Capítulo 9

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Salgo a correr hasta que siento mis pies frágiles. Regreso al hotel más tranquilo y decido bañarme y llamar a Katherine.

-Empresas...- la interrumpo.

-Katherine, necesito un correo que me informe todo lo que ha sucedido en mi auscencia. Preparame un vuelo de regreso para esta misma noche, si se puede antes mejor...

-Si señor, algo más en lo que puedo ayudarlo.

-No. Si necesito algo te lo haré saber, nos vemos...

Sin esperar una respuesta, cuelgo y marco rápidamente otro número.

-Smith.- Tome el valor para articular palabra y finalmente habló...

-Hola papá, sólo llamo para decirte que dentro de unas cuantas horas estaré de regreso, ah y no regreso sólo así que hazme el grandísimo favor de mantener la mente abierta...

-¿Donde carajo te has metido?.- Sabía que no funcionaria.

-Buen día Brendan...- Termine la llamada.

Decidí estar todo el día en el hotel, concluyendo correos y llamadas inesperadas hasta que el maldito ruido del timbre rompe el silencio. Damián se apresura a abrir la puerta, y en la puerta aparecen Candace y Dimitri.

-Hola, ¿Que hacen aquí?

-¿Nos estas corriendo cuñadito?.- Dimitri me dice soltando a mi prometida del hombro mientras los recibo como se lo merecen...

-Porsupuesto que no...Adelante. ¿Quieren algo de beber?

-En esta ocasión no amor...- hace una pausa que sencillamente me aterra.

-¿Entonces?.- Me dirigo a la sala a tomar asiento con ellos...

-Nos enteramos de que te marchas de nuevo a España, y así que Candace te preparo una comida con sus propias manos como despedida...- Ufff. Dimitri me ha alejado de una horrible ensoñacion. Cierro los ojos unos momentos y al abrirlos tomo la mano de Candace entre las mías...

-¿Enserio?.- Hago una pausa... ¿Quien se los habrá dicho?.- Cariño es increíble ese detalle de tu parte, pero era yo el que quería sorprenderlos.

-¿Cómo?.- Maldito sean tu y tus curiosidades Dimitri.

-Claro que regresare a España, pero no quiero hacerlo sólo...- Suspiré.- Tenía planeado buscarlos en 30 minutos. Para proponerles ir conmigo porque frente a mi empresa y todo el mundo, quiero dar a conocer que serás mi mujer.- Está vez no sentí lo mismo de siempre. Está vez sentí que mi corazón habló por mi.

-¿Que tenemos para los próximos días Dimitri?.- Dijo Candace con cierto nerviosismo.

-Nada importante sólo debo avisar a la empresa que saldremos de vacaciones, pero eso será mañana todos salieron temprano.- Dirigió su mirada a mi.- ¿Cuando sales a España?

-En la noche... como a las 23. Mi vuelo sale a las 2 am.- Candace mira a Dimitri quien silenciosamente llama a alguien por teléfono.- Magali, saldré de vacaciones unas cuantas semanas, necesito que te hagas cargo de la empresa, si necesitas algo que necesite mi absoluta atención no dudes en llamarme me pondré al corriente contigo desde España...Entiendo...Si también la editorial...Si, de acuerdo, gracias.- Eso fue rápido.- vamos a comer a casa y después preparamos las maletas, iremos contigo Austin.

-Eso fue rápido Dimitri, está bien déjame arreglar unos asuntos y voy a su suite.- Me levanto siendo amable, y beso los nudillos de Candace. Le susurro al oído.- Te veo alrato hermosa.

-Y yo a ti hermoso...- Inconscientemente sonrió.

(***)

Arreglé los boletos, las maletas y ahora me encuentro frente la puerta de mis grandes amigos. Toco el timbre y me recibe Candace con su deslumbrante sonrisa perfecta y su hermoso cabello totalmente trenzado. Como me gusta. Se balanza a mis brazos y me da un beso en los labios, esta vez siento una sensación extraña recorrer mi cuerpo entero. Nos separamos y respiramos entrecortadamente.

-Hola hermoso...- Acaricia mi labio inferior y sin pensarlo vuelvo a besarla... Un beso que poco a poco cambia la atmósfera tranquila y cariñosa a excitante y pasional. Detengo el beso porque se que seguir sería un error.- ¿Que pasa?.- ¡Joder! Que eres la mujer más deseable del mundo en este momento pero no puedo, no aquí...

-Nada, sólo que no podemos llegar tarde...- Me acerco a su oído.- Ya habrá tiempo para esto hermosa...- Y levemente muerdo el lóbulo de su oreja.

-De acuerdo...Las maletas ya están listas, llamaré a Dimitri.- Voltea en dirección a sus escaleras y yo llamo a Damián para que baje sus maletas. Cinco minutos después aparecen listos para el viaje.

(***)

Tantas y tantas horas de vuelo me han agotado, Candace y Dimitri se quedaran en mi pent house.
Las maletas quedan en el salón principal y yo decido ir a tomar una ducha. Cuando salgo decido ir a la cocina por algo de beber. Me dirigo a la nevera y siento que algo me toma por detrás.

-¡Mierda!.- Volteo de prisa y me encuentro con sus ojos...- Perdón yo pensé que alguien...-No me deja responder, en ese instante toma mi cabeza en sus manos y me besa desesperadamente.- Candace...

-¿Que?.- Trata de recuperar el aire.- Te quiero...

-Tenemos que ser pacientes yo no quiero que Dimitri me asesine antes de ser tuyo...- Oh tal vez si...

-Te deseo, ¿Acaso no lo entiendes?.- ¡Mierda! ¿Que hago?

-Al carajo.

Es lo último que digo antes de besar de nuevo a Candace en los labios iniciando con un beso tierno y lindo...  mientras en mis brazos la llevo a mi habitación y pongo seguro en la puerta. Cierro las persianas y enciendo la lámpara a un lado de mi cama. Candace me mira con ojos llenos de terror y nervios. ¿Ahora que hize mal?

-Austin...- Detengo mis acciones tal vez se arrepintió.- Yo...tengo miedo.- ¡No me vengas con cosas! Primero me provoca y después...- Soy virgen...

¡Carajo!

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