A penas llegamos a casa ciento un gran alivio, hogar dulce hogar. Bajamos del auto y el equipaje y caminamos hasta la gran casa que comparto con Ben, ambos vivimos juntos y eso está bien para mí porque no me gusta estar sola, odio los silencio y creo que una parte de mi un quedo traumada por todo lo que pase, dicen que el silencio es el mejor lugar para pensar pero es pura mierda porque para mi se siente como el infierno.
Desde hace unos minutos vi a Ben muy raro, tenía esa manía de morded su mejilla y eso lo hace cuando está nervioso y sé que me está ocultando algo y joder se que no me va a gustar por la mirada que me lanza antes de entrar, no voy a mentir extrañe mi casa, al entrar se siente la calidez que no si entes en un hotel, la casa es totalmente blanca de dos piso con grandes ventanales, también quise que hubiera mucha luz, porque odio la oscuridad, si otra parte jodida de mi, tiene un gran jardín, una gran piscina, ocho habitación con su baño, una sala de cine., sala de juego y un gimnasio.
Escucho murmullos y dejo el equipaje en el suelo, y camino hasta la voces pero Ben se interpone antes que lo haga, el va hablar pero una voz no grata para mi se escuchar cerca y mas cuando dice mi hombre.
—Pero si la estrellita de la familia ya llego.
Frunzo el ceño y tengo que respirar varias veces, Casandra es mi hermana o como la llamo yo una pierda en el zapato, ella no lleva mi sangre por la razón que Ben y yo somos adoptados. Ella me odio desde el primer momento en que me vio, yo trate de establecer una conexión con ella pero no resulto así que deje de intentar y empecé a lanzarle la misma mierda que ella me daba a mi.
—Veo que la hipocresía sigue siendo lo tuyo—Ella frunce el ceño y sonrió—Quisiera decir que estás en tu casa pero lo menos que quiero es que estés aquí—Respondo con frialdad.
—Susan...
—Tu cállate Ben, ¿Tan difícil es decirme que ella iba a estar aquí? —Pregunto realmente enojada.
¡¿Es que no puedo llegar tranquilamente a mi casa?! El ve hacia otro lado vitando mi mirada porque sabe que no estoy muy feliz con esto, de nuevo empiezo a escuchar voces y cuando ve quien es puedo sonreír con tranquilidad.
— ¡Nathan! —El ríe mientras ve que corro hacia el y me lanzo en su brazo— ¿Pero qué haces aquí? —Pregunto sorprendida a ver a mi hermano mayor aquí.
Nathan también en otro de mi hermano y con él al igual que Marian me llevo bien, ellos supieron aceptar a Ben y a mi en su familia a excepción de Casandra.
—Pues vinimos a verte, te extrañamos mucho y mamá y papá no han dejado de estar inquita por ti desde el concierto donde todo salió mal.
Asiento, esa es una de las causas por la cual Steven quiere que tenga más personal de seguridad, lo abrazo un poco mas y veo a Marian salir de la cocina con unas galletas en su manos, ella siempre está comiendo y es impresionarte que nunca engorde, ella me ve y grita antes de correr hacia mí y separarme de Nathan para abrazarme, el mayor es Nathan tienes treinta seguido de Marian que tiene veintiocho y Casandra tienes veinte, Ben tiene veinticinco y yo veintitrés, por supuesto ella es la menor así que también es la más consentida, no me quejo porque a pesar de todo lo que mi hermano y yo vivimos tenemos una gran familia, unos hermanos y padres que a pesar de no ser de su sangres nos aceptaron y nos amararon tan como somos.
— ¡Mi hermanita la llego! —Grita Marian.
—Si ya llegue—Reímos— ¿Cuándo será el día que yo no te vea comiendo he?—Bromeo.
—Pues cuando deje de haber comida tan rica en el mundo, Susan sabes que amo comer y joder lo que cocina Ben sabe exquisito y las galleta que hacen son la mejor que he probado ¡Así que déjame comer mujer!
Rio. Me encanta la personalidad de Marian, mamá y papá salen de la cocina también y corro hacia ellos y los abrazo, aunque no sean mis padres de sangre, los amo. Como dice el dicho padre es el que cría. Ellos son las mejores personas que he conocido en mi vida a parte de Marian y Nathan. Casandra solo es Casandra.
— ¡Mamá, Papá! Están aquí.
—No podíamos perdernos la llegada de nuestras estrellita—Sonrió mientras abrazo a papá
Todos caminamos hacia la cocina mientras le platico sobre mis conciertos, ellos me escuchan con atención, no puedo evitar estar feliz a contar toda mi gira, Ben a mi lado me abraza y el sabe que no puedo estar molesta con el, en un tiempo éramos el y yo, y ahora somos una gran familia.
—Me gusta escucharte feliz cariño—Dice mamá—Se cuanto amas cantar pero estoy preocupada por lo sucedido en Argentina, casi me muero a leer las notica.
—Es cierto hermanita—Habla Nathan con su voz gruesa—Tiene que contratar mas seguridad.
—Y lo hare, después del concierto que de aquí en Londres, Steven también me lo a dicho y el ya se puso a trabajar en ello.
—Ese hombre ¡Dios! Es tan apetecible, provoca lamerlo por mucha partes.
— ¡Por dios Marian! ¿Pero qué dices? —Grita mama escandalizada.
—La verdad mami, solo la verdad.
Todos reímos mientras mamá niega con la cabeza en modo de desaprobación, seguimos platicando y sonrió cuando todos comemos en familia. Tenía casi cinco meses sin verlos, los extrañe a todos, extrañe cada momento con ellos, eso momento que no tuve desde pequeña. Ben me mira fijamente y le sonrió, el me conoce demasiado y sabe lo que estoy pensado. Rio con las ocurrencias de Marian, los chiste malo de Nathan, las bromas de papá, todo es perfecto y quiero que sea asi siempre.
Tres horas después todos se despiden de mí porque según tengo que descansar, le digo que se pueden quedar pero todos se niegan, Ben y yo lo vemos desde la puerta de la casa irse, solo nos quedamos el y yo, desde que tengo memoria siempre hemos sido el y yo, y tengo miedo que siempre sea así, de que nunca encontremos a alguien a quien a amar, a que no podamos ser feliz por completo por todo lo dañados que estamos por dentro, por los baches.
— ¿Has pensado en casarte Ben? ¿En encontrar a la mujer que pueda amar y entregar todo de ti? —Pregunto mientras tomamos sentamos en el mueble.
—Si, lo he pensado varias veces, quiero tener mi familia Susan, y que cuando lo tenga no pasen por lo que nosotros pasamos pero no es tan fácil, no cuando no encuentras a esa persona.
Asiento y proceso todo lo que a dicho, si no es fácil, no es fácil porque a cualquiera no se le puede entregar el corazón. A veces a pesar de tener un poco o mucha felicidad, sientes que no estas completo, de que te falta algo. Hemos pasado por cosas que yo me esfuerzo por borrar, por no tenerla en mi mente pero no es fácil sabiendo que no puedes borrar esos recuerdos.
Me despido de él y subo a mi habitación, entro y me dejo caer en mi cama, y sonrió feliz de estar acostada en ella, mi habitación tiene una gran ventada la derecha, se puede ver las otras casas pero también tengo una maravillosa vista del cielo y más a hora que ahí luna llena. La veo por varios minutos, contemplando su belleza y lo brillantes que es. Pienso de nuevo en las palabras de Ben y yo también quiero eso, encontrar a un hombre que me ame, que me apoye pero es difícil y mas para mi siendo yo cantante.
Me paro y me cambio de ropa por una mas cómoda, pongo la alarma para levantarme temprano para la prueba de sonido y después el ultimo concierto de la gira. Ha sido los mejores casi cinco meses de mi vida, cierro los ojos y empiezo a recordad cada momento en los concierto, los gritos de felicidad, todos gritando mi nombre y cantando mis canciones, es lo mejor.
Tengo tanto miedo de entregarme a alguién y que, con el simple hecho de saber mo pasado se marche de mi lado, ¿Por cuanto tiempos tendre miedo? ¿Por cuento tiempo ellos seran mis pesadillas de cada noche? ¿Tendré ese amor algún dia?. Con eso pensamiento e interrogante me quedo dormida.
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Cayendo Por Ti.
RomanceSusan Davis es la cantante del momento el Landres y el mundo, tiene el mejor hermano del mundo o así lo describe ella, tiene los mejores padre así no sea de sangre, ama estar en el escenario, ama cantar, le encanta escribir canciones de los mejor y...