Legion Warrior - 013 Destino

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Los ojos de James se abrieron lentamente y el flashback de la noche pasada llegó a su memoria de impactandolo como un rayo.

-¿Donde estamos?- pregunto el chico mientras se incorporaba.

-Estas en mi casa- respondió white tigre sentada en una pequeña mesa frente a él mientras cortaba una manzana.

-Creí que irías tras los agentes- exclamó James mientras examinaba minuciosamente el lugar.

Era un departamento pequeño, no tenía muchas cosas, solo podía ver la mesa donde estaba la chica y el sillón en donde él pasó la noche inconsciente.

-Ese era el plan, hasta que te desmayaste y tuve una lucha interna entre mi venganza o dejarte ahí tirado- respondió ella al tiempo que se levantaba de su asiento para darle una rebanada de manzana a su invitado.

-Supongo que fue una decisión difícil, gracias- exclamó James mientras tomaba la pieza de manzana.

-En realidad no lo fue, creo que sí te ayudo, tú podrías ayudarme... lo que pasó anoche hizo que me diera cuenta que no puedo hacer esto sola-

-¿Que tienes en mente exactamente?- cuestionó el chico intrigado.

-Voy a ayudarte a controlar tus poderes, te ayudaré a superar tus límites actuales, para que puedas serme útil cuando te necesite-

Exclamó fríamente la chica.

-¿Dónde está tu traje?- preguntó James

-No lo uso en casa-

-¿Cuál es tu verdadero nombre?-

-Comienzas a molestarme con tantas preguntas chico...-

-Me llamo James-

La joven solo dió un suspiro y respondió:

-Me llamo Kate, y ya no hagas más preguntas por ahora ¿entendido?-

James solo asintió con la cabeza.

Kate era un lindo nombre pensó, le queda bien con su rostro fino, su cabello castaño largo y lacio. Su actitud era muy seria, su vestimenta muy sobria, a primera vista no se veía muy femenina, por el contrario toda su expresión corporal irradiaba enojo y frustración, sin duda ocultaba un pasado terrible por el cual James aún no se atrevía a preguntar.

Luego de unos minutos de silencio, Kate se levantó de su silla y le dijo a James que la siguiera, salieron del departamento. Ella vivía en una zona no muy vistosa, las paredes del vecindario estaban grafiteadas, la gente en la calle no se veía muy amistosa, todo el ambiente hacía que James se preguntará más sobre "¿Qué tipo de vida ha estado viviendo esta chica?".

Luego de caminar varias cuadras sin decir ni una palabra en todo el camino, finalmente Kate pronunció:

-Llegamos-

James levantó la mirada y pudo ver un letrero despintado, sucio y cayéndose a pedazos que decía "Cafetería Dest..." el resto del nombre era totalmente ilegible a causa del mal estado, el chico estaba confundido, no sabía dónde estaban, que había ahí, o para que lo habían llevado tan lejos, pero no tenía otra opción más que seguir adelante si quería respuestas.

Al abrir la puerta una campana sonó, anunciando la llegada de un nuevo comensal.

-White Tiger, qué gusto verte- exclamó un hombre del otro lado de la barra mientras servía café en dos tazas frente a él.

-¿Verme? De qué mierda hablas, si tú no ves ni un carajo- exclamó la chica no muy contenta.

-Oh querida, sabes muy bien que yo lo veo todo- respondió el tipo con una sonrisa incómoda en el rostro.

Los chicos se acercaron a la barra y Kate no dudó en tomar uno de los cafés frente a ella.

-Dime cariño, ¿qué te trae por aquí?-

La chica respondió con una risita burlona y dijo:

-Creí que lo veías todo...-

-Y así es, pero tu amigo necesita que le expliques algunas cosas- dijo el hombre de tez morena manchada por los signos de la edad, su cabello era blanco como la espuma sobre el café que estaba sirviendo, y llevaba puestos unos curiosos lentes negros a pesar de estar a media penumbra en el local.

-¿Donde estamos?- fue lo primero que preguntó James.

-Estas en mi cafetería chico, mi nombre es Cristoff ...-

-¿Entonces usted es el dueño de este lugar?¿Qué hacemos nosotros aquí?-

-si, soy el dueño James y antes de que preguntes también tengo "habilidades especiales" no eres el único super humano en el mundo, habemos más ocultos en todas partes. White Tiger te trajo porque quiere que vea su futuro y le diga si vale la pena entrenarte-

James se quedó perplejo un instante, no sabía que le impactó más, si el hecho de que supiera su nombre, la confirmación de que existen muchas más personas como él, o que su singularidad tenga algo que ver con predicciones. El chico tardo un momento analizado la situación y finalmente se decidió a hacer la pregunta que le carcomía el alma desde hace varios días. Pero apenas abrió la boca fue interrumpido por el extraño sujeto...

-Tus padres estan bien, siguen con vida-

El chico estaba perplejo, había rogado al cielo día tras noche para oír esas palabras, sin embargo no era suficiente saber que estaban bien.

-¿Dónde...- James fue interrumpido

-Sé dónde están, pero aún no estás listo para ir por ellos, necesitas ser más fuerte, además no puedes ir tú solo...-

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