Travesuras al Pasado

Canto I: Déjame contarte una historia

Ambos adolescentes prestaron total atención a sus versiones adultas.

-Bien- Comenzó a contar Neville adulto- Todo empezó en el año 1999, cuando ambos regresamos a cursar lo que nos faltaba de Hogwarts......

(~)

Neville caminaba tranquilamente por los pasillos de Hogwarts, al parecer la Profesora Sprount tenía fiebre y no había podido darles clase, decidió salir a los grandes jardines, el aire fresco envolvía sus pulmones, estiro un poco los brazos y sonrió, era genial ya no ser tan tímido, al igual que a Hermione les daban un gran respeto el resto de alumnos por su destacada participación en la Guerra. Y hablando de su amiga castaña, desde hace mucho que esta rara, como si siempre alguien la vigilar, se llevó una mano a su barbilla intentando encontrar una explicación, estaba en eso cuando de pronto escucho un golpe seco, regreso su mirada a la entrada más cercana, no había nada, volteo al otro lado hacia el pasillo que estaba más cerca y entonces lo vio, un grupo de chicas en círculo al parecer eran de Ravenclaw parecían de 7° año.

Neville no le tomo importancia al asunto hasta que escucho un lloriqueo, se acercó a la bolita del pasillo intentando tener un mejor ángulo, fue cuando la vio, una chica de menor grado perteneciente a la casa Slytherin con sus mejillas rojas, su cabello enmarañado, sus libros regados en el suelo, temblando y con lágrimas en sus ojos. Neville vio como la que parecía ser la líder de aquella bola levantaba su mano y la hacía un puño dirigido a la chica.

El Gryffindor literalmente corrió y antes de que el puño llegara a la chica en el suelo él la empujo para hacer que perdiera el equilibrio, la Ravenclaw inmediatamente volteo su mirada para ver que idiota se había interpuesto en su "venganza" pero al verlo bien cambio su expresión de enojo a una muy asustada.

El castaño había madurado por la guerra y tenía una expresión muy seria en su rostro, sus brazos cruzados y con ventaja en la altura se veía atemorizante, las chicas retrocedieron unos pasos.

-¿Me pueden explicar porque agredieron a esta chica?- El castaño seguía con su mirada seria, clavada en la líder de aquel grupo.

-No-no-nosotras es-estábamos- Intento decir una muchacha de aquel grupo muy asustada, después de todo el chico también era Prefecto.

-Creo que a la Directora le interesara este asunto- Las Raveclaws negaron asustadas- Entonces si no quieren que las reporte ¡LARGUENSE! – Alzo su tono casi escupiendo la palabra- Su Casa perderá 100 puntos por cada una y si no quieren que las mande con la Directora no volverán a hacer este tipo de actos tan bajos y cobardes ¡Entendido!- La miro retadoramente y enseguida todas asintieron, con un gesto de cabeza les indico que se fueran y todas salieron corriendo de ese lugar.

Cuando doblaron a la izquierda al final del pasillo, el Gryffindor regreso su mirada a la chica en el suelo, estaba intentando quitarse las lágrimas de sus ojos, el castaño se agacho a su altura y le empezó a retirar el pelo de la cara, la observo detenidamente y se dio cuenta que sus mejillas estaban rojas con marcas de manos, seguramente la habrán dado unas cachetadas.

-¿Estas mejor?- Pregunto después de un rato, la chica asintió.

-Solo me duele un poco la cara- Se sobo sus mejillas- Pero ya no tengo mis ojos hinchados- sonrió amable.

-Creo que puedo ayudarte con eso- Neville saco una crema para pequeños dolores que su abuela siempre le preparaba, debido a que era un poco torpe y se caía varias veces, la crema le ayudaba para que no le dolieran las manos y las rodillas al final del día, se unto un poco en la mano y empezó a acariciar las mejillas de la Slytherin, cuando a sus mejillas se les quito el color rojo volvió a preguntar- ¿Cómo te sientes ahora?