Al pasar por el tocador podía respirar el aire a intriga, todo estaba muy silencioso, mire a mi alrededor y pensé que tal vez era yo haciéndome ilusiones otra vez. Me acerqué al lava manos, bajé mi rostro, comencé a mojarme la cara: para quitar de ella el sudor pues estaba nerviosa, escuché pasos y creí ver el celaje de un reflejo, tal vez alguien a quien ustedes ya conocen, luego me tomó por el pelo y estaba empujando mi cabeza hacia el lavamanos, presionó el botón para cerrar el desagüe y yo manoteaba intentando evitar que mi cabeza fuese sumergida sobre el agua cuando por fin arrastró mi cabeza hasta el lavamanos, pude sentir sus manos intentaba zafarme mientras movía más la mano, palpé una venda en su antebrazo y me enteré de que era quien ya suponía, entonces aproveché y apreté fuertemente la venda lastimando su herida hasta el punto de que sangrara, la golpeé en el estómago, entonces cuando su brazo perdió fuerza pude zafarme, pero de todos modos no la solté seguí apretando su herida ella se hincó del dolor pero al verla lo que quería era lastimarla, ella lloraba.
- ¡Eres una desgraciada!
- sólo quería asustarte, para que así te alejes de Yeremi.
- Cuando aprenderás, sólo déjame en paz de una buena vez, mira te juro que si sigues molestándome esto va a terminar mal (con voz furiosa)
Ella me miraba y hubiese querido enterrar mis uñas en su herida pero recordé lo que me dijo Yeremi: que le demostrará que yo era diferente entonces la solté.
- ¿Isabel, por qué haces todo esto? A mí no me gusta Yeremi, sólo quiero cumplir con el trabajo que la Señora Allister asignó.
Ella me miraba con odio y desprecio, ni si quiera me contestó, me marché mientras ella aún estaba asustada y tirada en el piso del baño.
Creó que la apreté tan fuerte que mis dedos se quedaron marcados en su brazo además de que doble su antebrazo pues mis deseos por rompérselo eran enormes, pero yo no soy así, últimamente me veo en el espejo y me pregunto: ¿Quién soy? ¿Y, que rayos estoy haciendo? Hasta yo me desconozco.
Al llegar al aula Isabel estaba recostada en los hombros de Yeremi, él me miró con furia. Temía acercarme por ello esperé hasta la hora de salida y, cuando al fin pude hablarle él no me dejo decirle nada, ya que estaba molesto:
- Kate, Dices que odias a Isabel pero eres peor que ella.
Yo me detuve y lo vi mientras se marchaba con Isabel en su motocicleta. Llamé a papá y él me dijo que se demoraría un poco más entonces Robert salió y, al verme sola me hiso compañía, estaba un tanto triste y no sé por qué pero Robert me hizo olvidar los problemas, ambos hablamos bastante, hasta me dio su número, Yo le pedí que se marchara antes de que papá llegara, pues el Señor Michael Ellen no quiere que me acerque a los chicos, él dice que son un completo peligro.
Papá luego de pasar a recogerme, nos fuimos a casa como de costumbre, no sé por qué pero hoy el tenia deseos de conversar, a entrar a mi habitación no tenía sueño daba vueltas en la cama entonces observé mi teléfono y me di cuenta que recibí un mensaje de Robert preguntándome ¿Qué estaba haciendo? Luego de hablar y hablar él me dijo "amiga" me sorprendí al escuchar esa palabra hace mucho que nadie me catalogaba de esa manera, Robert es verdaderamente increíble yo le pregunté ¿Cuál era el significado de esa palabra para él?
Él me dijo que un amigo es una persona capaz de hacer lo que sea por otra a quien la considera dentro de ese renglón, un amigo es empático pues sufre en tus caídas y se regocija en tus aciertos...
Entonces yo hice la tercera pregunta ¿Que serías capaz de hacer por un amigo? Antes de que respondiera lo puse a prueba y le dije que viniera en su auto hasta mi casa, sin titubear él me pidió que le enviara la dirección, yo verifiqué que papá estuviera dormido y preparé un muñeco con sabanas lo puse sobre mi cama y, lo arrope por completo para simular que era yo, luego salí por las escaleras de emergencia, Robert ya estaba esperándome, al verme me dijo:
- Sí, que estás demente “Katlyn Ellen”, pensé que le habías pedido permiso a tu padre. (De manera sorprendida), ¿adónde vamos? (con intriga).
- Bueno, llévame a la casa de Yeremi Torres, pero hagámoslo rápido pues no quiero que papá me descubra.
Él me miró con cara un tanto atónita.
- ¡Arranca!
Nos fuimos muy rápido, veníamos riendo tanto en el camino, que perdimos la constancia del tiempo, al llegar a la casa de Yeremi me llené de valor, después de quedarme sin aliento al ver tan majestuosa mansión que él poseía, el guarda llaves nos dejó pasar pues conocía a Robert, ya que él es parte de equipo de basket de la escuela en el cual Yeremi es el líder, Robert se quedó en la galería, yo pasé al recibidor y encontré un señor fumando en un sillón, me acerque y hablé con él luego podía escuchar cuando Yeremi bajaba las escaleras y, justamente cuando le preguntó al amo de llaves quien era, entró al salón y al verme quedó sorprendido.
- ¡Kate, estás loca! ¿Qué haces acá fuera a esta hora? eso no puede....
- ¿No puede qué?
- O sea me refiero a el clima, el cual puede..
- ¿Puede qué?
- Creí que te encerrabas temprano en tu habitación por...
Sonreí al verlo.
- Soy lo suficientemente grande para defenderme sola.
- El clima no es favorable para mí.
- ¿por qué? Yeremi.
Pregunté esperando a ver si se atrevía a mencionar mi enfermedad, él al ver mi rostro sólo se limitó a decir que últimamente hay un fuerte brote de gripe que ataca a la ciudad a causa de las recientes neblinas.
Yo sonreí, luego él me acompaño a reír..
- ¿Qué haces aquí?
- Intento demostrarle a una persona que, en verdad quisiera empezar de nuevo.
Entonces le pedí el número de Isabel.
- ¿Kate para que lo necesitas?
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Esperando Un Cambio.
Romance¿Alguna vez has sentido la inmensa necesidad de vivir, de tener una vida normal o una pareja, de sentir el calor humano cerca de ti, de saber cómo se siente que alguien te amé y más aún que alguien cuide de ti? pues, te invito a conocer a kate, un...