mi hermana. Sin embargo, mi yo pervertida no dejaba de pensar en él.
Esto es enfermo.
No pude dormir en toda la noche pensado en él. Mire mi celular, joder, no dormí nada. Son las seis de la mañana y todo aún sigue oscuro. Baje las escaleras con cuidado y haciendo el menor ruido. Me detuve en seco en el segundo escalón al escuchar gemidos que provenían del living. Estaba nerviosa. Me siento como en un vídeo porno, oh algo parecido. Por simple curiosidad, miro con mucho cuidado. Y los veo, Agustín y Belén. ¿En serio? No tienen ningún respeto.
— Ah, ¡Oh sí! — Gime belén agitada.
— Oh, si nena.— Gruñe Agustín — ¿Te gusta?
— Sí Agustín... –Vuelve a gemir.
Me quede paralizada. Se veía que belén lo distrutaba, y no pude evitar sentir algo extraño en mi estómago al pensar que posiblemente esa puedo ser yo. Carajo Carolina, ¡Basta!
Soy una maldita enferma.
Los gemidos y respiraciones agitadas hacían eco por toda la casa hasta que pararon. En ese momento me fuí corriendo hacia mi habitación a toda prisa. No quería que descubrieran que los estuve espiando como una maldita psicópata. Traté de volver a dormir pero fue inútil, solo pensaba en lo que había presenciado hace unos momentos.
El sol comenza a salir. Afortunadamente estoy de vacaciones. Así que puedo dormir todo lo que quiera, y eso es la gloria. Me levanté, me fuí a duchar y hacer todas mis necesidades. Cuando acabe todo lo que tenía que hacer, baje hacia la cocina y ahí estaba, Agustín, belén y mi madre. Ellos voltearon a verme, y me puse un poco incomoda. No volveré a levantarme tarde.
— Buen día, Caro ¿Cómo amaneciste? – dijo mi madre tan alegre.
– Bien, eso creo. - Digo con un suspiro.
Sentía la mirada de Agustín sobre mi pero trataba de ignorarla, pero era inútil.
- Bueno. Yo me tengo que ir - Añade mi madre - adiós hijas - nos dio un beso en la mejilla - Adiós Agustín - le dijo y repitió la misma acción y se fue.
Éste momento fué el peor momento de mi vida estaba súper incómoda.
- Perfecto. - dijó belén - Voy a ir a comprar varias cosas para la boda ¿me quieres acompañar? - dijó acercándose a mi.
- No puedo, quedé de verme con valu. – dije tratando de no sonar tan nerviosa .
- Bien, Como quieras. Regreso hasta la noche, depende del tránsito. - dijó dándome un besó en la mejilla - adiós amor - dijó dándole un besó en los labios de Agustín y se fue.
Mé quedé solá con él era algo raro y con un silencio incómodo hasta que rompió el silencio.
- ¿Que vas hacer? - dijó Agustín mirándome lo cual mé ponía nerviosa.
– Supongo que saldre. - dije mirando hacía otro lado no lo quería ver si no me pondría nerviosa.
-¿Porqué no me miras? - dijó acercándose a mí - Acaso, ¿te pongo nerviosa? - dijó agarrandome mi cintura y aprentandola pará qué me hacer cara mas a él.
- No.. - dije mordiendome el labio - ¿Me puedes soltar? Por favor
- No. - afirmó y me apretó más hacía el me erizo la piel de gallina.
— ¡Suéltame!
Susurro en mi cuello — Eres hermosa ...
Hola 🦄
LEER [EDITADO] Wow, realmente escribía tan mal, Estaré editando los capítulos ya que tienen una terrible ortografía y muy mal narradas. Estoy mejorando y hago lo que puedo, Gracias.
Esperó qué les allá gustado éste capítulo.
Antes que todo está es belén ⤵
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