Es Difícil Olvidar

CAPÍTULO 21

El autobús me deja a una cuadra del edificio. Camino con la cabeza gacha mirándome los pies, cabreada por la discusión que tuve con Ángeles a las afueras de la universidad. Admito que me exalte un poco. Bueno ¿Quién no lo haría? Tengo todo el derecho a estar enojada, sin embargo Ángeles cree que debería darle las gracias por ayudarme a salir de "Mis días Oscuros" ¿Cómo pueden existir personas tan... ¡Demonios! Me molesta su comportamiento El calor del día hace que mi carácter se vuelva más intenso. Detesto los días con altas temperaturas.
Oigo que gritan mi nombre. Me vuelvo y Cory se me acerca con una sonrisa de oreja a oreja. Está muy atractivo, lleva una camisa blanca con pantalones azul marino. ¿Por qué tanta formalidad?
-¡Hey! -Le digo en cuanto se acerca. Arquea una ceja y su sonrisa desaparece.
-¿Mal dia?
¿Este hombre no siente el bochorno con ese traje?
¡Me estoy sofocando!
-No, para nada. -Dibujo una enorme sonrisa para disimular el enojo que tengo con el mundo entero. -¿Qué haces aquí? Creí que llamarías.
-Bueno... ¡¿Qué crees?! Estaba yendo a tu departamento para pedirte el número de teléfono.
Al ver la forma en que lo dice, no logro evitar soltar una carcajada.
¡Luego de haber tenido un día desesperante!
-Se supone que debo de estar enojada. ¡No me hagas reír!
Pone sus brazos sobre mis hombros y seguimos caminando. Me pongo a pensar en la advertencia que me hizo Jack.
Cory es incapaz de hacerme daño, confío en él así como confío en Camille o Patrick. La primera vez que lo vi no me pareció una persona peligrosa. Yo sé con quién estaba en el interrogatorio y sé con quién estoy ahora mismo. Me vale mierda lo que digan los demás, él está solo en este lugar y no le daré la espalda.
-Mirella, hoy tengo trabajo y mañana es mi único día libre. ¿Te apetece salir mañana?
¿Salir?
-Uh... Seria genial, pero mañana es cumpleaños de Elián y no puedo faltar.
-¿Puedo acompañarte?
Me paro y le miro con la boca abierta, de repente se echa a reír y menea la cabeza.
-No lo decía enserio.
-Ya veo. Así que... Desde pasado mañana serás un hombre ocupado ¿Eh?
Se detiene en seco y le observo confundida por el repentino freno que ha dado. Mira al frente y dirige su dedo a una dirección que me pone los pelos de punta.
-¿La que viene allí es Camille?
Señala a una furiosa Camille, que se acerca dando zancadas como si nos fuera a atacar. Detrás de ella va Ethan tratando de alcanzarla. Me coloco delante de Cory y me preparo para lo que se viene.
-¡¿Qué estás haciendo?! -me increpa en voz alta. Esta mas que furiosa, mira a Cory de forma violenta. Si no fuera por Ethan que la ha tomado del brazo de seguro ya se hubiera lanzado a él.
-Camille, vámonos. -Le dice Ethan.
-No me voy hasta que ella me explique que hace con este hijo de...
-Camille! -Alzo la voz. Vuelve la mirada hacia mí y espera.
-No voy a discutir contigo de esto.
Ladea la cabeza como si no entendiera lo que he dicho.
-He preguntado qué ¿Qué estás haciendo? Si estas tratando de poner celoso a Jack, lo estas logrando pero no imagine que aceptaras a este individuo en tu vida.
Doy un respingo. ¡Celoso!
Es ridículo lo que acaba de decir. No trato de poner celoso a Jack y me da igual si lo estoy ¿Logrando? ¿Qué quiere decir con lograr? Eso es imposible, para lograr poner celoso a Jack entonces él debe saber que... ¡Mierda!
-Un premio para ti, cariño. - le responde con sarcasmo a mis pensamientos.
Es suficiente. Debo hablar con ella. Giro sobre mis talones y trato de no ver a Cory. ¿Por qué es tan vergonzoso? Bueno... prácticamente Camille está dando a entender que estoy utilizando a Cory.
-Cory...
-Esa bien. -dice comprendiendo lo que trato de decir.
Se dirige hacia Ethan y le estrecha la mano.
-Agente.
- Llámame Ethan. ¿Deseas que te lleve? Supongo que ellas tienen que hablar y no quiero estorbar.
Cory parece un tanto sorprendido pero acepta. Ugh... Ethan quiere provocar a Camille y lo esta logrando. ¿Por qué trata de enfadarla más? ¿No se supone que debería hacer lo contrario? Observo que la rabia de Camille va en aumento pero aun así no me quita la mirada, hago lo mismo hasta que Ethan interrumpe mi batalla.
-Perdoname, Mirella. Todo lo que tenga que ver con el caso es clasificado pero me descuide y ahora tienes a Camille armando un espectáculo aquí.
Oh... ¡Demonios! Él también esta furioso.
-Descuida. Yo me encargo de ella.