Capítulo 5 : Amenazas y alcohol

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Hoy era el cumpleaños de Jim, todos sus amigos estuvieron organizando cada detalle para que su noche fuera inolvidable. Aunque ella hubiera preferido una reunión tranquila en su casa con pizza, los anfitriones se rehusaron.

Días antes las decoraciones no fueron tan fáciles a la hora de decidir.

—¿Y qué tal si hacemos todo rosa o fucsia? — Sugirió Ámbar.

—No te ofendas Ámbar, pero la fiesta es para Jim, no vamos a decidir todo lo que vos quieras— Añadió Jazmín riendo.

—Oye Jazmín tampoco la trates así, era una sugerencia— La defendió Simón, harto de que dejarán de lado a su amiga.

—¿En serio Simón? ¿La vas a defender diciendo qué la trato mal después de qué a cada uno de nosotros nos tratará así?

Simón quiso hablar pero Ámbar lo interrumpió —Deja Simón, que diga lo que quiera o se invente lo que se le ocurra de todos modos es lo único que sabe hacer en su vida o en el Fab and Chic— La rubia se retiró enojada porque su ex amiga la tratará de esa forma.

—Gracias Jazmín, actúas muy bien cuando hay que estar todos unidos por Jim— Simón le aplaudió irónicamente.

—Ay de nada "Saimon" me pone re contenta que estés orgulloso de mí— suspiró como si de una princesa enamorada se tratase.

—Jazmín si vas a decir que Ámbar trata mal a la gente no hagas lo mismo— Habló ahora Matteo defendiendo a su ex novia lo que confundió tanto a Luna como a su "enemigo".

—Bueno chicos dejen de pelear vamos a organizar para lo que vinimos, la fiesta de Jim— Habló Yam intentando calmar a todos.

Pero el día ya había llegado y todo estaba listo, los colores utilizados fueron dorado, violeta y fucsia en honor a los patines de Jim. La comida era más que suficiente y como entretenimiento comenzaron a cantar con un vídeo de karaoke.

—Les quedo todo muy lindo— Ámbar observó cada decoración elegida —. Perdón por irme antes, es que estaba enojada.

—Perdón por no seguirte—Simón sonrió y tomó de la cintura a la rubia para bailar lento.

—¿Crees qué podramos salir de nuevo?— Respondió mientras posicionaba sus brazos al rededor de los hombros del chico.

—Por supuesto que sí.

De un momento a otro se encontraban a milímetros, cada uno de los chicos los miraban extrañados ¿Quién se imaginaría a estos dos tan juntos?
Deseaban unir sus labios más que nada, la desesperación los abrumaba.

—¡Ámbar!— gritó Jazmín para llamar la atención de ambos y así se separasen —.Tengo que hablar con vos.

Los otros dos se separaron incómodos y la rubia prometió que ya volvía.

—Veo que no te queda claro ¿no?

—¿De qué hablas?— Río Ámbar ante su intento de misteriosa.

Jazmín agarró del brazo fuertemente a su ex amiga, apretándolo y causándole dolor.

—No te quiero ver NUNCA MÁS cerca de Simón ¿escuchaste?

—No sos NADIE para exigirme qué hacer, ¡soltame Jazmín!

—¿Te duele? Uy que pena— Apretó aún más.

Ámbar se soltó de su agarre y la empujó.

—No me das miedo vos ¿sabes? Sos solo una resentida, porque yo tengo a quien nunca vas a lograr conquistar y sí no te importa, me está esperando.

—¡Seguí hablando Ámbar y vas a ver como se decepciona de vos, como todos, cada uno sabe la mierda de persona que sos!

Ámbar salió de ahí con el brazo aún doliendo y triste por lo que la pelirroja le había dicho.
¿Simón se decepcionaría de ella? ¿Realmente era la peor persona del mundo? ¿Tendría algún futuro con el guitarrista?

—Ámbar ¿Estás bien?— Matteo la miró preocupado.

—Si Matteo, no te preocupes—Respondió nerviosa y se alejó de ahí lo más pronto posible.

Se dirigió a la pista, pensando que estaba vacía, pero en realidad todos los invitados estaban patinando.
Solo los asientos estaban vacios y ahí estaba Simón.

—¿Me compartís?— miro el vaso de lo que se suponía que tenía "agua".

—No es agua— El chico rió perversamente.

Ámbar acercó el vaso a su nariz para olerlo y luego Simón afirmó sus dudas mostrándole una petaca que tenía escondida.

—Bueno bueno que chico malo Álvarez— Río para luego tomar del vaso.

—¿Quien dijo que te compartía? — Simón hizo un intento de enojo.

Ámbar intentó ocultar su cara de asco al tomar por primera vez alcohol.

—¿Nunca tomaste?

—Hmm...No mi madrina nunca me dejó, lo considera desagradable— La chica suspiró cansada.

—No es nada de otro mundo — Simón le sirvió más.

—Vamos a bailar.

—Sí y creo que nos quedó algo pendiente— susurró Simón acariciando sus dedos al unir sus manos.

La pareja de "amigos" se lucieron en la pista y no por los increíbles pasos, si no por las payasadas que hacían. El vodka sí que les había afectado.
En un momento Simón ya no estaba cerca de Ámbar y Jazmín no dejó pasar la oportunidad.

—¡Te dije que te alejes de él!

—Dejaaaa de mandarme cabeza de zanahoria— Le gritó su enemiga con un tono alcohólico y le sacó la lengua.

Jazmín la empujó y la rubia no se quedó de brazos cruzados.

—¡DEJÁME TE DIJE!— Ámbar agarro el pelirrojo pelo de su enemiga y jaló de él.

—Opa opa opa ¿Qué pasa acá señoritas?— habló ahora Juliana.

—Ámbar me está molestando.

—¡YO NO TE HICE NADA! Vos viniste a molestar.

—¡Deja de mentir Ámbar! Se ve que es lo único que sabes hacer.

—Chicas ¿Les parece un buen momento para estar discutiendo?— Hablo Juliana con calma.

—Es que no te das cuenta Juliana, está borracha cómo creerle.

—Ámbar sabes muy bien que acá en el Jam & Roller no está permitido tomar alcohol— Juliana habló enojada contra la alcoholizada.

—Fue mi culpa Juliana, yo le di de beber— Aclaró Simón al ver que la culpaban.

—Trabajas acá Simón ¿Cómo se te ocurre hacer semejante cosa después que te haya dado trabajo?

—Antes de que llegues acá ya lo tenía— habló enojado

—Así como ya lo tenías ahora mismo te podría echar ¿Qué te está pasando Simón?

El mexicano se retiró enojado, ya se acostumbraba a salir de ese modo y ya estaba harto de todo. O más bien de todos.

Desconocidos [Simbar]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora