Encadenada Oscuridad.

Capitulo XV

Diciembre 26, 2017.

Miro la piel de mis muñecas, ya está rosa a causa del metal, igual que mis tobillos. ¿No se conformaba con solo dejarme encerrada? ¿Era necesario encadenarme? Por supuesto, para satisfacer su locura.

Trato de recordar en que momento fue que me atraparon, pero nada. Es como si tuviera lagunas mentales.

Me apoyo en la silla y pienso en Tobin, en Tim, Sierra, en Carisa, en Lucas, en Andrew.

Pienso en como de un segundo a otro pierdo lo que alguna vez tuve, la vida siempre es así, ¿no es así?

Tuve el mejor padre. Lo perdí.
Tuve el mejor hermano. Lo perdí.
Tuve los mejores amigos. Los perdí.
Tuve la segunda oportunidad de ser feliz. La perdí.

Ahora solo debo esperar a que me deparará el destino. Que perderé ahora.

Febrero 14, 2017.

― ¿los negros? O ¿los crema?-me preguntó Carisa con un par de zapatillas de tacón fino en cada mano.

― Los crema-le dije pensado con cual  quedaría mejor con su vestido.

― Pienso igual.-se los puso y luego caminó de un lado al otro en la habitación-Me siento como una modelo de Victoria's Secret.

― Te ves genial-le dije sinceramente, ella me miró con los ojos entrecerrados.

― Te toca.

― No. Tu tendrás una cita, no yo.

― Chess, por favor. Sé que a ti solo te gusta la ropa dark. Tengo un vestido que nunca he usado porque no me -se aclaró la garganta-¡No me queda!-chilló-lo compré el pasado invierno y nunca me cerró el cierre en la cintura. Te lo mostraré.

Abrió su armario y extrajo algo. Lo colocó al frente de ella con una sonrisa. Era un vestido de un color rojo quemado, un rojo opaco. Era sencillo pero formal. Me levanté, lo tomé y me coloqué frente al espejo, era un vestido muy hermoso.

― Es hermoso ¿cierto?-dijo Carisa detrás de mí.

― No puedo aceptarlo, tú te mueres por usarlo.

― Sshhh- sonrió-Quiero que mi amiga lo use esta noche.

― Es muy corto y estamos en invierno-dije

― Se puede solucionar con un par de medias negras.

― Carisa. -suspiré-Gracias.

Me abrazó-no es nada, Chess.

***

Después de terminar de vestirnos nos maquillamos y peinamos. Ella quiso hacerme ondas en el cabello, pero eso me recordaba a Sierra.
Escuchamos una bocina de un auto. La mamá de Carisa llegó a la puerta de la habitación de Carisa y nos sonrió.

― Están hermosas, chicas-dijo acercándose.

― Gracias -dijimos al omiso.

― Los chicos las esperan afuera.

― Perfecto. Espero que sea un lindo lugar. Espero que estemos bien vestidas...

― Carisa-suspiró su mamá.

― Te imaginas si nos lleva a un lugar donde hay que ir con vaqueros... ¡cielos! Nosotras estamos usando vestido y ¡zapatos altos!

― Carisa cálmate-dijo su mamá.- lo importante es que se diviertan, ¿está bien?

Carisa relajó sus hombro y sonrió-Tienes razón, gracias.

Nos despedimos y salimos. Ambos estaban fuera del auto. Nos acercamos.