Mingyu adoraba pasar las vacaciones de verano con su abuela. No solo porque era divertido y aprendía a cocinar y hacer postres, también porque veía a su mejor amigo, Jeon Wonwoo. Mingyu sabia a la perfección que Wonwoo no era cualquier niño, era un demonio llamado Belsewon, lo sabia porque su abuela le enseño todo acerca de estos seres y como invocarlos.
Wonwoo nació de los malos deseos y pensamientos de la gente callada, claro que hablaba pero se limitaba a hacerlo. Tomo la forma de un niño ya que ese era el deseo de su invocadora cada vez que su nieto venia de vacaciones.
—Sigo sin entender porque debo de tomar el aspecto de un mocoso cada vez que el engendro de tu engendro viene de visita—. Belsewon se quejaba mientras esperaba en la parada de autobuses con la anciana
—Para que juegues con el, seria raro que vieran a un adulto con piel pálida y ojos fríos jugando con un niño, ¿no crees?—. La abuela tejía una manta para su nieto mientras escuchaba las quejas.
Wonwoo cruzo sus brazos, no podía hacer nada, la mujer lo invoco de un modo para que cumpliera todos sus caprichos y para que no tomara su alma después de que muera. La familia Kim ya era familiar con Belsewon desde hace cuatro generaciones pero tenia su recompensa, la familia Kim no era malagradecida ante los servicios del demonio.
El autobús paro, las personas salían una por una, hasta que salio un niño de piel morena de aproximadamente 12 años corriendo hacia su abuela y el demonio para darles un abrazo.
Después de una sesión de juegos, Mingyu estaba cansado de buscar a Wonwoo, no volvería a jugar a los escondites con el. Estaban acostados en la sombra de un frondoso árbol. Mingyu admiraba la palidez del demonio, era lo contrario a su tono de piel, sus mechones negros que caían en sus ojos, sus ojos le provocaban miedo pero era inevitable no verlos, sus labios eran bonitos y rojos; era hermoso, todo Wonwoo era hermoso, perfecto.
—Qué tanto miras, Mingyu?—. Preguntó sin abrir sus ojos
—N-nada
—¿Tengo algo en la cara?—. Se incorporo mirando al pequeño
—Sí—. Mingyu no mintió, tenia una pestaña cerca del ojo
—Quítamelo
Mingyu acerco delicadamente su mano para tomar la pestaña caída, aunque fue solo un roce, la piel de Wonwoo era suave. El demonio volvió a acostarse, y nuevamente MIngyu volvió a admirarlo.
Un beso, un beso no le haría daño a Mingyu, sabia que era malo robar pero era de esos robo que a el no le importaría...¿Pero le importaría a Wonwoo?
Se acerco lentamente a Wonwoo, junto sus labios con los de Wonwoo, no fue lo que imagino, era mucho más, sus labios eran suaves y frios pero la sensación era calida. El corazón de Mingyu latía exageradamente rápido. Nunca se hubiera imaginado que besar a Wonwo fuera tan increible.
Wonwoo se levanto inmediatamente al abrir sus ojos, provocando que sus frentes chocaran y tuvieran un golpe.
—¿Qué acabas de hacer?
—Besarte—. Mingyu sonrio, habia experimentado algo increible, sonreia aunque le dolia su frente.
—¿S-sabes lo que pasa cuando besas a un demonio?
—No—. Wonwoo tampoco sabia pero se las tenia que ingeniar
—¡Tu piel se vuelve oscura!
—La mia ya es oscura—. Vio su brazo
Wonwoo se sentia frustrado, nunca se habia sentido asi. Maldito humano, ¿cómo se atreve a hacerle eso? Ya veia lo que sentia los humanos al ser torturados por los demonios...pero que un humano torture a un demonio de esa manera es ridículo
❁❁❁
Belsewon dejaria de ser un demonio por el humano que amaba, Kim Mingyu, por ese humano estaba dispuesto a renunciar a todo para pasar toda su vida con el. Habia caido en el amor hace años, todo gracias a el.
—¡Pero ya no podras leer ni controlar mentes!
—Lo se
—¡Ya no podrás hacer levitar las cosas!
—Lo se
—No podrás volver al mundo de los demonios...
—Lo se
—¡BELSEWON NO VOLVERAS A SER UN DEMONIO, ENTIENDELO!
—Lo entiendo perfectamente—. Sonrió—Eso es lo que deseo, deseo pasar el resto de mi eternidad con la persona que amo
—¿Amar? Eres un demonio, ¿tu que sabes de amar?
—Más que tu te lo aseguro
—Belsewon, no me dejes, eres el único que me queda
—Adiós hermano, dale una oportunidad al amor, te aseguro que no es tan malo como tu crees
Para ser humano había un riesgo, el demonio podía desaparecer de la faz de ambos mundos, un demonio tenía que estar más que dispuesto y tener una razón para ello. Wonwoo cumplía con los requisitos, no dudo en empezar el ritual, aunque significara tener la posibilidad de dejar a Mingyu y no volver a verlo.
❁❁❁
Mingyu había llorado toda lo noche, lloro hasta que se le acabaron las lagrimas en sus ojos. Podía perder a su amado Wonwoo, le suplico que se quedara como demonio, no quería perderlo para siempre, ¿cómo viviría si la mitad de el no estaba?
—Mingyu, mi vida—. Escucho la voz de Wonwoo despertarlo
—¿Wonwoo?—. Las lagrimas volvieron a recorrer sus mejillas
—Mingyu, ¿por qué lloras? No me digas que volviste a tu etapa de chillar por todo
Mingyu abrazo a su amado Wonwoo.
—Creí que no te volvería a ver... Tu anillo—. Le costaba trabajo respirar—Tu anillo esta roto
—Al que nunca volverás a ver es a Belsewon—. Le devolvió el abrazo y empezó a llorar, acción que nunca fue capaz de hacer hasta ahora—Soy humano, Mingyu, soy humano
Ambos se besaron, era tan diferente a otras veces, era tan diferente a su primer beso...Sin embargo se sentía como si fuera el primero. Ahora, Mingyu podía sentir la calidez de Wonwoo, ahora el antes demonio tenia otra sensación cuando besaba a su querido, ya no era frío, podía sentir algo pulsante en su pecho, era increíble, podría hacerlo toda su vida y nunca se cansaría de hacerlo.
Conocer a Mingyu no fue un error, enamorarse tampoco lo fue y mucho menos convertirse en humano para pasar el resto de su vida con el.
❤
Al final hice el especial Meanie. Tal vez de más detalles de su relación un futuro. Algunos detalles de este especial son un poco relevantes a la historia original. Espero que les haya gustado.
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Woozifer ↣JiCheol↢
Random-¡Almas pequeñas en desgracia, muéstrense ante mi en cualquier forma de la que sean!-. Exclamo como si estuviese invocando algo, así como en las películas -Esto es ridículo-. Sonó un trueno que logro espantarlo, era raro ya que no estaban en tempora...