CAPÍTULO 18

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Salgo de la bañera y me cubro con una toalla. Camino hacia el espejo y me quedo mirando los círculos negros que hay al rededor de mis ojos. ¿Cuánto tiempo tengo que soportar estos sentimientos? Ayer lloré hasta quedarme dormida, pensando en lo que Patrick dijo.
Todo se acabó. Jack no me quiere, ó puede que me eché de menos como yo a él... No, no lo creo. Jack se rindió. Cierro los ojos y echo la cabeza hacia atrás, mientras el abatimiento vuelve a mi.
¡Maldita sea! Éso es lo que quise. Yo le puse final a la relación, él sólo esta haciendo lo que le dije. No es momento de arrepentirse, no tuve elección. Debía hacerlo.
Seco las lágrimas y formo una sonrisa en mi rostro. Eso es Mirella, mantén esa sonrisa el tiempo que puedas. Ángeles está por llegar. Busco mis converse y corro hasta el sofá a darme los últimos toques. Me pongo la chaqueta y ya estoy lista para una excursión al aire libre. ¿Desde hace cuanto no salgo con mis amigos? No tengo muchos amigos.
Tocan la puerta y un grito con mi nombre hace que vuelva a correr a abrir la puerta. Las personas que viven en este piso lo escucharán, y no quiero que me corran de este lugar. Una vez que abro la puerta, me quedo observando a Ángeles, lleva un mini vestido color rosado, un rosado muy chillon. ¿Por qué demonios esta vestida así?
-¿Irás así? -me pregunta
Sospecho que esta salida no será de mi agrado.
-¿A donde me llevarás?
-¿No es obvio?
Arquea una ceja y me mira, claramente me está tomando el pelo.
-Ánge...
Sin darme cuenta, coge mi mano y me arrastra hasta llegar al ascensor, observó mi puerta que se cierra con un sonido muy fuerte.
-¡No puedo ir vestida así!
-Se nos hace tarde. -dice cuando las puertas del ascensor se cierran.
¡No tengo de otra! No beberé ni una sola gota de alcohol, aún así tengo que divertirme ¿No?
Mierda.
Olvidar a Jack.
Olvidar a Jack.
Olvidar a Jack. Repito para mi misma una y otra vez.

El bar está lleno de gente, Ángeles y Benjamin se aproximan a pedir las bebidas y yo espero sentada en un rincón. Debería irme, sin duda esto no estaba en mis planes
Vaya que no lo estaba. Ángeles trae las bebidas y Benjamin carga con su cartera; ahora sé quién lleva los pantalones en esa relación.
-Olvidé preguntarte por el idiota de ayer. ¿Es tu pareja? -dice colocando un chupito delante de mi.
¿Acaba de decir pareja?
-Es sólo un amigo -le digo riendo por la pregunta que acaba de hacer.
Me quedo mirando a Benjamin que esta mirando mi chupito con mala cara. ¿A qué viene eso?
-Oh nena, todos decimos éso en su momento.
-No, él es un caso especial. Nunca estaría con Patrick.
-¿Por qué caso especial? -pregunta Benjamin.
Mierda. Parece un interrogatorio.
-Porque es el hermano de mi ex.
Agarro el chupito y lo bebo de un sorbo. "Ex" lo dije como si me dieran una puñalada en el estómago. Ángeles y Benjamín se dan una mirada cómplice y me parece entender lo que traman.
-Creí que no querías alcohol.
-Cambié de parecer.
Saco el móvil para agregar una alarma que me despierte mañana, pero observo el mensaje que Ethan ha enviado, dice que necesita comunicarse conmigo. ¿Qué ha pasado? ¿Atraparon a Diane? Sería una buena notícia pero algo me dice que esa no es la razón de su mensaje. Es una buena excusa para salir de aquí, estaba a un paso de emborracharme.
-Volví a cambiar de parecer.
-¡¿Qué?!
-¡No puedes irte!
-Si puedo, y lo estoy haciendo. -digo
Camino hacia la salida pensando en el mensaje de Ethan, quizá tenga notícias de Diane ó quizá le haya pasado algo a alguien. Oh Dios quiero saber lo que está pasando. Apresuro mi paso pero Ángeles me detiene en la salida. ¿Por qué está preocupada? Sólo bebí un chupito, y aún son las 10:00pm puedo conseguir el autobús si me apresuro.
-Prometeme algo. -dice
-¿Si?
¿Ya está borracha?
-Prometeme que sólo irás a tu casa y dormirás hasta mañana.
¿En qué momento bebió? No recuerdo haberla visto tomar más de un chupito, tal vez estuvo celebrando antes de recogerme.
-Lo prometo -digo confundida. Ella retrocede y yo camino hacia la parada del autobús. Miró de reojo los callejones oscuros que están repletos de parejas ó personas vendiendo droga. No me atrevo a mirar del todo, está muy oscuro. Lo rescatable es que hay policías rondando por el lugar. Policías que no hacen absolutamente nada por mejorar esté lugar. Aún tengo la sensación de seguir bebiendo, esté día debía de ser el mejor para mí, pero se estropeó. Sigo sin poder sacarme de la cabeza a Jack. Tal vez después de llamar a Ethan pueda regresar y disfrutar. Depende de lo que Ethan diga. Levanto la vista para observar la distancia que me queda y también miró hacia atrás para ver que tan cerca está el bar. Un hombre con la cabeza gacha se para en seco como si no supiera a donde ir y entra a un callejon. ¿Qué fue eso? Maldita sea.
Si empiezo a correr, me puedo caer. ¿Qué demonios estoy diciendo?
-¿Qué quieres? -digo con voz temblorosa. No tengo a donde huir, sólo me queda enfrentarlo.
La silueta de un hombre sale y entrecierro los ojos para ver con claridad. No distingo su rostro, él lleva las manos en los bolsillos y no se parece a un secuestrador, al menos por la postura en la que está, no parece que me fuera a atacar. Da unos cuantos pasos y su rostro por fin aparece. Se me es muy conocido, pero no logró diferenciar bien. ¡Maldita iluminación!
- Me parece que necesitas lentes.
Oh...

Es Difícil Olvidar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora