Capítulo 31.

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Capítulo 31

-Ah, pues, te diré... fue todo gracias a una cabina telefónica-rió.

-¿Enserio?

-Oh sí.

Me dijo todo con lujo de detalle, y yo abría los ojos como platos mientras decía todo por lo que habíamos pasado. Lo que más me sorprendió fue todo lo que me dijo sobre Taylor Geffrey.

-Vaya-suspiré-. Me he perdido de mucho.

-Sólo no lo recuerdas, pero los médicos dicen que es temporal.

-¿Y cuánto tiempo es "temporal"?

-Pues no lo sé, linda-se rió.

-Quiero recuperarla lo antes posible. Me siento tan tonta.

-No lo eres, y no te sientas así. Es algo que pasó y ya.

Minutos más tarde, o más bien, horas, ya había terminado el horario de visitas, así que se retiró.

A la mañana siguiente, una enfermera me despertó mientras me acomodaba la intravenosa, lo cual era en extremo doloroso.

-Auch-espeté.

-Lo siento ____.

-No importa.

Se fue después de analizarme por primera vez en el día, y luego mi madre entró con una bolsa de Abercrombie and Fitch en la mano, color verde.

-Hola pequeña-me sonrió.

-Hola mamá. ¿Qué traes ahí? -pregunté mientras me acomodaba en la cama.

-Tu laptop, cargador del celular y un poco de ropa.

-¿Ropa?

-El doctor dijo que era muy probable que hoy te diera de alta.

-Oh, genial-susurré.

Dejó mi laptop en el buró y puso a cargar mi celular.

Acomodó mi ropa en un mueble de madera que estaba a un lado del baño y después se fue, porque era día hábil y tenía trabajo.

Llamé a la enfermera para que me asistiera mientras me bañaba.

-Ya está lista la tina-dijo ella.

-Gracias-me levanté de la cama y con pequeños pasos de dificultad extrema, me adentré en el baño y me sumergí en el agua caliente de la tina.

Reposé por un momento y después comencé a lavarme.

Joder, era terriblemente doloroso. Mis costillas aún no se habían recuperado del todo, y mi pierna estaba fracturada... fue horrible. Jamás había experimentado tanto dolor.

-Toc, toc-dijeron detrás de la puerta.

Yo ya me había colocado la bata y abrí con cuidado.

-¡Josh!

-Hola, princesa-besó mi frente-. Ven, te ayudo a sentarte.

-Gracias, gracias.

Me llevó a la cama y me ayudó a sentarme. Le sonreí incómoda. Quería vestirme ya.

-Eh...

-¿Sí? -dijo él.

-Quisiera... vestirme.

-Pero claro-sacudió la cabeza y se frotó las manos en el pantalón.

Se levantó y se dirigió a la salida.

-Estaré esperando aquí.

-Claro, no tardo.

Me puse esto http://www.polyvore.com/cgi/set?id=67625319&.locale=es y dejé mi cabello suelto para acomodarme el gorro.

-Lista-abrí la puerta y él pasó.

-Te ves linda, ____.

-Gracias.

-Por nada. Oye, escuché en la enfermería que te darán de alta en unas horas.

-Oh, ¿en serio? Mi madre me mencionó algo sobre eso-me metí entre las sábanas y coloqué mis manos en mi vientre.

-Sí, y te llevaré a casa, ¿está bien?

-Está perfecto, gracias.

-De nada.

Hubo un largo silencio incómodo. ¿Largo? Quiero decir, extra largo, fue horrible estar ahí callados los dos jugando con los dedos de nuestras manos.

-Te quiero _____-me sonrió.

-También te quiero, Josh.

-Mucho.

-Yo más.

-¿Segura?

-Te quiero mucho... más que tú, mucho-reí.

-Te adoro, _____.

-También yo-sonreí.

-Te... amo _____.

Payphone T.1 (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora