08: El Secreto

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Era una mañana común y corriente en Kong Studios... un momento ahí jamás hay días comunes y corrientes…
Por la mañana Noodle ayudaba a su gemela a acomodar las cosas de su nueva habitación, claro con ayuda del siempre servicial 2-D.

El día pasado habían comprando una buena cantidad de muebles y cosas para redecorar la vieja y triste recamara de Cyborg. Una cama, un tocador, un ropero, y como no un montón de ropa nueva para llenarlo, un pequeño sofá y un escritorio.
Ahora la vieja habitación ya no parecía una bodega si no que al menos ya parecía habitable, quizás hiciera falta una repintada o cubrir las gritas que estaban por toda la pared pero al menos el lugar ya se veía como una habitación.
El trio observo con gusto su trabajo.

—¿Qué te parece Cy? ¿Te gusta? —dijo la mayor.

—Claro que me gusta, es más me encanta —respondió Cy— Te quiero hermana —acto seguido le dio un abrazo a Noodle.

La nipona quedo extrañada. Por más que Cyborg pareciera casi humana, el echo de que fuera una robot siempre estaba presente, eso a veces hacia algunos momentos un tanto incómodos. Noodle correspondió el abrazo, pero el momento fue interrumpido por los gritos de Murdoc provenientes del estudio de grabación.

La banda se reunió en el Estudio. Murdoc parado al frente mientras que los otros cuatro sentados en el sofá.

—Muy bien. Ya que están todos aquí. Tengo dos noticias una buena y una mala —Murdoc inicio la conversación.

—Empieza con la mala —todos respondieron al unisono.

—La mala es... que nos quedamos sin dinero.

—¡Que! —2-D cayó al piso.

—Como lo oyeron. Nuestra fiestesita gasto más dinero de lo esperado, y eso sumado a los gastos de todas las drogas que compró Face-Ache. Y como no, de las compras compulsivas de estas dos señoritas —señaló al par de hermanas.

—Y que vamos a hacer viejo —dijo Russel— No nos vamos a quedar en la calle, y conociéndote seguro traes algo entre manos.

—A si es mi querido Russ. Murdoc Niccals nunca se queda en la calle, y mucho menos sin dinero. Así que esa es la buena noticia. Tengo un plan.

—Muy bien... habla ahora —agregó la nipona.

—No podemos volver a la gira eso esta claro. Ya saben Damon, aun ha de estar furioso por lo de hace unas semanas. Así que nos conseguí un concierto, por mi cuenta.

—Esto se pone interesante sigue... —dijo Noodle.

—Ok muñeca. Contacte a un empresario, o al menos eso me dijo que era. Va a tener una reunión de negocios en un bar y bueno quieren un poco de ambientación musical, la reunión sera privada, y el pagara todos los gastos, y como no la paga para nosotros es muy buena. Pero tiene que ir Cyborg, si no no hay trato.

—Por que tengo que ir yo. Eso me parece un tanto sospechoso —contestó.

—Yo que voy a saber... pero esa es nuestra oportunidad de conseguir algo de plata para no quedarnos en la calle.

—Esta bien iré —Cy cruzó los brazos algo molesta.

—Y se puede saber cual es el nombre de este dichoso empresario —añadió Russel.

—Deja recuerdo. Era Tony, Tony El Gordo. Es Italiano, apoco no es genial. Y con ese nombre bueno, suena prestigioso, y eso significa dinero si me captas.

—No estoy seguro pero ese tal "Tony El Gordo" me suena a mafioso de programa de TV.

—Basta Russel, no por que sea Italiano, sea empresario, y se llame Tony El Gordo quiere decir que sea un estereotipo de mafioso italiano. Venga es un buen tipo. Y paga bien, eso es lo importante.

Alma Metálica (Cyborg Noodle Fanfic) [Estado: Desconocido]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora