Lucky [YoonMin]

C U A T R O

—Jimin, puedes sacar dos fotocopias de estos documentos por favor y traerme un café.

—Claro. —el castaño se acercó y tomó una carpeta con unos cuantos papeles en ella y salió de la gran oficina.

En la mañana cuando despertó en la casa de Yoongi casi se muere de vergüenza, y es que; ¿quien no lo estaría si entras al baño cuando tu jefe se esta duchando justamente ahí?

—¿Cansado? —preguntó Lisa, una de las secretarias.

—Un poco.

—Debes estarlo, ¿cuantas copias te saco?

—Dos por favor.

—Oye... No es por nada pero, ¿el jefe no es un poco bastardo? Él sabe lo que paso ¿no? Y aun así te hace venir a trabaja...

—¿Puedes dejar de hablar así de él? No sabes todo lo que Yoongi a hecho por mi, él es una gran persona. Te pido no critiques a las personas si no las conoces. —interrumpió a la chica dejándola callada; y sin mas, Jimin tomó las hojas que habían salido de la fotocopiadora para luego dirigirse a la oficina en la que antes estaba.

—¿Pasó algo? —Preguntó el peli negro cuando vio a su asistente entrar a su oficina con la cara roja y el ceño un poco fruncido.

—N-no...

Yoongi frunció su nariz, era obvio que algo había pasado, y el que Jimin se lo intentara negar le hacia enojar un poco.

—Jimin, ¿qué paso? —volvió a preguntar cuando se acercó hasta quedar enfrente del castaño.

—¡Q-que algunas personas son tan tontas! Hablan mal de otros cuando ni siquiera conocen como es esa persona. Tú eres taan maravilloso, y no mereces que hablen así de ti. —Soltó Jimin con frustración terminando con un largo suspiro.

Yoongi alzó las cejas ante tal confesión, la verdad es que le importaba una mierda lo que gente pensara de él. Pero eso ultimo de Jimin hizo que en su cara apareciera una hermosa sonrisa ladina.

—¿Por qué sonríes? Deberías de estar molesto. —dijo para luego dar un suave golpe en el pecho de su jefe.

—Eso sonó como una confesión ¿no lo crees?

Y en ese momento Jimin no podía estar mas rojo, se podría confundir con un tomate. ¿Por qué Yoongi lo ponía a veces tan nervioso? ¿Por qué su corazón latía taaan rápido en ese momento? Intentó tapar su rostro con una de sus manos e intentó salir de la oficina, pero Yoongi le tomó de la cintura con su brazo derecho y con la otra mano le tomó la barbilla para que lo mirara a los ojos.

—Te ves muy lindo sonrojado.

—¡Yoo-Yoongi! —respondió Jimin apunto de morirse la vergüenza.

No supo por qué, pero su vista fue a los delgados y rosados labios de Yoongi, el ambiente en la oficina cambió. ¿Era solo él o hacia calor? Miró al peli negro observar sus labios e instintivamente los humedeció con su lengua. Su respiración era cada vez mas irregular y sentía como el agarre de Yoongi lo acercaba mas a su cuerpo.

Un pequeño beep beep beep hizo que se alejaran, ninguno sabia que era lo que estaban apunto de hacer, pero gracias —o se podría decir por desgracia—. al celular de Jimin no ocurrió nada.

—Hummm, saldré a contestar. —dijo en voz baja sin esperar una respuesta, quería escapar lo mas rápido posible de allí.

—Hola, habla Zusie del Jardin YM. Queremos hablar algo con usted de Sanha.

—¿Le pasó algo? ¿Esta bien? —Respondió Jimin comenzando a temblar por el miedo de pensar que Sanha estuviera mal.

—No, no. Él esta bien. No es grave, solo queremos hacerle unas preguntas. Podría ser cuando venga a recogerlo.

—Oh, sí. Esta bien. Entonces la veré luego.

—Muy bien, hasta luego.

Tendría que terminar su trabajo muy rápido el día de hoy.