Cap.16

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-Oh, estás con una chica, lo siento –Rió un poco apenada y luego cerró la puerta-

-... -Me quedé en silencio unos segundos mirando a Armin-

-¿Qué pasa? –Me miró-

-No lo sé, ¿Crees que tu mamá pensó mal o algo? –Hice un gesto de incomodidad-

-¿Por qué debería? –Alzó una ceja-

-Hay una chica en tu habitación, con tu ropa, mm...

-Pero sólo estábamos jugando, no te preocupes tanto Sucrette –Me sonrió con seguridad-

-ARMIN LLEGÓ TU PIZZA –Su madre gritó desde la cocina-

-Ven vamos, te los presentaré –Se levantó y me extendió la mano para ayudarme-

-Pero... ¿Con esta ropa? –Lo miré apenada-

-Yo opino que te ves adorable ¿Cuál es el problema? –Rió-

-Bieeen –Suspiré-

-Oye tranquila, en serio –Sonrió mientras agarraba mi mano delicadamente para luego salir del cuarto- Mamá, papá, quiero presentarles a alguien.

-Oh por Dios, esto es increíble –Dijo la mamá sorprendida- Te dije que podía ser su novia, nunca había traído ninguna chica –Miró a su esposo-

-¿Q-qué? –Dijimos Armin y yo al unísono confundidos-

-Tiene su ropa y están de la mano –Sonrió-

-... -Armin y yo nos soltamos las manos rápidamente-

-No no mamá, ella no es mi novia, es Sucrette una amiga del instituto –Sonrió-

-Oh... Lo siento linda, no quería incomodarte –Me miró-

-No se preocupe –Le sonreí amablemente-

-Bueno... Sucrette estos son mis padres –Sonrió Armin mientras se dirigía a la caja de pizza que estaba en la mesa-

-Soy Arnaud –Dijo el padre extendiendo su mano-

-Un gusto –La tomé amablemente-

-Y mi nombre es Victoria –Su madre sonrió-

-Le sonreí de vuelta-

-Ahora que todos se conocen, iremos a mi habitación a comer pizza y jugar –Sonrió Armin mientras sostenía la caja de pizza-

-Está bien cariño diviértanse –Dijo su madre, y luego nos dirigimos a su habitación-

-DÉJAME ALGO DE PIZZA –Gritó su padre a lo lejos-

-Tus padres son muy amables –Reí-

-Lo sé, son increíbles –Puso la caja de pizza en una pequeña mesita y nos sentamos en los puff de nuevo-

-¿Sabes por qué me gusta tanto la pizza? –Me miró-

-No lo sé, dame tu dato curioso –Reí y él igual-

-Porque me permite comer y jugar al mismo tiempo –Suspiró feliz mientras llevaba un pedazo de pizza a su boca-

-Tienes razón, es genial –Asentí-

*Comimos y jugamos por un rato más, hasta que decidimos que ya era hora de irme a mi casa, Armin trajo mi ropa ya seca y yo me cambié en el baño, cuando salí, él también se había cambiado*

-Hasta luego, fue un gusto conocerlos –Me despedí de los padres de Armin con una sonrisa-

-Igualmente Sucrette –Dijo Arnaud-

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