Último Capítulo: "Adiós, Desconfianza."

3.8K 479 318
                                    


L

os autobuses rumbo a diferentes ciudades estadounidenses estaban frente a   cada casa respectivamente. Cada uno con su destino predeterminado.

Stan y Wendy no querían separarse por nada del mundo. Nunca se acostumbraron a mostrarse afecto en público, pero en ese momento era poco relevante. Se daban repetidos besos frente a sus padres, pero estos no decían nada para no cortarles su momento. —¡South Park es mucho mejor que New York!— Repetía Stan

—¡Tenemos FaceTime!— Dijo la chica de rosa, acariciando la mejilla de Stan. Éste hace mucho tiempo que no vomitaba frente a ella, pero en ese momento tenía muchas ganas de hacerlo. Wendy se dio cuenta de esto y esquivo el desecho cuando Stan no se contuvo.

—Nena, se hace tarde.— Dijo su padre señalando el reloj.

—¡Ya voy!— Corrió hasta las chicas y las abrazó fuertemente, sobre todo a Bebé. Su mejor amiga.

Por otro lado, Kenny no se iba de la ciudad más sí de esa escuela al darle un precio elevado. Él estudiaría en casa a partir de ese momento. Pero Butters sí que se iba, y eso a Kenny le dolía. Se había vuelto un gran amigo y un buen miembro del Equipo Stan.

—¡Butters, ven rápidamente o te castigaré!— Gritó Steven desde el autobús. "Salchichas." Pensó Butters. Dio media vuelta del resto y caminó hasta el autobús despidiéndose con su mano.

—¿No piensas despedirte?— Dijo Kenny a su lado. Butters sonrió y aprovechó una rápida distracción de su padre para darle un fuerte abrazo y un beso amistoso en su mejilla.

—¡Te hablaré por Skype!— Dijo entrando con su familia. Kenny asintió y se despidió con un gesto de mano.

—¡Hey, Cartman!— Y Kyle. Kyle se había despedido previamente de todos, menos Eric. Quería decirle unas palabras antes.

—¡Hola!— Dijo el castaño. Kyle comenzó a caminar en total silencio y el regordete le siguió el paso. Tenía tiempo de sobra para jugar un rato más con sus amigos; dos horas, para ser exactos. —¿A dónde vamos?—

—A ningún lado, en realidad.— Dijo el pelirrojo con una sonrisa. Estando considerablemente lejos de la multitud en despedida, paró su caminar y se dispuso a hablar. —Amigo, me alegra que de aquí a un tiempo dejases de odiarme. Siempre supe que todos pueden cambiar, incluso tú.—

—¿Odiarte? Hermano, yo nunca te he odiado. Oye, me disculpo por todo lo que te he hecho; y respecto a esa venganza por la novia de Internet, sólo quería sacarte un susto, no hacerte daño físico. ¡Uff, se siente bien decirlo en voz alta!— Admitió el castaño

—No te preocupes. Creí que me odiabas por ser judío.—

—Sí realmente te odiara, te hubiera quitado el habla hace mucho. Me has salvado el culo muchas veces, y pues...gracias.—

—¡No es fácil salvar un culo tan enorme!— Bromeó Kyle

—Imbécil.— Dijo Eric entre risas. —¿Es todo?—

—No realmente. ¿A dónde dijiste ir?— Dijo Kyle.

—No tengo ni puta idea, sé que mi mamá trabajará mucho por allá y es un fastidio.—

—Las Vegas, aseguro.— Dijo Kyle como una puntada sutil hacia la profesión de su madre.

—¿Por qué sería...? ¡Hijo de puta!— Dijo cruzado de brazos.

—El hijo de puta trajo algo para pasar el rato.— En sus manos traía una pequeña bolsa, dentro de ella habían cinco piezas de pollo frito. Abrió dicho bolsa, dejándose ver lo que tenía dentro.

"Por Terceros." [KyMan] [South Park]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora