Capítulo 11

790 94 10
                                    

Monitor cardíaco: Parte 1.

—Mira, quién quiera que seas, te he mandado a buzón cinco veces porque estoy tratando de dormir; no ayudas. —Del otro lado de la línea hay silencio y eso me hace querer gritar, pero solo suelto un suspiro. No es culpa de la persona tras la llamada que tenga tantas pesadillas que no pueda conciliar siquiera un poco de sueño—. Bien, ya contesté, solo dime qué pasa, quién quiera que seas.

Soy Allison —dice una voz apenas audible del otro lado.

Miro el celular extrañada y me siento en la cama.

—Oh, hmm, hola —suelto por fin.

Hola, yo... quería pedirte una disculpa por lo que mi padre le hizo a ese puma, miré lo mucho que te afectó. —Asiento a pesar de saber que no puede mirarme, pero no digo nada más—, justo en este instante estoy redactando una carta para protección animal y estoy casi segura que hiciste más o menos lo mismo.

—¿Por qué? —pregunto finalmente después de unos segundos de incómodo silencio.

¿Eh?

—¿Por qué estás tan segura?

Bueno, sé de la veterinaria, además creo que fue un poco obvia tu indignación. Lloraste frente al puma...

—Se llama sensibilidad —replico tan bruscamente que alejo el celular un segundo para reprocharme a mí misma. Qué asco doy—. Lo siento, no he dormido muy bien desde entonces.

No te preocupes, tengo entendido por tu saludo que no te estoy ayudando mucho. —Suelta una risita y yo vuelvo a asentir—. Oye, sé que no va al caso, pero ¿sabes algo de Scott?

Frunzo el ceño y evito decir algo como: ¿debería?

—No en realidad. No somos muy cercanos —contesto antes de poderme arrepentir. Él me sostuvo en mi ataque frente al puma, trabajamos juntos y pasamos el rato en la escuela con Stiles; más obvia no puedo ser.

—Es que no me contesta las llamadas y ni siquiera se ha aparecido por mi casa... —Hago una mueca y no digo nada—. Lo siento, no va para nada al caso. Gracias, y de nuevo lo siento.

—Diles en protección animal que la especie atentaba contra la seguridad pública, además de estar fuera del hábitat natural; la acción de tu padre fue necesaria y de último momento, no había de otra.

—Gracias...

—Aún no enviaba mi carta, no creo que lo haga; es muy mala de todas formas.

—Con lo que acabas de decir creo que seguro salió increíble.

—En realidad solo despotricaba contra tu padre y lo tachaba de un ser sin alma o sentimientos. —La línea se queda en silencio, pero por algún motivo sé que ella sonríe—. Adiós, Allison.

—Hasta luego, Grace.

Cuelgo y con un suspiro registro el número. Nunca se sabe cuándo necesitare llamar a la hija de un cazador experto.

🐾🍃🐾

Debo decir que ha sido sumamente tranquilizador no ver a Scott desde el incidente. Nadie rumorea al respecto y sin ánimo de investigar el porqué, sigo con mi rutina diaria.

Cuando llego a mi casillero busco los libros de mi siguiente clase y sé que es con Stiles y Scott, así que no me sorprende ver la sombra de alguien (el menos tonto seguramente) acercarse. Lo que me sorprende es que la sombre desaparece rápidamente.

do you wanna something natural? | scott mccall | natural#1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora