- ¿Qué dices? - pregunté con rareza. ¿Muertos? Jamás había pensado algo así. - No es posible.
- Lo que escuchaste, Lou. Muertos - tomó mis manos y me miró directamente a los ojos. - Nunca lo digo en voz alta ya que creo que los chicos dirán algo pero sí, lo he sospechado desde hace un tiempo.
Sacudí mi cabeza. - ¿Y qué te hizo sospechar, Hazz?
- Pues verás, en una ocasión fue Luke. Lo escuché hablando de un bar que estaba cerca de aquí - soltó mis manos para después buscar algo en su mochila.
- ¿Y eso que tiene de raro? No lo entiendo.
Sacó unos papeles arrugados y me los mostró. En ellos había diferentes imágenes de un bar en blanco y negro.
- Esto es lo raro. Investigué acerca de ese bar ya que no conocía el nombre. Entonces me apareció esto - apuntó hacia la foto donde se mostraba el supuesto lugar.
- ¿Y ese bar qué, Harry? Deja de hacer suspenso - reí en voz baja.
- ¡El bar existió hace treinta años! Ahora ni rastro hay de él.
Miré con impresión la hoja que Hazz tenía en sus manos. - ¿Qué exactamente fue lo que dijo Luke del bar?
- Hum, habló acerca de cómo extrañaba ese lugar y que amaba ir ahí.
- Hazz...eso es...- no supe formular una palabra correcta.
- ¡Extraño! - guardó los papeles de nuevo en su mochila. Y prosiguió a mirarme. - ¿No has tenido ninguna sospecha así? Me refiero a algo raro que hayas visto en ellos.
Pensé en lo que dijo. En realidad sí, jamás lo había pensado.
- Ahora que lo veo sí. Niall hay veces que lo he escuchado mencionar cosas que no entiendo. Sobre cómo solía hacer algo y así. Hazz, ¿entiendes lo que significa eso?
Él me miró con la ceja alzada y se encogió los hombros.
- ¡Son espíritus! Debemos investigar sobre ellos - tomé sus manos inconscientemente. - Si es que en realidad son lo que creo que son, tienen que tener un tipo de datos, no lo sé, algún rastro de sus vidas pasadas.
- Tienes razón, Sherlock.
Reí. - ¿Así que tú eres mi Watson?
No contestó entonces lo miré. Tenía la cabeza gacha viendo hacia nuestras manos entrelazadas. Me alejé un poco avergonzado, soltando una pequeña risa.
- No, no. No te alejes - me sonrió. - A mí no me molesta, Ojitos.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
